Trencito || JINKOOK✔️

Epílogo

Claro, todos lo dieron por perdido. Quién lo veía juraba ver un muerto.

Pero no.

El alboroto y ruido, no había permitido a Jin oír el fino latido de su corazón.

¿Acaso Jin creía que Jungkook lo dejaría solo? Ni cagando.

No. No podía hacerlo.

Dejarlo después de todo lo que hizo por él, nunca.

La ambulancia tardo menos de lo esperado, y el más alto lloraba desconsolado totalmente. Para él, no había esperanza. Y no podía dejar de llorar. Nadie le decía nada, y él suponía el porqué. Espero fuera de urgencias, con los papás de Jungkook llegando a su lado, sus padres, sus amigos. Todos esperaban una respuesta que Jin no se atrevía a dar, mientras en la sala Jungkook daba todo de si por aguantar.

Por fa. Por fa. Por fa. No quiero. No me quiero ir. No ahora, no ahora, no ahora.

Era feliz. No podía acabar así todo. En definitiva no.

☆☆☆☆☆☆☆☆

-Esta mejor ahora. Ya esta bien. Puedes dejar de llorar. Jin lo miró, sin entender nada.

¿Como dises q dijistes?

-Tienen que esperar para visitas porque sigue algo delicado, pero esta bien. Más estable, su pulso va bien, temperatura normal, las heridas bueno, cicatrizaran con los días.

¿Estaba bien? ¿Su chiquillo estaba bien?

Claro que sí. Claro que lo estaba.

Jin lloró de alivio, de agradecimiento.

En tensión la medición del tiempo es anormal, la sentimos distinta. El corazón de Jungkook si dejo de latir. Pero no 1 minuto, ni 10, ni una hora. Unos mínimos 18 segundos, luego se detuvo nuevamente casi dejando el mundo de los vivos, pero Jin práctico rcp, táctica que un poco mal hecha, salvo la vida de Jungkook. Fueron solo segundos, los cuales para ambos se hicieron una eternidad, y el menor claramente en estado síncope, al que le procedió la inconsciencia debido a las perdidas de flujo sanguíneo y las heridas de gravedad en su cuerpo producidas por la agresión. El latido de su corazón sonaba tan despacio y ligero, que el mismo corazón de Kim nisiquiera le dejaba oír gracias a la bradicardia del momento. Osea, los latidos lentos y bajos de su corazón. Menos de 60 por minuto, claramente muchos menos de 60, pero para su angustia, cada latido vibraba a una frecuencia tan baja y delicada que el frenético pitido en su oído no le permitía oírlos.

Pero estaba tan agradecido.

Agradesio cn el de arriba.

¿Había sido aquella la última prueba?

Habían demostrado poder superarlo todo.

El castaño esperó paciente en un asiento, mirando hacía el frente. Respirando con más calma. Sus padres lo abrazaron, besando su pelo. Jin sonrió aliviado.

-Está bien... Está bien.- dijo, abrazándose a ellos. -Weon de verdad yo juraba que se me había ido pal otro lao.- Tae sonrió junto a él, con alivio.

Se quedaron esperando alguna respuesta, o que les dijeran cuando lo trasladarían, para poder ir a verlo, mientras los padres de Jin iban a buscarle ropa ya que la suya estaba sucia de sangre.

-De verdad... No podía escuchar su respiración, su corazón, nada weon. Estaba tan cagao de miedo.-dijo. Jimin le acarició el hombro.

-Pero está bien. Ya podemos estar más tranquilos.- dijo.

-Obvio.- dijo el flaco, suspirando, divisó a varios de sus compañeros entrar y acercarse a dónde se encontraban, preguntando enseguida por él.

-¿Y el chiqui?-preguntó su compañera, con too el rímel corrido.

-Esta bien, ya.. Podemos estar más tranquilos, ya está mejor.... Salió de riesgo vital.- dijo y suspiró. Sus compañeros suspiraron aliviados. -¿Quién les aviso?

-La profe, cuando llamaron pa preguntar por su ausencia en el ensayo de la graduación la mamá del Innie aviso. Hicimos algo similar a fuga así que probablemente nos quedemos sin fiesta pero pico weon.- dijo uno de sus compañeros, rascando su nuca. - ¿quién fue el conchetumare? Pa ir a poner la denuncia altiro. Pa funarlo pa todo.

Taehyung y Jimin se acercaron a compartir las redes sociales del muchacho y los datos conocidos que tenían sobre él, mientras los compañeros de Jungkook y Jin redactaban la funa que comenzaba a expandirse en redes sociales.

Una enfermera salió a informarles la sala en la que se encontraba el menor, señalando que podían entrar solo de a dos personas maximo, viendo el tumulto de gente. Jin y sus padres se debatieron con la mirada, pero terminaron cediendole el primer lugar a Jin quién era el más ansioso por ver a Jungkook y asegurarse de que estaba bien.

[....]

-Y.. Salimos de cuarto.- dijo Jin con el teléfono en la mano. Jungkook rió y puchereó un poco. Viendo por la vídeo llamada cómo sus compañeros se sentaban, esperando ser nombrados para ir a buscar su cartoncito. El flaco besó su frente, observándolo con cariño.

-Oye pone atención a la ceremonia sipo.- dijo algo ronco. Jin rió algo fuerte. -Nos van a retar po juan. - dijo con gracia.

Las mejoras en sus heridas y contusiones aún no eran suficientes como para acudir a su graduación, pero si para estar junto a Jin en el departamento en reposo. Esperaron hasta ser nombrados y el teléfono fue encaminado hasta el escenario.

Creatividad al 100 señores. Jin sonrió ante el teléfono aunque no lo fuesen a ver mucho. Eso fue razón para que el menor le hiciese mucha burla.

Rebeca, la niña que se sentaba adelante suyo e iba antes en la lista se paró a buscar su cartón con una guatita enorme y aprovecho de llevar el celular para que mencionaran a Jungkook. El menor sonrió al sentir cariño y muchos aplausos a traves del altavoz. Jin lo besó y se abrazaron delicadamente.

-Ya estamos bien.- dijo sonriente. Jungkook asintió.

-Súper.

☆☆☆☆☆☆☆

Ambos caminaron de la mano, lentito, para ir a buscar a su sobrino. El hijo de la Rebeca. Quién luego de lo que le ocurrió a Jungkook se sintió decidida a ponerle su nombre al bebé. Quién gracias a la influencia del menor durante su embarazo, era igual. Lo cuál todos agradecian pues el padre del niño no era más que un sinvergüenza funao.

Jin se recargo contra la reja, mirándolo de reojo. Jungkook besó su hombro.

-Voy a ir a comprar algo, ya vuelvo guaton.- dijo y el mayor asintió, besando sus labios con mucho amor. Jungkook cruzó la calle para ir a comprar mientras sonaba el timbre y su sobrino salía de clases. Vio que todos estaban pendientes de Jungkook chiquito y Jin. Recibió su vuelto y caminó hasta el lado de su pareja y sobrino. Tomando su mano, dejando el chocolatito en su bolsillo, viendo junto a él cómo un jovencito dejaba un empaque de la misma marca en su mano. El más alto rió con nostalgia, mirando a su cónyuge.

-Un trencito.- murmuraron ambos, compartiendo un besito.

Y todos putearon mentalmente a Jungkook chiquito por hacerles creer que su tío se había muerto.

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Gracias por leer y apoyar la adaptación ♡