Carta 10

79 3 1
                                    

Querida Alice,
La última charla que tuve contigo fue hace 29 días, no quisiera recordar la conversación y no la recuerdo del todo, pero si recuerdo perfectamente la palabra terminamos.
Otra vez soñé contigo, esta vez estaba en una estación de un metro, estaba vacía, solo las luces blancas titilaban sobre el techo, tú estabas al otro lado de la estación, solo nos separaban los rieles por el que pasa el metro. "Thomas" dijiste. Yo sabía perfectamente lo que tenía que hacer: llegar al otro lado de la estación. El tren ya venía en camino, las luces alumbraban al fondo de la estación, pero venia demasiado rápido. Tenía que saltar en el momento o no podría alcanzarte, así que lo hice.
Tome impulso y justo cuando estaba suspendido en el aire pronunciaste: Terminamos. Entonces todo se evaporo y quede flotando en el vacío.
Luego abrí los ojos y volví a mi realidad.

El día después de que nos reunimos en el Pour les amateurs empecé a investigar sobre la Universidad ala que entraríamos juntos y entre más la observaba más me gustaba. Así que hice clic donde decía como realizar las inscripciones tenía todo, menos el certificado de graduación, que obtendría unos 3 meses después.
Entre todo el papeleo, preparación y nuestras citas se me había olvidado algo que era muy significativo para mí. Me lo recordó mi amigo Ben tres días antes del evento.
-Y ya alquilaste la limosina- pregunto, mirándome con sus ojos verdes.
-¿Limosina?- dije riendo mientras sacaba los cuadernos del casillero-¿Para qué?
-No puedo creer que lo hayas olvidado- dijo.
-¿Qué?
-La fiesta de graduación- dijo gritando- ¿Enserio lo olvidaste?
-Si- exclame un poco confundido.
-Vaya viejo, esa chica te tiene distraído- dijo Ben mientras me da una palmada en la espalda e iba a su salón de clases.
No tenía ninguna cita en ese momento
Pero sabía perfectamente con quien iba a ir.

El día antes de la fiesta de graduación nos encontramos en el Pour les amateurs, para ese entonces ya habíamos tomado otra foto y la había puesto en el marco de nuestros meses que hemos pasado juntos.
-Tengo que decirte algo- te dije mientras acariciaba tu mano
-¿Qué?- preguntaste con una carita curiosa y un brillo en tus lindos ojos azules.
-Mañana vamos a ir a algún lugar en la noche te recojo a las 7 ¿Ok?
-Ok, pero ¿A dónde?- preguntaste
-Es una sorpresa, te aseguro que te va a gustar.
Me sonreíste y apretaste más fuerte mi mano.
-No importa a donde vayas Tom, siempre estaré contigo- me afirmaste.
Y apreté con más fuerza tu mano

El Volkswagen Rojo estaba parqueado a las 6:59 frente a tu casa, llame a tu celular para avisarte que ya estaba abajo, tú me respondiste con un bajo en 5 minutos. Me ajuste la corbata, encendí la radio y una canción de los 80 empezó a sonar. "Estaré será una de las mejores noches de mi vida" pensé "Y nada lo arruinara". Y así fue, fue una de las mejores noches de mi vida.
Bajaste 5 minutos después, tal como lo habías prometido, ibas con un saco rojo que te llegaba más arriba de los muslos y unos leggings negros. Te metiste al auto y me besaste. Yo ya había pisado el acelerador.
-Hola- dijiste mientras me acariciabas la mejilla.
-Hola te ves preciosa- dije
-Tu tambi... ¿Por qué estas vestido de traje? ¿Es algo formal? ¡Retrocede mira como me arregle!- gritaste.
-Calma- dije mientras te pasaba un paquetito envuelto que estaba en la parte de atrás del auto.
Me miraste sorprendida y abriste el paquetito. Miraste el vestido que te había comprado unas horas antes de nuestro encuentro.
-Es precioso- dijiste estupefacta- me encanta este Amarillo.
-Tu novio sabe todo sobre ti- explique, tú me sonreíste y me besaste en la mejilla.
-Gracias Cariño.- me dijiste- Ahora ¿Me puedes decir a dónde vamos?
-A mi fiesta de graduación.
-¿En tu escuela?
-Claro- respondí mientras me detenía en un semáforo-Puedes cambiarte allá.
-Diablos- exclamaste- los zapatos- miraste tus converse amarillos.
-Dios...Lo siento.
-Parece que mi novio no piensa en todo- dijiste riendo.
-Pero te ama a más que nadie en el mundo.
-Yo a él y eso es lo que me importa.
-Además no critiques al pobre de tu novio, por lo menos tus zapatos combinan.
Te reíste y dijiste:
-Hagamos de esta la mejor noche de nuestras vidas- dijiste tomando mi mano.
-Así será- afirme, y le subí el volumen a la música.
Y empezó la mejor noche de toda mi vida.

