Engendrados

Capítulo 16: Reorganización

Justo donde nos quedamos

Los engendrados empezaban a ganar conciencia después de un aterrizaje bastante movido, el primero en despertar fue el rubio inteligente quien al salir de la cápsula de escape, inmediatamente noto el frío ambiente, lo hizo pensar que estaban en uno de los famosos polos de la tierra, no sabía cual exactamente pero por descarte debía ser el polo sur, el más cercano al archipiélago Salomón, donde se había situado la anterior base de los engendrados, archipiélago antiguamente abandonado por la sociedad por disputas políticas, las siguientes en despertar fueron las mujeres quienes se levantaron sintiéndose mareadas y adoloridas, inmediatamente recordaron todo lo que pasó hace un rato, lo primero que hizo Lili fue a pura fuerza de voluntad sacar a un manco Seas de la cápsula, luego siendo respaldada por Mary, Lisa también ayudo sacando a Reiker, por suerte uno de los fuertes de los engendrados era la auto preservación, las heridas de seas eran tratadas con magia por su propio cuerpo y la hemorragia de Reiker ya había cesado, Raúl entonces hablo -lisa, podrías ir a buscar a Seven, quedo incrustado en aquel iceberg de allá- señalando el lugar de caída del albino, donde había un cráter que soltaba humo Lisa asintió y en un instante ya estaba con los demás, al ella llegar junto con el albino Lili y Mary quedaron sorprendida y algo asqueada -¡¿ese es Seven?!- pregunto la desconcertada Mary hacia un cuerpo carbonizado, era irreconocible a este punto -Correcto, sin embargo lo dejara de ser si no hacemos algo- Respondió el rubio

Ahora Raúl observó al Albino de cerca, Había quemaduras de 3 y cuarto grado por todos lados, no había cabello en ninguna parte de su cuerpo, había moretones y huesos rotos, hemorragias internas, incluso estaba humeando, sin magia lo único que impedía a Seven morir era su propio cuerpo ultra resistente, aun así, se podía recuperar si le daban tratamiento, -Lili ¿Crees poder ayudar?- Pregunto Raúl cosa que puso algo nerviosa a la pequeña en un principio pero luego miro al rubio con determinación y dijo -N-no estoy segura de poder curarlo completamente pero... ¡Daré mi mejor esfuerzo!- diría ella para acercarse a Seven, poniendo ambas manos en su pecho y un destello verde saldría de estas empezando a hacer efecto y así logro detener las hemorragias internas y arreglo algunos de los huesos rotos, después de un rato aquella luz desapareció y la niña tomo grandes bocanadas de aire evidentemente cansada -e-es todo lo que puedo hacer...- Raúl asintió cómo agradecimiento mientras que Mary le acarició la cabeza y dedicó una sonrisa de "buen trabajo" a Lili quien sonrió algo cansada de vuelta -muy bien, con eso resuelto, ¿Dónde estamos?, ¿y que haremos ahora?- pregunto Lisa dejando a todos pensativos

Un rato más tarde, panorama de Seas

El pelirrojo apenas estaba despertando de un pesado sueño, abrió lentamente sus ojos ajustándose lentamente a la poca luz del lugar, empezó a mover la cabeza de lado a lado buscando cosas interesantes para deducir dónde estaba, al no encontrar nada se sentó en su lugar notando que no había dormido en una cama sino en una bolsa de campaña, al mirar al rededor vio otra bolsa en dónde se asomaba la cabeza del azabache Reiker, y más allá otra bolsa con algo que no podía ver bien por la oscuridad del lugar, al estar así se preguntaba porque siempre que quedaba inconsciente aparecía en lugares nuevos, trato de poner una mano en su cabeza pero no la sintió llegar, ahora dándose cuenta que no tenía brazos, solamente un muñón en su brazo izquierdo y nada más que su hombro en el derecho, ahora ya más orientado de la situación se levantó completamente y camino como pudo hacia la salida de la campaña, lo primero que vio fue una luz, una fogata, en la cual un rubio estaba sentado a su lado mirándola, seas como pudo se acercó y sentó al lado de Raúl, quien por primera vez no mostraba aquella sonrisa tan amable y cálida que lo caracterizaba, si no una expresión de angustia, era muy leve, pero se le hacía de notar al rubio