ᴀᴄᴛᴏ 21: ᴘᴇʀᴅᴏɴ

270 32 46
                                    

5 años después.

—¡Hermana! ¡Hermana!, ¡Conseguí trabajo!—hablo emocionado.

—vaya eso es increi- ¡¿Qué?!— Tomo al menor de los hombros y los sacudió de delante hacia atrás, repitiendo "como que trabajo" hasta que Gaster la interrumpió.

—si lo sigues sacudiendo así, le sacarás la cabeza— dijo con un tono burlesco mientras tomaba un sorbo de su café.

—pero..., haber Sans— volteo a ver al nombrado— ¿dónde conseguiste el trabajo?— pregunto tratando de sonar lo más calmada posible.

—EL REY VINO A DAR UNA VISITA AL LABORATORIO MIENTRAS TÚ ESTABAS EN EL CASTILLO Y LE OFRECIÓ A SANS UN TRABAJO— Respondió la duda el menor de los hermanos esqueleto.

—pero...— soltó un suspiro pesado y miro a otro lado con disgusto, siendo notada por Sans.

—¿estas bien?— pregunto mirando el rostro de la mayor.

—si..., siempre lo estoy— con una sonrisa falsa tomo a Sans entre brazos y lo elevo en el aire, levantándose ella también y lo mantuvo ahí, dejando al menor confundido— ¡estoy muy feliz por ti! ¡bien hecho!— lo abrazo con "felicidad" y el menor solo se limitó a corresponder, podía estar sonriendo ahí, pero solo quería en cierta forma llorar.

Ya no la necesitarían.

Los días transcurrieron con normalidad después de eso, Sans hacia su trabajo de Centinela con emoción, hasta terminar el primer mes, sin duda alguna le pagaban una buena cantidad a pesar de ser aún un niño, pero tanto ella como todos los que conocían a Sans, sabían que era un buen niño y que conocía su posición, y que sabría sobre financiar su dinero.

10 años después

—¿HERMANA, ESTAS BIEN?— Pregunto el mayor de los hermanos menores al ver a la mayor no probar bocado de su comida.

—si...— respondió con cansancio con la vista perdida en la nada, ella puso sentir la preocupación del menor así que se limitó a levantarse de su aciento y ir donde el menor —¿quieres que te lea un cuento antes de dormir?— pregunto con una sonrisa, el menor cambio su rostro a uno de felicidad.

—¡SI! ¡SI! ¡CUENTO!— Se levanto de su lugar y subió corriendo hacia su habitación siendo seguido por la mayor.

—¿cual quieres?— pregunto mirando un estante con diferentes cuentos.

—¡EL QUE TU QUIERAS!— Respondió y la mayor tomo un libro al azar y tomo una silla y se sentó frente a la cama del menor.

—Empecemos entonces— con una sonrisa comenzó a leer el libro, notando como cada vez el menor quedaba dormido mientras más avanzaba en la lectura, terminando de leer el libro lo cerro despacio, notando al menor dormido algo descubierto— buenas noches— cubrió al menor mejor con las sábanas y le dio un beso, volteando a punto de salir.

—HERMANA— se detuvo y volteo a mirar ante el nombramiento del menor — TE QUIERO— Eso tomo desprevenida a la mayor que se aguantó las ganas de llorar, y con una sonrisa hablo.

—Yo también os quiero— respondió y se dirigió hacia la puerta — Adiós, Papyrus— cerro la puerta, saliendo finalmente de la habitación y tomo rumbo a las escaleras de abajo.

Sabia que esa noche, no iba a llegar Sans a casa.

—Tan pequeño y se esfuerza en el trabajo— se apoyo en el espaldar de la silla de la cocina y sobrio su rostro entre las páginas, se había traído el libro con ella. —si, ya es hora, perdon— lagrimas comenzaron a deslizarse por sus mejillas.

Todo estaría bien, ¿no? Sans ya tenía 13 años y Papyrus 8.

Si, todo estaría bien.

—todo estará bien— dijo tratando de convencerse a sí misma, levanto el libro de su rostro y se dirigió a su laboratorio, dejando el libro a sobre su escritorio y tomando una cámara, se dispuso a grabar.

...

Caminaba tranquilamente sin ningún tipo de prisa, hacia el puesto del centinela de Sans, lo observo dormido sobre su puesto.

Con una sonrisa triste tomó de su bolsa una manta y lo cubrió con esa, logrando cambiar el rostro del menor que antes mostraba algo de seriedad, remplazando lo por una sonrisa, provocando la sonrisa de la mayor.

Se quedo frente al puesto del menor, solo mirándolo, respirando el frío ambiente del lugar, dando a denotar el vapor que salía de entre sus labios.

El menor pudo sentir la atenta mirada de la mayor, abriendo los ojos, aún soñoliento, ella se hacerco a él y lo abrazo, el menor confundido y soñoliento se limitó a corresponder, hundiendo su rostro en el abrigo que llevaba la mayor, sintiendo lo suave de las telas.

—Sans, Los quiero mucho, pero debo irme— lagrimas comenzaron a caer de sus ojos resbalando por sus mejillas— no se que hacer, trate de todo, lo hice, p-pero, ya no se que más hacer— hizo una pausa y continuó hablando— siempre estoy sonriendo, pero... me es cansador— el menor soñoliento no comprendía del todo lo que estaba pasando y solo se limitaba a escuchar— dejare a los monstruos salir a la superficie, solo falto yo, LOS QUIERO MUCHO— abrazo con más fuerza al menor como no queriendo soltarlo.

.

—¡SANS! ¡DESPIERTA HUESOS FLOJOS!—La vos de su hermano lo obligo a abrir sus cuencas y mirar al menor.

—¿Que sucede?— pregunto mirando a su hermano menor frente a su puesto de Centinela.

—¡NUESTRA HERMANA NO ESTA EN CASA! ¡FUI AL LABORATORIO DE GASTER Y TAMPOCO ESTABA AHÍ! ¡FUI AL CASTILLO DEL REY, Y TAMPOCO ESTABA AHÍ! ASÍ QUE VINE CONTIGO, PARA SABER SI VISTE A HERMANA O NO— pregunto el menor.

—b-bueno...— toco su hombro sintiendo resbalar algo, al voltear solo vio una manta, lo que acababa de pasar, no fue un sueño, abrió sus cuencas a más no poder.

—cuida a Papyrus por mi—

Se levanto de su puesto rápidamente y comenzó a correr rumbo a su casa, con un Papyrus confundido siguiéndolo.

detrás de la casa, en la habitación oculta, te dejare un mensaje—

—¡¿SANS, QUE SUCEDE?!— Pregunto el menor corriendo detrás de su hermano mayor, comenzando a preocuparse.

—no puedo más, Perdón

Sans solo podía recordar esas palabras entre llantos por parte de la mayor, creyendo al principio un mal sueño.

Finalmente llegó a su casa y corrió detrás de esta, perdiendo de vista Papyrus a su hermano mayor.

Sans entró dentro de aquel laboratorio donde solía pasar el rato con la mayor, camino hasta llegar el escritorio.

—"Creo que llego la hora, de contar todo"—

Fue lo primero que logró escuchar antes de que su teléfono comenzara a sonar.

𝔼ℂ𝕆 || ♧𝕌ℕ𝔻𝔼ℝ𝕋𝔸𝕃𝔼 𝕏 𝕋𝕌♧||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora