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Esa noche podía recordarla con nitidez, el roce de su piel con la de otros al estar bailando en un sitio tan sumamente pequeño como lo era la sala de la anfitriona de aquella fiesta improvisada por su cumpleaños número dieciocho, Nayeon siendo su nombre, un nombre que resonaba siempre por los largos pasillos de esa preparatoria, todo el mundo por muy metido que estuviese dentro de una piedra sabía quien era Im Nayeon, una de las chicas más populares por su reputación y sus calificaciones las cuales a pesar de todo sobresalían de entre todos, extraño pero cierto, de un tierno físico y una personalidad que podía hacerte amarla u odiarla pero que al final de cuentas terminarías encantado por su tierna sonrisa parecida a la de un bonito conejo y de sus preciosos ojos color miel quien también por ciertos azares e hilos del destino terminaba siendo prima paterna de Felix, sí, de Lee Felix que en esos momentos se encontraba abusando un poco de sus límites con la bebida por su reciente pelea con quien consideraba ser su 'novio' aunque aún no era oficial siendo un simple coqueteo de parte de su mejor amigo.

- Hey Lix – habló la femenina voz hacia él haciéndolo levantar su triste mirar – No deberías estar bebiendo así aunque en primer lugar ni tendrías que estar aquí

- Pero es tu fiesta de cumpleaños y ya estoy demasiado grande para que me digas que no debería estar aquí – contestó frunciendo el ceño a la castaña quien solo le sonrió enternecida quitando el vaso plástico de su mano y tirando el contenido en el lavabo de la cocina – ¿Que haces?

- Lo sé Lixie pero tu eres más puro de lo que son todos aquí y tampoco quiero quedar como una irresponsable que no cuida de ti como te lo prometí – su calida y delicada mano acariciando la pecosa mejilla del menor que la miraba esperando algo másJeongin me llamó también, dice que esta preocupado por ti y que no quiere que estén peleados, deberías ir a verlo no se escuchaba bien

El chico frunció el ceño con enojo al escuchar el nombre salir de la mayor, negando al instante con la mirada firme.

- No Yeonie

ella suspiró rendida – No sé porque pelearon pero sé que Jeongin es testarudo, tendrás tus razones para enojarte pero no deberías beber más, quédate si quieres pero disfruta sin una bebida interfiriendo en tus venas ¿está bien? – él asintió con una sonrisa prometiendo con la mirada que le haría caso, saliendo de aquel lugar con ella antes de cada uno perderse en individualidad –

Felix caminó adentrándose de nuevo en la improvisada pista de baile donde los cuerpos adolescentes de sus compañeros se movían al ritmo de las canciones, unos solos y otros mucho más divertidos con la compañía de alguien mientras el prefirió ser de los solitarios que únicamente bailaba a su propio ritmo, sin prisas ni descaros, era únicamente un lindo chico disfrutando de la música sin mirar a alguien más, era él y solo él sin embargo cuando unas traviesas manos tomaron su cintura sin permiso, sus sentidos se dispararon haciéndolo exaltar y voltearse a punto de encarar al idiota que lo había hecho, su molesta expresión chocando con la divertida y relajada del peliverde frente a él que lo hizo molestar aún más, intentó safarse del agarre que para ese momento se había vuelto fuerte, cuando la cínica sonrisa hizo acto de presencia Felix se desesperó clavando sus uñas en la piel de las manos que lo sostenían haciéndolo doler, la expresión del mayor se deformo a una que expresaba dolor soltando el agarre de forma abrupta dispuesto a golpearlo cosa que no logró,  los pequeños ojos del menor se encontraban cerrados con fuerza esperando el impacto que nunca llegó,  lo único que escucho fue el susurro ronco de otra persona y luego su muñeca ser jalada sin cuidado reaccionando cuando el aire de la intemperie le golpeo en el rostro mirando al castaño frente a él que perfectamente reconocía.

¿Somos Padres? | MinlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora