1

1.3K 96 6
                                    

Era una tarde tranquila en el Sunny, relativamente tranquila, ni si quiera Luffy estaba molestando, sorprendentemente.

Todos se encontraban en la cocina, hablando de cosas triviales mientras esperaban el almuerzo que Sanji estaba cocinando complacido, menos Luffy, Zoro y Law.

Nami miró al rubio de arriba a abajo entrecerrando los ojos, para luego intercambiar miradas con los que se encontraban en la mesa.

— Oye, Sanji-kun.

Obviamente la respuesta del rubio no se hizo esperar— ¿Si, Nami-swam~? —la miro pareciendo tener una atmósfera llena de flores y romanticismo, lo cual Nami ignoró eventualmente como siempre.

— ¿Podemos preguntarte algo? —cuestionó haciendo que el rubio ni si quiera dudara y mientras hervía el almuerzo fue a sentarse enfrente de Nami.

— Por supuesto, todo lo que quiera Nami-swam.

Nami silencio por un momento al ver la cara de tonto del cocinero, no algo muy nuevo, así que lo ignoró.

— ¿Tú y Zoro están saliendo? —fue al grano.

Sanji casi ahoga con el humo de su cigarrillo que apenas y había dado una colada— ¿Q-qué? —apenas y logró decir.

Robin solo río en bajo al notar el nerviosismo y sorpresa del cocinero y lo directa que había sido su compañera.

— ¿Por qué piensas eso, Nami-swan? —preguntó nerviosamente.

— Bueno, hemos visto que pasan más tiempo juntos.

— Mhm. —asintió Usopp dándole la razón a Nami— Y en algunas situaciones... ¿incomodas?

— También ya no pelean tan seguido. —incluso el pequeño renito opinó.

Sanji estaba completamente en shock, como es que la mayoría de la tripulación pensara que estaba saliendo con el pelo de epazote.

— ¿Por qué saldría con el musgo idiota?

— Oh, ¿no lo están, entonces?

— ¡Por supuesto que no, Robin-chan! —¿Robin también? Quería llorar.

— Pero te gusta, ¿no? —obviamente Nami no se iba a rendir, no era tonta, sabía que algo pasaba.

Solo se notó como el rubio se había tensado a la pregunta— Pero ¿por qué creen eso? —preguntó Sanji ya solo queriendo acabar esa plática tan incomoda que jamás pensó tener.

—A veces parece que te estás insinuando.

— Si, y luego te le quedas viendo como un tonto. —confirmó Usopp sin más, ganándose un asentimiento de Chopper.

Eso era todo, Sanji estaba completamente avergonzado, ¿se habían dado cuenta? Como diablos fue tan indiscreto en sus acciones. Solo quería que el mar lo tragase ahora mismo.

Sin que lo notase el cocinero, se puso casi tan rojo como un tomate, lo cual no pasó desapercibido por los que estaban en la sala.

— No puede ser, ¿enserio? ¿Te gusta Zoro? —preguntó Nami completamente sorprendida, o sea si lo sospechaba, pero ¡no pensó que fuera real!

— Oh, que sorpresa. —dijo Robin.

— ¡Tu cara te delata completamente! —habló Usopp sorprendido que aquel cocinero que siempre peleaba estúpidamente con el espadachín gustara de el mismo.

— ¡Está SUUUPER enamorado!

— YOHOHO, que bueno ser joven.

— ¡Cállense! —gruñó Sanji a sus nakamas menos a las damas, por supuesto.

— ¿Zoro lo sabe? —preguntó Nami.

Sanji tragó saliva por la pregunta, ya no se libraría de esto— No... —murmuró viendo de reojo hacia todos lados menos a los ojos de sus nakamas— Tampoco creo que sea buena idea decirle. —fijo su mirada a la mesa, mientras sus compañeros lo veían con curiosidad— Estoy seguro de que no me corresponde, y tampoco quiero hacer las cosas incómodas para él o la tripulación.

No había mayor ciego que el que no quiere ver. Nami y Usopp lo vieron con incredulidad, los demás al menos eran más discretos. Chopper creo que aún no se daba cuenta, y Brook solo dio un sorbo a su taza de té, con apenas moverse.

Se confirma, los dos eran unos idiotas.

Apenas se habían animado a preguntarle a Sanji respecto a esto, de Zoro no estaban seguros de lo que pensaba, pero una cosa era segura y era que el correspondía a los sentimientos del rubio.

Lo habían visto, Zoro se le quedaba viendo al rubio de vez en cuando, pero a diferencia de Sanji, él era un poco más discreto.

Pero como olvidar una vez que habían tropezado, Zoro cayendo arriba de Sanji, obviamente se levantó rápidamente y siguió su camino para evitar que alguien hubiera visto esa escena tan vergonzosa, sin embargo, Zoro se había cruzado con Usopp y este había notado el ligero tono carmesí en sus mejillas.

Como buen compañero de chisme, fue a contárselo a Nami.

Obviamente no le dirían al cocinero sobre los sentimientos que tenía el espadachín por él. No les correspondía decir eso, pero podrían darles un empujón.

Nami y Usopp intercambiaron miradas y asintieron junto con los demás del grupo de chismosos.

— Bien. Te ayudaremos. —Nami habló haciendo que el cocinero levantara la cabeza viéndola completamente confundido.

— ¿Eh?

— Cuenta con nosotros, Sanji. —dijo confiadamente Usopp, con una sonrisa pícara.

— No, esperen. — habló Sanji con nervio — ¿No escucharon lo que dije antes? No quiero incomodar a la tripula-

— ¡Deja de decir eso! —interrumpió Nami. —No nos incomoda, mucho menos nos molesta. —suspiró— No te preocupes por esas cosas, una relación entre la tripulación no nos va a matar.

— Nami-san... —habló un poco sorprendido por las palabras de esta.

— Y sobre Zoro-san, no creo que se incomode sobre este tema, incluso si no te corresponde. —habló Brook tranquilamente— No te preocupes Sanji-san, estoy seguro de que no es esa clase de hombre.

El silencio se montó en la cocina donde estaban reunidos, esperando con ansia la respuesta del encargado de la cocina.

Dio una colada a su cigarrillo y luego suspiró con una suave sonrisa. Por supuesto, ellos tenían razón, Zoro no era esa clase de persona que empezara a alejarse o hiciese que este dejase la tripulación solo porque Zoro no se sintiera incómodo, haciéndose sentir culpable. El espadachín era un insensible, ni si quiera incomodidad puede sentir.

También agradecía tener a aquellos chismosos que hacía llamar nakamas, parecían estar dispuestos a ayudarle incluso cuando él no tenía intención de hacer nada más.

— Está bien, cuento con ustedes. — dijo en un tono bajo.

Nami sonrió encantada, junto a los demás, les hacía ilusión poder ayudar a su querido cocinero— Excelente, luego te pasaré la cuenta. —bromeó Nami.

Si estaba bromeando, ¿verdad?






————
Nota: "No molestar a la tripulación" se refiere a no causar problemas internos o algún que otro drama dentro de ella. No por homofobia o algo así.

A veces la relación entre un grupo de amigos puede terminar mal, a eso me refiero.

Creo que este sería mi primer Fanfic Yaoi. Hago lo que puedo, ténganme paciencia. 🕴

Idiots in love. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora