Capitulo 18

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Mara

Luego de ver a Darek partir, siento que el peso es más ligero, ya que pude decirle de mi embarazo y lo tomo bien.

Más que bien, estaba eufórico.

Pero tengo que poner límites, mis hormonas están alborotadas y no es bueno, el es solo el padre de mi hijo.

Recojo todo lo que está regado y voy a mi cuarto, hoy solo tengo 4 horas de turno, así que me dedicaré a buscar una buena ginecóloga ya es hora de mi primera revisión, he sido una irresponsable.

Todavía me da vuelta lo que me contó Darek, quién estaría tan jodido para hacerle daño a una niña.

Que hizo Darek hace diez años que han venido a vengarse, mi vida va de mal en peor, una prima desquiciada y quita novios, un ex novio infiel, idiota y ahora esté problema que me involucra por llevar su hijo en mi vientre, que suerte tengo.

Me arreglo, y salgo de mi departamento, voy hasta el estacionamiento y subo a mi auto, salgo rumbo a la clínica, cuando voy a salir a la calle un hombre se me atraviesa, me asusto pero luego lo reconozco, es el guardaespalda de Darek, no me acuerdo su nombre.

Bajo la ventana— Señorita Mara mi jefe me encargo su cuidado, yo debo ir con usted, y los demás chicos nos irán siguiendo—  Yo asiento y abro la puerta del copiloto.

— Sabes esto es raro, siempre hemos tenido seguridad pero nunca he tenido guardaespalda personal— Le digo cuando entra.

— Tranquila Señorita se ira acostumbrado—

Manejo hasta la clínica estaciono, bajo y tomo mis cosas.

— Disculpa como te llamas, como será esto— Le digo por qué en verdad no sé cómo será lo de mi cuidado.

— Bueno Señorita mi nombre es Lucas, yo debo ser su sombra pero dentro de la clínica hay muy buena seguridad, así que solo cuidare desde afuera—

Yo Suspiró— Excelente, entonces Lucas nos vemos—

Entro y me encuentro un caos, algo que nunca había visto.

— Que sucede aquí— Todos paran los que estaban haciendo y me miran.

— Dios Mara gracias al cielo llegaste, 2 heridos de bala, iban saliendo de su barrio a la universidad, y hubo un tiroteó y varias balas le impactaron— Me dice Olivia.

— Vamos livi prepara al chico con la herida en el tórax que debemos intervenir— Son muy jóvenes uno tiene un tiro en el brazo, hombro pero el otro chico lo tiene en el pecho.

Sin cambiarme, me coloco unos guantes y le aprieto el pecho para saber si el problema es grave, y lo es por mi revisión creo que a perforado un pulmón y por eso tiene tanta dificultad para respirar.

— Doc no me deje— Tose —morir, miii mamá ya a perdido— Suspira —mucho y yo quiero graduarme y — respira forzadamente— trabajar para que ella pueda descansar— Yo me siento fatal por qué no sé si pueda ayudarlo, pero la esperanza es lo último que se pierde.

— Vas a vivir y serás el mejor hijo de la vida, pero debes ayudarme, tienes que poner toda tu fuerza en quedarte aquí en la tierra— El asiente y llora.

Entramos al quirófano y me coloco rápidamente los implementos quirúrgicos, mientras las enfermeras y los demás lo preparan y lo anestesia.

Empiezo a operar y gracias al cielo la bala no perforó más de la cuenta y está fácil de extraer, succionó la sangre del pulmón, estoy sudando esto no es fácil, cualquier equivocación de mi parte será fatal.

El error más hermosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora