𝐖 𝐇 𝐘 𝐃 𝐎 𝐍 ' 𝐓 𝐘 𝐎 𝐔 𝐒 𝐓 𝐀 𝐘

I I

Unas semanas más tarde las cosas parecían tomar su rumbo normal. De vez en cuando volvían a discutir, lo cual traía consecuencias a la piel de Build. Quien ya no encontraba más pretextos para cubrir los lapsos de rabia en su novio.

— ¿Ahora a qué mueble vas a echarle la culpa, Bu? —la mirada acusadora de Tong se cernía sobre la extensa marca que adornaba otra vez el brazo derecho del menor. No era la primera que había visto, pero sí la más grande.

Los labios temblorosos del joven se entreabrieron intentando encontrar las palabras que lograran calmar a su amigo.

— No me había dado cuenta que eso estaba ahí, —mintió— oh, debió ser cuando tomaba un baño está mañana —Intentaba sonreírle mientras retiraba su mano suavemente y bajaba la manga del suéter que minutos atrás se vio obligado a levantar.

Tong no creía ni una sola palabra que decía. Las primeras veces lo hizo, pero cuando con el pasar de los días, aquella sonrisa brillante característica del azabache se había esfumado al ser reemplazada por una expresión dispersa, inclusive cada que alguien elevaba la voz algo se activaba en su cuerpo y comenzaba a temblar de forma irremediable; era más que evidente la anormalidad de la situación.

— Fue Bible, ¿no es así? —los ojos de Build se abrieron en sorpresa y negó repetidamente con la cabeza.

— No, no. He dicho que fue un accidente. Dejalo ya. —Intentó irse. Tan solo dio un paso lejos cuando las amplias manos del castaño tomaron los costados de su rostro, elevando este para que pudiera mirarlo.

— ¿Estas seguro? Build, sabes lo mucho que yo te quiero, tan solo dime lo que esta sucediendo. —Parpadeó un par de veces, no podía hacer eso. Delatar a Bible era como una traición, sin embargo en cuanto quiso responder, una voz bastante conocida se hizo presente.

— Ah, con que aquí estabas. —el tono grave de Bible inundó su mente, provocando que se alejara de inmediato. No sabía que expresión estaba poniendo, sin embargo el terror en su alma gritaba que estaba en grandes problemas— Llevo una hora esperándote, amor. Comenzaba a preocuparme. —Miraba a ambos con recelo, haciendo énfasis en la palabra amor.

— L-lo siento, nos retrasamos con el informe y mi teléfono se quedó sin batería, ¿Qué haces aquí? —cuando logró tranquilizarse, reparó en lo verdaderamente importante.

Wichapas no solía recogerlo en el trabajo. En realidad, casi nunca tenía tiempo de ello a causa de su horario y por eso era que él utilizaba la motocicleta y Build el auto. Era una buena dinámica que llevaban años manejando.

— Lleve la moto al taller, hacía un ruido extraño y como estaba cerca, decidí venir al ver que faltaba poco para que tu horario terminara. ¿Acaso no puedo?

— No, no es eso. Claro que puedes. —respondió de forma inmediata— Pero vamos, es tarde y muero de hambre, seguramente tú también así que debo llegar a cocinar, anda, vamos. —acomodó el bolso sobre su hombro y dio un paso hacía él, tomándolo del brazo con suavidad para apartarlo de Tong, quien seguía analizando el comportamiento de ambos en total silencio— ¡nos vemos mañana, Tong! —agitó en el aire suavemente la mano libre a forma de despedida antes de desaparecer por el pasillo.

Sentía la tensión provenir de Bible, más no le dijo absolutamente nada. Se había comportado tranquilo, lo cual de alguna manera le transmitía la misma sensación.

En el auto todo permanecía en silencio. El único sonido perceptible era el del vehículo en movimiento y la carretera en si. La vista de Build pasaba del camino hacia sus propias manos, evitando mirarlo a él directamente.
En ocasiones llegaba a sentir su mirada, pero ni una sola palabra le fue dada.

Esperaba algún grito de su parte y que no dijera nada le estaba carcomiendo por dentro. Pero una parte de su corazón le decía que todo estaría bien así que decidió aliviar su alma con una breve pero potente oración mental.

Al cabo de unos minutos se encontraban en el estacionamiento del edificio, y decidió bajar lo más pronto posible sintiendo a sus espaldas los pasos de su pareja.

Ingresó la clave de acceso y la puerta se abrió. Pensó que sí caminaba con suficiente rapidez, tal vez llegaría a la habitación antes de que cualquier cosa sucediera, pero en cuanto puso un pie dentro sintió un empujón que debido a la inestabilidad en su postura, casi lo hace caer al suelo, deteniéndose gracias al sofá en el reducido espacio.

— ¡¿Qué demonios fue eso?! —había cerrado la puerta de un solo golpe y ahora se encontraba tirando de su ropa para levantarlo, pues su postura se mantenía aferrada al borde del sofá— ¿Acaso me estas engañando con Tong? ¿Es eso? —su acusación le hizo abrir los ojos de inmediato y sin pensarlo su palma extendida golpeó directamente la mejilla de Bible como un acto reflejo dejando una marca rojiza debido al impacto.

Build se sentía lleno de indignación.

Jamás habían cruzado esa línea y fue él quien lo hizo.

No le sorprendió cuando la respuesta fue exactamente igual, solo que esta iba con tal fuerza que logró aturdirlo un par de segundos mientras el férreo sabor característico de la sangre se extendía en el interior de su cavidad bucal.

— No te atrevas a hacerlo de nuevo —advirtió, su mano sostuvo el rostro del menor provocando un mayor daño al presionar con fuerza— ¿Te dolió tanto que descubriera a tu amante? —escupió las palabras con rabia— Algún día tenía que suceder, pero ya no más. No volverás a verme la cara de imbécil, Jakapan. Ya no.

— No... no es mi... amante —habló con dificultad— no es... lo que piensas— insistió.

Por más que intentaba, no lograba hacerlo entender.
Le repitió muchas veces que tan solo imaginaba cosas. Que lo sucedido esa noche había sido una casualidad y que en realidad, intentaba cubrir las evidencias de las marcas que él le había dejado pero nada funcionaba.

Estaba encerrado en su propia habitación.
Luego de discutir por varios minutos Bible se había cansado de escucharlo y tan solo optó por llevarlo arrastrando por el pasillo para lanzarlo dentro del dormitorio, cerrando con llave por fuera.

No tenía idea de cuanto tiempo permaneció llorando sobre su cama hasta que se quedo dormido. Tan solo sintió un pequeño tirón en el estómago debido al hambre que tenía y fue motivo suficiente para despertarlo, notando así al hombre que dormía a su lado y la suave manta sobre su propio cuerpo.

Extrañamente no se asustó ni quiso apartarse. Tan solo se inclino un poco para observar mejor y poder así apreciar la tenue marca de su propia mano sobre la extensión de su mejilla sintiéndose culpable de la situación en general. Tal vez sí él no le hubiera permitido a Tong tal acercamiento, nada de eso habría sucedido.

Eso era; él tenía la culpa de todo, no Bible. Él solo había reaccionado como cualquier pareja porque cuando se aman tienen miedo a perderse, ¿cierto? Porque así era como él se sentía. Temeroso de que un día el amor de su vida se canse y decida abandonarlo.