Él o Él

Cap #11 :

Adicción:

Al salir de la playa, recogimos nuestros uniformes y nos dirigimos a la casa. Nos adentramos en ella y ambos tomamos un baño, Rodrigo en el baño de la planta baja y yo en el de arriba. Rodrigo me dio las indicaciones de como llegar a su habitación para así tomar lo q quisiera de su ropa para poder sentirme mas cómoda. Una vez q salí del baño, envuelta en una toalla, me dirigí a su cuarto, encontrándome con una habitación parecida a la de los príncipes en las películas, era realmente bella, de colores tenues como gris o algunos tonos azulados, no era muy colorida q digamos. Al encontrar su armario, fui hacia este, abriéndolo y encontrándome con una cantidad de ropa y zapatos enormemente grande, ahí no cabía nada mas, y así, el se llenaba la boca de decir q tenía algo de ropa almacenada, definitivamente esto era una exageración. Rebusqué entre sus cosas, hasta encontrar una camisa blanca de mangas largas, de una tela bastante parecida al algodón, la tome entre mis manos, y al probarmela, me quedaba lo suficientemente larga para tapar mis partes intimas. Obviamente, tuve q ponerme la ropa interior con la q había venido, pero logre q se sacara un poco. Luego, seque mi cabello con un secador q había por ahí y me lo cepille. Una vez lista, baje a la planta baja, encontrándome a Rodrigo, con solamente una toalla en su cintura, estaba descalzo, con todo su cabello callendole sobre sus ojos goteandole debido a lo mojado q estaba. Se veía... Irresistiblemente bueno

-Laura: Ya puedes subir -dije intentando sonar lo mas tranquila posible-
-Rodrigo: -me observo de arriba a abajo- Esa camisa, te queda mucho mejor q a mi sabias? -río pícaro-
-Laura: En serio? -dije siguiéndole el juego-
-Rodrigo: Si -rodeo los ojos- Oh perdón!! -por un momento me asusto- había olvidado q mi novia es tan hermosa q se ve bien con cualquier cosa q se ponga -sonreí y él se acerco lentamente a mi- Por q tienes q ser tan perfecta? Eso solo hace q todos los chicos te miren, yo te quiero solamente para mi... tu eres mía -dijo sujetándome de la cintura-
-Laura: -reí de lado- No se de por q te preocupas por algo q ya sabes -dicho esto, Rodrigo volvió a besar mis labios de una manera q se q nadie va a hacerlo jamás, me estaba volviendo adicta a él y a sus besos- Deberías vestirte -le dije susurrando en sus labios-
-Rodrigo: Lo q tu pidas preciosa -eso me hizo sonreir-
-Laura: No me llames preciosa -dije riendo atontada-
-Rodrigo: Ah no? Entonces como deseas q te llame? Hermosa? Bella? Escultura de los dioses? Cariño? Amor? Cielo? Querida? Pequeña? O mejor aun... Princesa?
-Laura: Basta tonto -le dije muerta de la risa mientras q el me sostenía fuertemente de la cintura evitando q cayera al suelo-
-Rodrigo: Me encanta verte sonreír -me dijo de momento mientras q yo me recomponía para poder mirarle a los ojos-
-Laura: A mi me encanta estar contigo -el sonrió embobado-
-Rodrigo: Laura... -dijo mirando al suelo- tu quieres a Kevin?
-Laura: -sonreí de lado- Habías tardado mucho en hacerme esa pregunta -Rodrigo volvio a mirarme- Eres tu Rodrigo -tome su cabeza entre mis manos delicadamente- desde q te vi por primera vez, con tu mal carácter y todo tu detestable ser, siempre has sido tu, creeme cuando te digo q no tienes de q preocuparte, tu eres el chico al q quiero
-Rodrigo: -sonrió- No sabes cuanto me alegra escuchar eso -dicho esto, me abrazo, no se por q pero sentí como si en el fondo, necesitara ese abrazo mas q nada en el mundo-
-Laura: Anda, ve a vestirte, se esta haciendo tarde y no quiero q te de un resfriado -le dije una vez nos alejamos un poco-
-Rodrigo: Esta bien, te veo al rato -asentí y el se despego suavemente-

Vi como Rodrigo se perdía entre las escaleras y luego, sonreí atontada por lo tierno q era mi chico, lindo y adorable, no podía sentirme mejor. Y pensar q yo fui quien hizo a toda esa mascara de "Ser Detestable" desapareciera. Jamás me hubiera pasado por la cabeza q Rodrigo podía llegar a ser tan cariñoso. Mire por la ventana viendo q ya se estaba poniendo el sol, como siempre algo indescriptible

Me dirigí hacia uno de los grandes muebles q daba d cara a dicha ventana y me senté en el medio con mis piernas unidas. Me quede allí, hasta q sentí como alguien se sentaba a mi lado, era Rodrigo, vestido con una playera azul oscura, y unos shorts negros por encima de sus rodillas