You are my l1fe

238 30 3
                                    

Hola :)

Quería hacer una breve aclaracion sobre esta historia. Iba a ser un shot pero decidi dividirlo en pequeñas partes... por alguna razón que no tengo idea, pero aqui estamos una vez mas.

De igual forma, gracias por seguir del otro lado les mando un abrazo 💖

-------☆☆☆-------

La vida puede cambiar en un segundo, o eso había escuchado varias veces. Sin embargo, siempre eligió no creer, lo tomaba como un dicho... claro, hasta que le pasó. Fue una cosa tan rápida, casi una fracción de segundo tomó, como para poner en manos de alguien más la vida de la mujer que amaba.

El olor a gasolina era intolerable, sus costillas dolían, al igual que todo su cuerpo. Sin embargo solo una cosa le importaba. Existía algo más importante para Alex Vause que su propia vida: Piper.

Flashback

El día había comenzado de manera estupenda. El primer rayo de sol que entró por el ventanal de su habitación la removió en su sueño, y terminó despertando para encontrarse con un panorama inclusive mejor que en su sueño.

La rubia escondió el rostro en su cuello, y la tenía tomada por la cintura. A la pelinegra le fue inevitable sonreír ante aquella imagen, tantas veces había soñado poder despertar al lado de la mujer que amaba. Y aún le parecía surreal... lo que la mantenía optimista era el aliento de Piper golpeando su piel.

-Buen día amor...-dijo con una voz algo ronca, y la rubia sonrió hundiéndose más contra ella. Alex comenzó a acariciar su cabello, y poco a poco dejo bajar su mano hasta la cintura de la otra mujer, donde reposo sin apuro.

-Mmmm... Al, ¿que hora es?-preguntó, se notaba cierta felicidad en su voz, quizás la noche anterior mucho tenía que ver con su estado de animo. Alex lo noto, y en seguida carcajeo.

-Temprano... o tarde para nuestros planes. Depende como lo quieras ver-respondió, siempre tan pragmática. Piper resoplo un poco, estaba justo donde queria estar. En la cama, con la mujer que más amaba en todo el planeta y oliendo el rico aroma de su piel. La rubia no se queria mover, pero habían hecho planes días atrás y quería cumplir.

A duras penas se incorporo quedándose sentada y miró al frente. Alex levantó una ceja y tomó su nuca para que la otra volteara...-creo que se te olvido algo, mi amor-comentó en modo juguetona. Piper entrecerro los ojos pensativa, como si no supiera de lo que Alex estaba hablando.

-Mmm, no lo creo Al-mintió, escondiéndose una sonrisa. Alex solo la miro, expectante. Finalmente Piper tomó su cabeza para besarla dulcemente...-buen día, cariño-dijo contra sus labios. Quiso levantarse pero Alex no la dejo, sino que la sostuvo y se volvió a recostar, Piper cayendo encima suyo.

Piper se tento de risa, mientras que la otra solo la miraba de forma penetrante. Alex estaba profundamente enamorada de la rubia, y disfrutaba el tiempo que tenía para poder contemplarla como una obra de arte. Las mejillas de la rubia se tiñeron levemente de rosa por la forma en que Alex la veía.

-¿Qué?-preguntó inquieta, intentando zafarse del agarre, pero Alex lo tenso más.

-Nada-respondió la pelinegra con soltura y continuó con su tarea de observación. Piper se mordio los labios y rodó los ojos.Hacía más de un año que estaban saliendo y todavía no lograba entender algunas cosas que la otra hacía, como quedársela viendo en silencio.

-Se hace tarde Alex, vamos-rogó la rubia, volviéndose a mover. Alex movió la cabeza de un lado a otro en señal de negación.

-Te soltare solo si me das un beso-inquirió haciendo que Piper resoplando y descendiera hasta quedar a escasos centímetros de su rostro.

Vauseman ONE-SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora