Estaba recostado en su cama, seguía preguntándose, porque sus peores lo habían comprometido, en no quería casarse, no lo requería, ni lo necesitaba, estaba demasiado preocupado.
Que haría cuando la mujer se entere que es un doncel, le diría traidor?, les contaría a sus padres sobre lo que descubrió?.
Se levantó de su cama y simplemente siguió con su día, pues sería mejor si ya n o pensara que Tal vez moriría pronto, y mejor disfrutaría el día como nunca, camino al baño para arreglarse, pues en pocas horas tendrá otro encuentro con los padres de su prometida.
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——!Apuren!, !que no sabemos si el viejo sigue ahí!—— grito un sirviente el cual estaba a las afueras de la nación con otros compañeros.
——!Estamos cansados!, !partimos hace 12 horas y aún no llegamos?, y también nos estamos muriendo de hambre! —— dijo con desesperación el más joven de todos, tenía unos 27 años, y su nombre era Sail, mientras que los otros su edad era de unos 34 y 36, y sus nombres eran Samuel y Sair.
——En unos minutos pararemos —— dijo el que había hablado hace un rato, el cual era Sair.
Samuel permanecía callado,no tenía muchos gana de comunicarse con otra persona sólo por hablar de cualquier cosa.
Caminaron durante unos minutos, cuando ya no podían más, vieron una pequeña casita a lo lejos, !era la casa de ese anciano que!.
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——!Señor!, !corra! !escape! —— grito uno de los sirvientes dejando ir a un anciano acusado de brujería, pero decidió dejarlo ir, pues tuvo el tiempo de conocerlo y pido darse cuenta que es buena persona.
——Muchas gracias joven, se lo agradezco demasiado, gracias por tener compasión de este pobre anciano, algún día de lo agradeceré. —— dijo para luego irse, se le notaba nervioso pero feliz, puede sentir libertad.
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——Ese día es hoy —— dijo En casi un susurro.
Tocaron la puerta, el anciano apareció, pero en la casa se sentía un olor extraño y asqueroso.
——Nesecita un favor señor? —— dijo el anciano a reconocer el rostro del que tenía adelante.
——Si, usted recuerda el día que me dijo que me lo agradecería? —— dijo con una ceja levantada, y una mirada dudosa.
——!Como olvidarlo!, le debo la vida. —— dijo el anciano de capucha el cual se mantenía observante a los hombres enfrente de el.
——Pues ese momento a llegado. —— dijo para luego ver como el anciano se apartaba para dejarlo entrar a su "hogar".
Cuando los hombres entraron sintieron más fuerte el olor repugnante, parecía un olor a muerto, pero preferían no preguntar.
——Que desean de este humilde anciano? —— dijo para luego apartarse y dejarlos entrar a una habitación llena de pociones de todo tipo.
