No pasaron muchas semanas cuando planearon un pequeño viaje de un día para ir a esquiar. Felix y Changbin seguían sin hablarse, y Bangchan intentaba mantener a su novio alejado del pelinegro.
-Hey Changbin, ¿Vienes con nosotros hasta arriba?- preguntó Jisung, quien hacía unos días se tiñó el pelo de color azul, el cual hacía contraste con la nieve.
-Me quedaré un rato en la cafetería, subir vosotros, iré después- les dijo a Hyunjin, Seungmin, Minho, Jeongin y Jisung.
Minho era el hermano mellizo de Bangchan, había empezado a quedar con ellos una vez su hermano les presentó. Minho no tenía muchos amigos, solo a Jeongin, quien había estado junto a él desde infantil, a los dos les costaba conocer a nuevas personas, por lo que Bangchan les ayudó un poco. En aquel momento se podía ver fácilmente la confianza que lograron tener los unos con los otros en tan poco tiempo.
Changbin desvió la mirada desde los cinco animados chicos hacia Bangchan y Felix, quienes estaban tirándose bolas de nieve mientras que de vez en cuando se abrazaban. El pelinegro dejó que una pequeña sonrisa se formara en su rostro al ver cómo su mejor amigo se la pasaba bien.
Podía ser que Bangchan no fuera amable con él, pero aquello no significaba que se comportara igual con Felix. Si ese chico le hacía feliz a su mejor amigo no iba a hacer nada para detenerlo.
Tragó saliva fuertemente cuando notó cómo un nudo comenzaba a formarse en su garganta, desvió la vista de inmediato y se dirigió a la cafetería que había allí al lado. Solamente había ido a aquel lugar porque Seungmin, Hyunjin y Jisung le insistieron. A él ni siquiera le gustaba esquiar, era algo que le daba miedo hacer por alguna razón. Por lo que posiblemente se quedaría todo el día en aquella cafetería esperando a que alguno de sus amigos se cansara. Cosa que veía imposible al ver lo animados que estaban por ir a aquel lugar.
-Un chocolate caliente y media docena de churros por favor- le pidió a la camarera, quien asintió y en seguida se puso a preparar aquello.
Mientras esperaba no pudo evitar mirar por el gran ventanal, soltó una corta risa al verse a sí mismo mirando de nuevo a Bangchan y Felix. Cualquiera pensaría que le gustaba sufrir, y lo pensaría aún más si supiera que el pelinegro cogió su chocolate y churros después de haberlos pagado y se sentó frente aquel ventanal. No podía evitarlo, el que Felix ya no le hablara ni casi le dirigiera la mirada no significaba que el pelimorado dejara de gustarle, a sus ojos seguía siendo la persona más bella que había conocido y visto en lo que llevaba de vida.
-Disculpa, ¿Estás solo?- le preguntó alguien haciendo que desviara la atención hacia aquella persona.
-Oh, sí- respondió aclarándose la garganta.
ESTÁS LEYENDO
I lιкє ρєяsσηs
Fanfic°𝚄𝚗 𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚗𝚘 𝚌𝚘𝚛𝚛𝚎𝚜𝚙𝚘𝚗𝚍𝚒𝚍𝚘 𝚚𝚞𝚎 𝚙𝚘𝚍𝚛í𝚊 𝚜𝚎𝚛 𝚌𝚘𝚛𝚛𝚎𝚜𝚙𝚘𝚗𝚍𝚒𝚍𝚘 𝚖á𝚜 𝚊𝚍𝚎𝚕𝚊𝚗𝚝𝚎° ➡𝙃𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧í𝙖 100% 𝙢í𝙖. ➡𝙍𝙚𝙨𝙥𝙚𝙩𝙤 𝙚𝙣 𝙡𝙤𝙨 𝙘𝙤𝙢𝙚𝙣𝙩𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨 𝙤 𝙚𝙨𝙩𝙤𝙨 𝙨𝙚𝙧á𝙣 𝙚𝙡𝙞𝙢𝙞𝙣𝙖𝙙𝙤𝙨...