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Christie:

Salimos y le conté a Anna que tenía que darme prisa en llegar a casa y que si todo salía bien le contaría la razón, ella asintió y nos fuimos casi corriendo. 

Apenas entré en mi casa fui a cambiarme y luego comí a las carreras, faltaban tan sólo dos horas y el centro quedaba como a una hora caminando, obviamente no tengo para autobús así que debía apresurarme.

- Christie...

- ¿Mm?-Mi madre justo me habló cuando me estaba cepillando.

- Te llama un compañero de la Universidad

Comencé a toser luego de escuchar eso ¿Un compañero? pero si sólo me llevo bien con Anna ¿Será Angel? ¿Será una broma? Me enjuague la boca y tomé el celular rápidamente.

- ¿Bueno?- Eso lo dije sobresaltada ya que seguía de afán.

- ¡Hola!- ¡Oh no! era la voz de Benjamín- Oye, tu madre es un amor...

- ¿Qué quieres?- Le interrumpí.

- Ah, sí ¿Cuánto calzas? -No podía creer que me llamara para preguntar eso, tal vez sólo quería fastidiar, pero fuera cual fuera la razón no me importó y le colgué.

Me despedí de mi madre y le dije que iría a trabajar, todavía no me atrevía a decirle que me echaron del restaurante y menos que fue por enfrentar a mi jefe.

Caminaba rápidamente y miraba mi sencillo reloj de mano cada cinco minutos, pero llegar al centro se me hacía eterno...

... Llegué justo a tiempo a la heladería del centro y antes de entrar di un hondo suspiro, adentro habían varios clientes ya atendidos y sólo había una señora en la caja registradora, era una señora ya algo anciana y bajita, me acerqué a ella y le dije que venía por la entrevista.

- Oh, sí- Me miró de arriba a abajo y aunque me había puesto mi mejor atuendo, era evidente que soy una chica pobre - Soy Soledad pero para ti Jefa, estás contratada.

¿Qué? ¿Contratada así nomás? abrí mis ojos con sorpresa, ella sólo me sonrió.

- ¿Entonces puedo comenzar ya? -La miré con emoción.

- Sí por supuesto, tu compañero de trabajo te indicará donde está todo y como son los precios ¿Está bien?- ¡Que señora tan amable!

- Claro ¿Donde está él?

- Ese vago siempre llega tarde, pero tú lo debes conocer mejor que yo.

Hice una mueca de confusión, ¿Conocerlo mejor que ella? Al parecer se dio cuenta de mi confusión y nuevamente sonrió.

- Ya entiendo todo, por eso me dijo que en la llamada te dijera sólamente "Es una entrevista de trabajo" sin más detalles- La señora pareció divertirse con mi confusión- Ese idiota, no pensé que se interesara en una jovencita humilde jamás.

Ahora si me dejaba aún más confundida, pero justo cuando le iba a preguntar el nombre de la persona que me recomendó, él entró y sabía que era así porque la señora suspiró y señaló hacia la entrada, di media vuelta y abrí mis ojos nuevamente por el asombro, él era...

- ¡¿Benjamín?!- Lo dije bastante alto y todos los clientes voltearon a mirar- ¿Tú?

Él sonrió divertido y luego se acercó para saludar a la Jefa ignorándome a mí por completo, ella lo regañó por no haberme dicho nada, mas él sólo se echó a reír. Siguió ignorando todas mis preguntas y me enseñó toda la  heladería, era amplia y bonita por todos lados, también me enseñó los precios de todo.

- ¿Podrías enseñarme cómo servir las cremas y lo demás?- Pregunté después de apuntar todos los precios en mi agenda.

- Christie, yo me encargo de eso y tú de llevarlo a las mesas.

- ¿Pero no es mucho para tí?

- Sólo trabajamos en semana, la mayoría de los clientes vienen en fin de semana, no es tan difícil- Dijo manteniendo su típica sonrisa, eso me hizo preguntar cómo se vería Benjamín triste...

- Ahora te responderé las otras preguntas- ¡Por fin!- ¿Por qué trabajo aquí? Mi padre dice que no sirvo para nada así que decidí trabajar para esa señora, es un amor- Se refería a la Jefa- Y un pajarito me dijo que te quedaste sin empleo y como buen compañero decidí ayudarte...

- ¿Buen compañero?- Arqueo una ceja- Supongamos que eres un buen compañero, entonces ¿Cómo sabes mi numero?

- Mi padre es el jefe y director de la universidad, no fue tan difícil.

Al parecer hoy no me dejo de sorprender ¿Quién es Benjamín exactamente y porqué me ayuda? Me mostró mi uniforme de empleada y apenas me lo puse comencé a trabajar con mucho ánimo, no quería decepcionar a la Jefa...

EL REALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora