El guardián de los astros (Terminada)

Capítulo 21 - Alma [editado]

[Aster]

Nuevamente, el yoyo salvador intenta hacer acto de heroísmo, pero se lo impido, esta vez no necesito ser salvado de nada. ¡Porque yo soy el salvador! Quien viene en búsqueda de lo perdido.

Como puedo impido que Ladybug me intente salvar, así que hago uso de mi arma, la cual pude moldear en una espada y cortar el yoyo, no lo pude cortar, aun así evite varios de los rescates.

Está preocupada ante mi situación, pero yo me encuentro bien debido a que Lynx solo me quiere ver devuelta en sus manos.

— ¡Puedo con esto, no necesito ayuda por el momento! — fue una de las pocas cosas que pude gritar, debía enfocarme en Lynx y como evitaría a su alma y acercarme al cuerpo.

— Estrellita donde estás, quiero verte tintinear, por el cielo y sin parar... — cantaba Lynx cuál niño pequeño — yo de ti hubiera aceptado esa ayuda Aster, eres terco y eso te saldrá caro hoy.

— Sabes mejor que nadie, porque hago las cosas o es que se te ha subido a la cabeza las constantes sugerencias de alguien — preparo mi cetro para poder detener cualquier ataque.

— No sé a qué te refieres — vuelve al movimiento de acecharme dándome vueltas con el leve acto de cruzar miradas cada que puede — y que hará alguien tímido y miedoso para salvar a su amado, habiéndolo dejado a su suerte, mientras disfrutaba de la ciudad.

— Lo que debí haber hecho a ese varias semanas, ¡Buscarte! — esto pareció molestarle, ya que dejó de moverse para ponerse de pie imponiendo su gran ser en mi contra — Eso te serviría si fuera un puma, pero soy una serpiente y te haré caer por más débil que pueda parecer — recalcó antes de dar mi primer movimiento.

Debía tratar de recuperar el cuerpo de Lynx antes de poder hacer algo, no sabíamos con exactitud dónde estaba el akuma, pero probablemente este en el cuerpo; de esta forma trataba de acercarme a donde parecía tenerlo.

Él lo presentía, sabía mis intenciones y más cuando no me deje influenciar por sus palabras. Trataba de retenerme con diversos tentáculos que salían de la oscuridad, pero estos no hacían más que perder fuerza al acercarse a mí. En cierto punto algo sutil, aun así, se movían con lentitud.

— Porque no puedo tocarte, esto es frustrante — empezó a elevar sus manos de manera brusca, algo tramaba.

— Ya sabes, la luz y las sombras siempre han coexistido, pero a la una le es difícil detener a la otra y así mismo no la puede retener por mucho tiempo. En algún momento la luz saldrá a flote de entre tanta oscuridad, por más atrapada que se vea.

Cada palabra que decía, cada acto que hacía al esquivar sus ataques como si fueran solamente mariposas volando a mi alrededor. Lo tenía más que claro, se estaba frustrando al no poder tocarme y lo estaba plasmando en sus ataques, cada vez más violentos hacia mí.

— Si yo no puedo alguien más lo hará, ¡A él! — gritaba mientras me señalaba con su mano extendida — mientras te diviertes, debo ir a entretenerme con alguien más.

Esto está mal, son mucho démones, pero saldré de aquí por Lynx e Ikki.

[Lynx]

— Vaya que tenemos por acá si es un bichito y un gatito.

— ¿Qué pasó con Fotia? ¿Por qué estás aquí? — aquellos "héroes" no hacen más que cuestionarse ante mi presencia.

— Está jugando con mis esbirros, mientras yo vengo a jugar con ustedes — aunque no se perciba estoy sonriendo hasta más no poder — porque hoy pagarán por el dolor de Louvre.

— Si nos vas a hacer pagar será con ganas, no importa que Fotia no este. Tenemos serias advertencias de no lastimarte, pero nadie menciono no tratar de inmovilizarte — escuchó decir al pequeño gatito que intenta golpearme por la espalda.

No hago más que empujarlo con un leve movimiento de mis manos.

— Dos veces el mismo truco no va a funcionar, ahora que no tengo distracciones deberían preocuparse de no quedar atrapado entre las sombras.

El mínimo recobra la compostura y en cuanto puede se acerca ante su aliada, para estar a su lado.

— Lamentamos lo de Louvre, no fue nuestra intención, hacíamos nuestro trabajo y no sabíamos que algo así te lastimaría — decía la de traje a puntos, aquellos puntos que recuerdo a la perfección del día que quede gravemente herido. 

Pero siento que se refieren a algo más que la otra vez, al menos que recuerden la sangre en mis manos que me hizo temblar.

— Digamos que te creo, pero mis manos no lo harán. ¡Hasta verlos sangrar y con las costillas rotas como yo! — me acerco de manera segura y amenazante antes de poder golpearlos como si fuesen nada.

Aguantarán todo lo que les lance y eso hará mi venganza en contra de ellos placentera, verles el rostro a más no poder de cada golpe que logren recibir.

Ante el mínimo atisbo de un golpe hacen más que retroceder algunos pasos, disfrutaré jugar con ellos mientras piden piedad.

— Al fin tendré lo que busco — deja de molestar ahora, estoy pendiente de algo. Cómo siempre fastidiando, tanto es su afán en unas simples joyas.

Un golpe certero hacia donde se encontraban, pero lograron esquivarlo, la de puntos no hacía más que tratar de atraparme con su yoyo. Lo logro en cierto modo, pero hice que deseará no haberlo hecho atrayéndola hacia mí con su propia arma y plasmándole un golpe en todo el cuerpo.

— Acaso no te han enseñado a respetar a las mujeres — dice nuevamente el gatito, quien trata de atacarme lateralmente con su bastón.

Retengo su bastón con mi mano libre y uso a su compañera de arma, para tratar de golpearlo, aquella acción me zafó del agarre de su yoyo. Intentan escapar, pero yo voy un paso adelante antes de que avancen más elevó una gruesa capa de tinieblas alrededor de nosotros.

— Al final quedaron atrapados en las sombras, vaya que hacen caso omiso a las advertencias — mencionó ante su ineptitud para evitar problemas.

Los héroes no hicieron más que verse y asentir en lo que parecía un plan entre los dos.

— Esperemos un ¡GATACLISMO! Te pueda detener — un juego de palabras ante el brillo inusual de una de sus manos.

— Y si eso no te detiene un ¡AMULETO ENCANTADO! Deberá hacer frente a tu maldad — luego de esas peculiares frases un objeto moteado hace aparición, objeto que no hace más que recordármelo a él.

— Tienen trucos bajo la manga, pero les servirá para destruir o detener esta pobre alma.

--_--_ Nota del autor _--_--

Acaso el fin de la historia se acerca o aún se sabrá de nuestros héroes y nuestro coprotagonista que termino volviéndose un antagonista que no hace más que tratar de recuperar lo que vino a buscar.