Christie:
Pronto terminarían las clases y podría salir corriendo a comer, sentía un gran vacío en mi estomago ¡Me estoy muriendo de hambre!
Anna toda la mañana estuvo extraña, sentía que me estaba ocultando algo y cada vez hablábamos menos, con quien si estuve fue Ángel, se podría decir que se la pasó a mi lado, él me explicaba pacientemente todo lo que no entendía y a decir verdad se sentía un poco extraño tener a un hombre tan cerca durante tanto tiempo pero este chico olía muy bien y no era nada molesto conmigo, así que lo deje permanecer cerca.
- Christie - Estaba concentrada mirando el reloj de la pared hasta que Ángel de repente me sacó del trance - ¿Que piensas sobre mí?
- ¿Que? - lo miré confundida.
Él negó con la cabeza y se levantó del puesto para seguidamente salir del salón, fui tras él y hablé fuerte para que se detuviera, si lo hizo pero seguía dándome la espalda.
- Perdón, es que preguntaste tan de repente que no supe que responder - Me excusé, él metió sus manos en los bolsillos delanteros del pantalón, se me hizo extraño que no volteara siquiera a mirarme pero pensé en que tal vez Ángel esperaba que yo prosiguiera y así lo hice - Pienso que eres genial, eres amable con todos y también eres muy inteligente, creo que eres el único chico con quien vale la pena estar en ese salón la verdad...
Realmente no sabía que mas decirle, mi mente estaba casi en blanco por el hambre que tenía, ademas creo que exagere con lo que dije al final, Ángel aun no se daba la vuelta pero si lo escuché hacer un pequeño ruido, algo como ¿"Ja"? ¿será que Ángel estuvo todo el tiempo depresivo o algo así y yo ni lo noté? ahora me sentía un poco mal por no darme cuenta de que él estaba mal.
No sabía que hacer y lo primero que se me ocurrió fue ir hacia él y darle un abrazo por la espalda, siempre que Anna me veía triste solía abrazarme y con eso me ayudaba bastante a sentirme mejor, así que ¿Porqué no? en el poco tiempo que llevo conociendo a Ángel me ha parecido una buena persona y creo que ya podría referirme a él como a un amigo.
- ¿Confías tanto en mí? - su voz parecía más animada y no me apartó sino todo lo contrario, sacó sus manos de los bolsillos y las puso sobre mis brazos.
Asentí con la cabeza, puede que no me pudiera ver pero si me podía sentir en su espalda. Al final salimos juntos y aunque se ofreció a llevarme no quise molestarlo tanto.
Me sentí muy sola luego de que se fue, Anna ya tampoco podría acompañarme y eso significaba que tendría que acostumbrarme a esto.
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EL REAL
Teen Fiction"El real" no es solo una universidad de alto prestigio, es la más cara y prestigiosa del país, por primera y única vez aceptaría dos becados, serían los que tuvieran las notas más altas en el examen de ingreso. Todos sus estudiantes son hijos de p...