Me recosté contra el marco de la puerta por la que se entraba a la fiesta, varias parejas entraban, algunos me saludaron y me dijeron: "Thomas ¿Te han dejado plantado?" "¿Y tu novia?" "Entra, ya llegara tu chica". Yo solo los ignoraba y te esperaba para que entráramos juntos. Al final saliste del baño con el vestido puesto y la bolsa con la otra ropa en una mano.
-Te ves...-dije impactado. Te veías perfecta. Eras la chica más hermosa de todas las que estabas en la fiesta. Destacabas sobre todas y cada una de ellas. Era como si tu fueses la luna y todas las otras chicas las estrellas-Maravillosa.
-Gracias- dijiste sonriéndome-Acompáñame a guardar esto- agitaste la bolsa que tenías en la mano.
-Claro Preciosa- te respondí, agarre tu mano y salimos a la calle fría y oscura, pero mientras estuviera contigo todo sería calor y luz.

-¿Lista?- te pregunta mientras sostenía nerviosamente tu mano. Estaba ansioso.
-Si ¿Tu?- respondiste.
-Más que nunca-apreté con más fuerza tu mano. Y di un paso adelante, y entramos al gimnasio.
Estaba repleto de gente, mesas alrededor cada una con copas llenas de agua y champaña, al fondo la tarima, a un lado del gimnasio estaba la mesa del ponche y algunos bocadillos.
-¡Thomas!- gritó mi amigo a Ben mientras se acercaba con una chica pelirroja siguiéndole.
-Ben- exclame yo, mientras nos dábamos un abrazo fraternal con mi amigo
-¿No nos vas a presentar?-respondió el.
-Alice él es mi amigo Ben. Ben ella es mi novia Alice- dije. Le estrechaste la mano.
-Por fin nos conocemos, es un placer, Thomas no hace más que hablar de ti- comentó Ben. Buena esa, amigo.
Me miraste y sonreíste.
-Para mí también es un placer, Ben- le dijiste.
-Y ella es...-exclame mirando a la pelirroja que venía con Ben.
-Bella él es mi amigo Thomas. Thomas ella es mi novia Bella- anunció el.
-Un gusto- dije estrechándole la mano a Bella.
-Ven Thomas tenemos una mesa por allí- dijo Ben señalando una mesa cerca a la tarima.
-Lindos zapatos- oí que Bella te dijo, yo ya estaba adelantado.
-Por lo menos combinan con el vestido- dijiste. Esa es mi chica.
Y pude notar que Bella y tú no se agradaron.

El director de colegio alzo su copa y choco un tenedor contra ella para llamar la atención de todos. Era la hora del discurso.
-Queridos futuros graduados, es un honor tenerles aquí presentes...-empezó el director
Empecé a buscar tu mano por debajo de la mesa hasta que por fin la encontré, la agarraste con fuerza. Pusiste tu cabeza en mi hombro.
-Te amo-murmuraste.
-Yo a ti- respondí.
Con tu cabeza en mi hombro, sentí como si el mundo se hubiera congelado y todos mis problemas, todas mis preocupaciones se hubieran evaporado.
-Te amare por siempre- dije con la seguridad

Y es verdad.

Hoy, todavía te sigo amando. A pesar de que lo nuestro se hubiera acabado.

Con cariño,
Thomas

Cartas a AliceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora