Capítulo III - «¡Te amo Takemichi!»

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«Cada día me enamoró más de tí. Como la primera vez que te conocí, mi bello solecito de amor»

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La primera clase del día siempre era la más pesada, más si era matemáticas con el profesor Tachibana Naoto. Sus explicaciones eran sencillas pero tan confusas a la vez, es como si Baji le hablara todo el día de lo bonito que era Chifuyu pero luego trataba como tsundere para que se diera cuenta de sus sentimientos.

Ignorancia=Amor

Si, claro. El no era estúpido, no sería un idiota como Baji en ese tema. Las campana del recreo sonó, eso sólo significó una cosa “libertad”.

— Recuerden resolver los ejercicios de límites para mañana — comentó su profesor guardando sus cosas — página 78, 79 y 80. Entendieron, niños.

— ¡Si profesor! — dijeron todos rumbo a la cafetería para disgustar de su delicioso almuerzo.

En eso Haruchiyo se aproximó hacia la aula 3-B de Takemichi para llevarlo detrás del árbol de cerezo de su escuela para efectuar su tierna declaración. Todo saldría perfecto, tal como lo había practicado con su hermana.

Sólo debía ser el mismo y no ser tímido al expresar lo que su corazón quería. Aunque eso implicará un posible rechazo o una aceptación por parte del amor de su vida.

«Sea lo que sea, lo aceptaré con gusto»

Se golpeó las mejillas en forma de ánimo, se dirigió hacia ese salón con toda la valentía del mundo.

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Efectivamente este día iba ser el mejor del mundo en su baúl de recuerdos. Entonces ¿Qué hacía Sano Manjiro conversando con su solecito de amor?, además porque estaba todo golpeado y con manchas de sangre en su rostro.

¡¿Qué mierda había pasado?!

Quería respuestas y las encontraría ahora mismo.

— ¡¡Takemichi!! — gritó su nombre a lo lejos, cubriéndolo en un profundo abrazo. Mientras examinaba cada parte de su cuerpo, no le gustaba lo que estaba viendo  — dime, ¿quién fue? ¿Quién se atrevió a lastimar tu lindo rostro, Take?

— Haru estoy bien, no es nada — respondió amablemente, ignorando el hecho de que Draken y Mikey observaban atentos la escena de amor — por cierto, ellos dos me salva... ¿Haru?

El semblante amable de Akashi cambio a un repentino desprecio hacia esas dos figuras. Algo que resultó nuevo para Takemichi, pero común para los capitanes de la Toman.

— Lo voy a preguntar sólo una vez, fueron ustedes dos quienes lastimaron a Takemichi — cuestionó conteniendo su ira — que pasa les mordió la lengua el ratón o que.

— Para nada Sanzu, sólo que estamos sorprendidos por tu actitud — Mikey sonrió gratificante — esa nueva faceta tuya no la había visto nunca. Me alegra haber golpeado a Takemitchy.

★Mi Lindo solecito★ - SanTakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora