5

89 2 5
                                    

Sabía que él lo había hecho a propósito, era un hombre demasiado diestro sexualmente el que tenía a mi espalda.

Colocó cada una de su mano en el antebrazo y empezó a empujar la tela del abrigo de mi cuerpo su mano rozaban lentamente la piel.

Cuando ya toda la manga del abrigo se había enrocado en mi muñeca impidiendo el movimiento de mis manos, se giró, el gris de su mirada penetraba intensamente la oscuridad llegando hasta mí, causando mil estruendos en mi alma.

Acercó su rostro al mío a tal punto que la punta de su nariz rozaba la punta de la mía, su cálido aliento me invitó abrir mis labios, deseaba tanto que lo tomara que lo hiciera suyo en un ferviente beso.

-puede que después me arrepienta de esto, pero tengo que hacerlo-

Aquella palabra en mi oído me debilitaron las piernas y como si lo hubiese notado su fuerte mano sujetó mi fina cadera en un acto seguido besó la punta de mis labios, sus dulces labios atraparon un jadeó en un caliente beso, tomó mi cuello con un poco de presión atrayendo mi cuerpo a su duro y musculoso pecho, estaba tan caliente y agitado que su respiración era un mecanismo y estimulante de placer.

Acto seguido quise poner mis manos en su hombro o su espalda quería pegarlo a mí así como él me pegaba a él, pero el abrigo a media me lo impida, aquello me llenó de una rabia que enfrió toda la emociones anterior por lo que intenté detener él besó, pero sus labios tomaron lo mío en un acto feroz y mordisqueo suavemente su mano se deslizó hacia mis nalgas y me estrujó ante la dureza que se escondía en su pantalón, él estaba excitado al igual que yo.

-mmm- por Dios había olvidado por completo la presencia del mesero al escuchar su intromisión di por terminado el beso y me alejé dos pasó del señor cloeé sacudí con fuerzas mis brazos arrancando sin delicadeza él abrigó y se lo pasé al camero aquel se marchó sin decir una palabra.

permanecimos en silencio, Jaime se dispuso a jalar una silla para que yo pudiese acomodarme mire dudosamente porque no quería caerme delante de semejante hombre que con solo caminar desmotaba lo talentosos que era y si me negaba a recibir ese asiento y tomar otro posiblemente iría al suelo.

- ante de que lo pregunté creó qué una gran parte ya asido explicada- llenó mi copa de un vino exquisito y la de él con un whisky.

- a que se refiere señor cloee- no tenía ni idea e lo que sus palabras decían lo único que deseaba saber por qué me había invitado aquí? Y que fue todos aquello?.

"A qué es claro que está aquí porque la deseó- cualquier otra persona que dijera esto abría recibido un vaya a tomar por el culo, pero viniendo de él solo hizo que mi piel se erizará- y está más que claro que tú me desea a mi - estuve a punto de atragantarme con aquel descubrimiento - ahora tendrá el valor de contradecir tu cuerpo alba?-

Aquella pregunta me hizo pensar en todas las veces qué me han intentado enamorar qué me han intentado llevar a la cama y en ningunas de aquellas veces caí, pero en ninguna sentí nada de lo que esté hombre me había hecho sentir.

Tenía 23 años y nunca había salido de una rutina diaria, siempre hacia lo mismos y jugaba a lo mismo quizá era tiempos de atreverme a un poco más, de tomar una decisión con seguridad en mi voz.

Quédate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora