Luego de lo que sucedió en el colegio Pedro se había sentido mal por haberle dicho esas cosas a su amigo, quien sólo quería saber algunos consejos y las experiencias que se tienen como hermano mayor. Pedro no quería disculparse pero la culpa estaba atascada en su pecho, casi no lo dejaba comer ni siquiera.
-Me siento bien, no siento culpa alguna.-se decía Pedro, intentando mostrarse que estaba seguro de lo que decía.
Llegaron las 9:00 p.m y la mamá de Pedro lo había mandado a dormir, se despidió de sus padres y se fue a dormir.
Intentando dormir, Pedro se revolcaba en la cama pero no conseguía la manera de dormirse, la culpa lo torturaba.
-¿Qué me está pasando?-dijo Pedro preocupado- es hora de dormir, ¿por qué no me duermo?-
Entonces, le vino a la mente una imagen de José que le decía:
-Pedro, pensé que éramos amigos, ¿por qué me hiciste esto Pedro?-
De repente vio que al lado de José estaban sus padres que miraban a Pedro con caras enojadas:
-¿Qué te pasa Pedro? Esas no son formas de cuidar a un hermano, que niño tan malo eres; nos decepcionaste.-
Le vino a la mente una imagen de Felipe, hablando y totalmente triste:
-¡Pedro! Pensé que me querías, no sabía que me detestabas tanto- decía el niño llorando.
En seguida Pedro despertó, vio que todo había sido una pesadilla nada más, pero tenía que disculparse con José, con Felipe y disculparse con Dios por hablar tan mal de su hermano, que es un regalo de Dios.
Eran las 3:00 a.m cuando despertó.
-Está muy temprano, pero es mejor antes que nunca- dijo Pedro.
Se puso sus sandalias y fue a ver a su hermano, quien estaba durmiendo en su cómoda cuna.
-Felipe- dijo Pedro- oye sé que apenas tienes 3 o 4 meses de nacido y tal vez no puedas entender lo que digo pero, aún así te lo diré me escuches o no. Oye, mi amigo José me pidió un consejo de cómo ser un buen hermano mayor, al parecer pensaba que yo era uno de esos, y fui un incompetente, pues le dije que tener un hermano menor es lo peor y que no me ha gustado la idea de tenerte en mi vida; hice que José se deprimiera y hablé mal de ti. A veces me siento celoso por las atenciones que te dan, y quisiera que a mí me consintieran, sólo a mí, he actuado como un envidioso. No sé si puedes entenderme pero te pido que por favor me perdones, te prometo que me esforzaré por ser un mejor hermano mayor, y te prometo cuidarte siempre.-
Terminó Pedro con una lágrima que se resbalaba de una de sus mejillas y cayó en la frente de Felipe, sujetando la pequeña mano del bebé el mismo apretó la mano de su hermano mayor, como señal de que lo sentía.
Pedro se quedó ahí por un momento, se despidió de Felipe y luego se retiró a su habitación.
Estaba muy agotado, quería ir a dormir pero su trabajo no había acabado. Tenía que pedirle a Dios que lo perdonara.
-Querido Dios, Padre mío. Te pido que por favor me perdones por haber dicho que no quería a Felipe en mi vida, acepto que actue como un tonto y reconozco que estuve celoso durante todos estos días, pues quería todas esas atenciones de mis padres sólo para mí, sin saber que mi hermano las necesitaba también. Ten piedad de mí y ayúdame a ser un mejor hermano mayor, como le prometí a Felipe, mi hermano menor y que mi amigo José pueda hacer lo mismo. Amén.- dijo Pedro arrodillado frente a un crucifijo que estaba colgado en una de las paredes de su habitación.
Rezó un Padre Nuestro y la oración de Ave María, y se fue a dormir felizmente; había recibido el perdón de su hermano Felipe y el perdón de Dios. Tan sólo le faltaba disculparse con José.
Y así hizo, eran las 7:00a.m y Pedro ya se encontraba en el colegio, esperando a José para disculparse con él.
Llegó José al colegio a las 7:10a.m, sorprendido por lo temprano que había llegado Pedro le dijo:
-¿Qué te pasó Pedro? Llegaste muy temprano hoy, me ganaste.
-Vine temprano porque quiero disculparme contigo lo antes posible- dijo Pedro- lo que te dije sobre tener hermanos menores fue totalmente falso, hablé mal de mi hermano e hice que te deprimieras por esas cosas que te dije. Oye, al principio me puse un poco celoso por las atenciones que le brindaban a mi hermano Felipe y quería que esas atenciones fuesen sólo para mí, por eso dije que haber tenido un hermano menor había sido lo peor que me hubiese pasado en mi vida; pero se me hizo difícil comprender que estaba equivocado, eso que dije no es cierto. Tener un hermano, ya sea menor o mayor, es una bendición, un regalo de Dios que debo aprender a amar y cuidar.-
-No te preocupes- dijo José- yo te perdono. Este fin de semana me hizo comprender lo valioso que es tener un hermano o una hermana y sé que jamás intentarías causarme algún daño, tan sólo querías ayudarme aunque no fue la mejor forma.-dijo José.
Pedro quedó conmovido ante tal respuesta, no le quedo de otra que demostrarle a su amigo lo feliz que estaba por tener su perdón, así que se acercó a José y le dio un abrazo.
-Gracias, José.- dijo Pedro- ahora ya tengo la conciencia tranquila, pues ya me disculpé con las personas con las que debía disculparme. Algo me dice que serás un buen hermano mayor.-
-Gracias, Pedro- dijo José contento- creo que tú también.
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Hermano, ángel guardián terrenal
RandomDesde que nacemos Dios nos regala un ser súper especial que nos acompañará siempre, en cada paso que tengamos que dar, llamado ángel guardián. No todo el mundo tiene la suerte de tener dos ángeles guardianes como los tuvo Valentina, uno es un ser ce...