I lιкє ρєяsσηs

09

Había pasado tan solo un día desde que Felix y Changbin no contactaban el uno con el otro, era lunes, se encontraban de camino a la casa de Seungmin como hacían todas las mañanas para ir juntos al bachillerato. Normalmente estarían charlando animadamente mientras que Felix pasaría su brazo por el de su mejor amigo, pero aquel día todo se sentía distinto. Estaban bastante alejados el uno del otro, cualquiera que les viera por la calle se pensaría que no se conocían.

Cuando Changbin había llegado a la casa del australiano para recogerle le recibió Somi, la madre de éste, y le invitó a pasar a la casa mientras esperaba a Felix, quien extrañamente se había levantado algo tarde aquel día.

El pelinegro pensó en que tal vez había hecho mal en ir a buscarle después de lo que pasó. Cuando vió al pelimorado en la puerta del salón haciéndole una señal con la cabeza para que se fueran ya se sintió extraño, Felix parecía otra persona, no tenía aquella hermosa sonrisa en su rostro.

-¿Te encuentras bien?- se atrevió a preguntarle el coreano al no poder sacar la extraña expresión de Felix de su cabeza.

-¿Y tú, estás bien?- le devolvió la pregunta evitando responder.

-He estado mejor- respondió Changbin -¿Estás así por lo que te dije el otro día?- le preguntó casi susurrando.

-No quiero hablar del tema Changbin-

-Bien, como quieras, pero puedes confiar en mí si te ocurre algo- le dijo mirando su perfil por primera vez en aquel día, dándose cuenta de que cada uno estaba en un lado distinto de la acera, dejando de ese modo un hueco notorio entre ellos.

No pudo evitar tragar saliva fuertemente y fijar la vista en el suelo de nuevo mientras suspiraba intentando relajarse, no quería llorar más.

Cuando llegaron a la casa de Seungmin y éste se unió a ellos el chico notó algo extraño en sus amigos, normalmente conversaban sin parar en el camino al bachillerato, pero aquella vez ni se miraban.

-¿Alguno me va a decir qué es lo que os pasa?- preguntó Seungmin tiempo después de haber estado caminando en silencio.

-Estoy algo cansado, eso es todo- dijo Felix con la vista fija en el frente.

Estaban en el recreo, y como de costumbre empezaron a jugar al baloncesto, aquella vez jugarían para el desempate de la otra vez, por lo que los equipos seguirían siendo los mismos.

Changbin se había dado cuenta de que Seungmin no había parado de mirarles a él y a Felix. Era su amigo cercano, por lo que estaba seguro de que el coreano sospechaba de que algo había ocurrido entre el pelimorado y él, al fin y al cabo no se habían dirigido la mirada y no habían hablado en ningún momento quitando la pequeña conversación que tuvieron a la mañana, si es que a aquello se le podía llamar conversación.

-Hey Seungmin, es tuya- le dijo Jisung pasándole el balón.

Changbin corrió para estar más cerca de Seungmin y así servirle de ayuda si es que no le dejaban espacio para llegar a la cancha. Se sorprendió cuando Bangchan se puso en frente suya, quitándole de ese modo toda oportunidad para ayudar a su amigo. Por algún motivo hizo contacto visual con el chico enfrente suya, no pudo evitar mirarle confundido al ver cómo este le sonreía de forma engreída. Normalmente no se tomaban tan en serio aquellos partidos en los recreos.

-Changbin, sal de ahí como sea, necesitamos tu ayuda- le dijo aquella vez Seungmin, quien estaba intentando evitar a Hyunjin y Felix, mientras que Jisung intentaba meterse en medio para distraer a sus contrincantes.

-Con que te gusta Felix- dijo Bangchan captando la atención de Changbin inmediatamente.

Changbin no sabía que decir, ¿Felix le había contado sobre aquello?

-Felix vino a mi casa con una mochila, no parecía contento, por lo que me contó lo que había ocurrido- Changbin no comprendía porqué le estaba contando aquello -Después de que me contara todo me besó para distraerse, no sé cuanto tiempo estuvimos de ese modo-

Changbin no pudo evitar tragar saliva al sentir como su corazón se estrujaba, sus celos aparecían y se formaba un nudo en su garganta.

-Cállate, no me interesa lo que hagáis o dejéis de hacer- le dijo viendo como Bangchan soltaba una corta risa en forma de burla.

-Solo te estoy diciendo que Felix me quiere a mí, no te metas en nuestra relación-

-Para empezar no me he metido en vuestra relación- le dijo notando como su sangre comenzaba a hervir.

-¿Entonces por qué mierdas te declaraste a él?- le preguntó aquella vez dejando a parte las bromas y poniéndose más serio.

-Solo quería que lo supiera, no podía esconderselo más tiempo- le confesó -Ni siquiera sé por qué estoy hablando sobre esto contigo- le dijo intentando quitárselo de enfrente para porfin ir a ayudar a Jisung y Seungmin, quienes no lograban llegar a la cancha contraria.

-Por tu culpa está serio, tú más que nadie debería de saber que es muy raro verle de ese modo. La próxima vez que le vayas a decir algo piénsalo antes de hacer nada- le dijo poniéndose de nuevo en frente suya.

-Cállate de una vez- le dijo apartándole hacia un lado, se quedó confundido al ver cómo Bangchan se tiraba al suelo fingiendo haberse hecho daño en la pierna.

-Oh, Dios, ¿Channie, estás bien?- le preguntó Felix dejando a Seungmin en paz para ir corriendo hacia donde se encontraba su novio.

-Creo que me he torcido el tobillo- se quejó tocándose la supuesta zona adolorida.

-Changbin, ¿Por qué le has empujado?, se supone que todos aquí somos amigos- le preguntó Felix mirándole por primera vez aquel día.

-No le he empujado- se defendió Changbin sin terminar de comprender lo que estaba sucediendo.

No pudo evitar sentirse peor al ver cómo Felix desviaba la vista de la suya y soltaba una risa irónica mientras ayudaba a Bangchan a levantarse.

-Voy a llevarle a la enfermería, Jisung, ¿Puedes ayudarme?- le preguntó, a lo que el chico asintió acercándose a ellos.

Changbin solamente pudo quedarse viendoles desde lejos mientras pensaba en lo que había ocurrido. Bangchan quería alejarlo de Felix, de cualquier forma.

-¿De verdad le has empujado?- le preguntó Hyunjin acercándose hacia donde Changbin y Seungmin se encontraban.

-Yo no le he empujado- dijo para después alejarse de ellos, entrar en el centro y dirigirse al baño para relajarse un poco.