୨⎯ CHAPTER FIVE⎯ ୧

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¿Vico y Vance siguieron juntandose? Si, casi todos los días. Vance hasta entraba a la casa de Vico como si fuese de él también y Honestamente el papá de Vico ya se había acostumbrado.

Sasha se había disculpado con Vico y le pidió que dejara de ignorarla. Lo raro fue que se disculpo enfrente de Vance, pero a él ni lo miro. Luego de disculparse, Sasha tomo la mano de Vico y se la llevó. Vance se quedó confundido ahí parada y solo.
Aunque después Vico llevo a Vance a comprar papitas y luego se fueron a jugar Pinball hasta tarde.

— No puedo creer que sigas siendo su amiga. — confesó Vance. — Ella es arrogante, manipuladora, doble cara, egoísta y una completa perra.

— Vance, no la llames así por favor. No quiero pelear hoy. — pidió Vico mirando como el jugaba. — Y menos si está Dylan.

— ¿Por qué tenías que traer al enano? — pregunto Vance. — Es la tercera vez que viene a nuestras citas.

— Esto no es una cita, jugar Pinball hasta tarde no es una cita y tú jamás me invitaste a Salir. — Dijo Vico.

— ¿Si te invitará a salir vas a traer al enano? — pregunto Vance.

— Depende ¿A qué lugar iríamos? — honestamente Vico estaba emocionada de hablar de eso y Vance también, pero no tanto como ella.

— Cualquier lugar, cualquier día y en cualquier momento. El no puede ir, no eres su madre. — Vance perdió y golpeó un poco la máquina. — Mierda...

— Pero le caes bien y no lo dejaré con mi mamá. — Vico odiaba que Vance le recordara que Dylan era solo su hermanito y ya.

— Deberías confiar en tu mamá. — Vance miro a Vico. — Y no me quiere, cuando llegaron el me miro y me saco la lengua.

Vance se quedó mirando a Vico esperando una respuesta. Ella dió un suspiro y miro a Vance.

— Mañana mi papá no tiene que trabajar. — Vance sonrió al escuchar aquello.

— Mañana iré por ti. — aviso Vance y volvió a jugar.

— No lleves tu navaja, das miedo. — pidió Vico.

— No digas eso. Me gustas porque se supone que no me tienes miedo. — dijo Vance.

Si, Vance ya había comenzado a decirle a Vico "me gustas". Lo decía todo el tiempo porque realmente le importaba una mierda si los demás escuchaban.

— No me das miedo a mi, a los demás si. — contesto Vico y luego miro a Vance de una manera muy bonita para cualquier persona que la mirara. — Tu no me darías miedo ni aunque eso quisieras.

Vance era raro, eso era lo que a Vico le gustaba, bueno, era una de las cosas que a Vico le gustaba de Vance. Y eso también era una de las cosas que a Vence le gustaba de Vico, porque a ella no le gustaba Vance solo por lo rudo que podía llegar a ser o por lo fuerte que era.

Vance sabía que a Vico le gustaba el Vance que jugaba Pinball las 24 horas, el Vance que podía llegar a tener cambios de humor repentinos y también el Vance que hacía bromas estúpidas. Realmente a Vico le gustaba tanto Vance que creía que el era perfecto aunque era obvio que no lo es.

— Esa es la idea, darle miedo a todos, excepto a ti. — Vance estaba concentrado en su juego, pero aún así sabía que Vico estaba rodeando los ojos aunque el también sabía que ella estaba sonriendo. — ¿Me comprarías algo para beber?

— Si, pero no porque me lo pidieras, sino porque yo también tengo sed. — Vico estaba por ir a comprar, pero hablo. — Dylan, iré a comprar. Quédate con Vance.

𝐃𝐄𝐀𝐃 𝐈𝐍𝐒𝐈𝐃𝐄    ᵛᵃⁿᶜᵉ ʰᵒᵖᵖᵉʳDonde viven las historias. Descúbrelo ahora