Mi cuerpo se tensa ante el déficit de tu piel,
Mis pupilas ya se dilatan por el deseo de verte.
Hasta mis labios se resquebrajan gracias a la ausencia de tu boca.¿Es que el cielo no advierte
Que mi existencia ya es vana,
Que la humanidad de mis miembros
Se convierte en simple animalización, sin ánimo?Que siento frío cada vez que te nombro,
Que mi corazón ha agrandado su tamaño por tanto amor,
Que ya no miro con ternura el horizonte anhelando un mañana a tu lado.Ahora las puertas del Purgatorio
Se ciernen ante mi alma estupefacta.
Y yo me entrego sin miedo
Porque no puedo observarte sin lastimar mis ojos,
Porque ya se impregna en mi epidermis
El profundo deseo invernal de no verte,
Ramificándose vello a vello, poro a poro, ventrículo a ventrículo.No necesitas enviar a otro Jinete
Que desertifique mi pensamiento, antes fértil.
Esa estabilidad atómica decidió abandonar mi limbo hace ya varias vidas.Prefiero el infierno dantesco
Antes que experimentar el torturador letargo
Que se apodera de mi sola presencia ante tus ojos.Y entonces los minutos se vuelven horas,
Y estas días, meses, años, toda una eternidad
Que no podré vivir acariciando.Sin embargo te deseo, hasta la última de tus células,
Te pregono en cada dimensión existente,
Te baño en lisonjas y perfecciones,
Aunque estés muy lejos de ellas
Para que sean escuchadas en Andrómeda.No te pinto, te nombro, te escribo,
Te plasmo con letras insolubles en este corazón desfallecido
E incluso, todavía espero, con ansias,
Sentada en una esquina de la recámara
Que me salves de olvidarte.📣🏳✨