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/A= Alterno
/O= Original
Otro día en la aldea, estamos en la casa de los lideres de Akatsuki y sus contrapartes gennin, unos por una parte eran serios , mientras los otros muy gritones.
¿No era la mejor combinación verdad?
Los niños hacían bastante bullicio conversando entre sí y jugando. Los adultos ya estaban acostumbrados al bullicio por culpa de sus subordinados. Sin embargo, la gota que derramo el vaso fue cuando empezaron con sus preguntas hacia ellos.
Jamás fueron habladores, siempre viviendo en la oscuridad, sin comida, ni agua, esos niños no conocían el sufrimiento de la guerra. Las perdidas, masacres y dolor que causaban solo les dirigieron una mirada fría antes de desaparecer con su velocidad.
En cambio, los niños se decidieron a seguirlos, cada uno seguiría a su versión adulta así que conversaron un rato más y los salieron a buscar.
Se fueron corriendo hacia distintos lugares mientras buscaban incansablemente, hasta crearon clones, pero ninguno logro encontrarlos, hasta pasada la 1 de la tarde.
Nagato/A había descubierto que se podía subir a las cabezas de los Hokages y busco allí sin mucha esperanza.
Pero grande fue su sorpresa al encontrar allí a su versión adulta y otra persona con la bata de Akatsuki y el cabello anaranjado. Con cuidado se fue acercando a ellos pues sabía que sin tener chakra le podría causar un daño muy grande.
Su versión adulta se sentó en la cabeza del cuarto Hokage mientras el otro se quedaba parado sin realizar movimiento alguno.
Nagato/A se acercó con cuidado y se sentó en la cabeza del tercero.
Nagato/O- Dime mocoso, ¿quiénes son tus padres?
Nagato/A- No tengo, he sido huérfano desde que tengo memoria.
Nagato/O- Seguramente el orfanato donde estuviste no fue tan malo, no había nadie allí a quien podrías considerar como tu madre o padre.
Nagato/A rio amargamente.
Nagato/A- ¿Orfanato? ¿Qué es eso? Yo he vivido en la calle desde los 2 años, apenas cuando tuve 6 logré que el viejo idiota me diera un apartamento. Comía en la calle, me perseguían turbas furiosas de aldeanos. Dime tú, ¿crees que así podría considerar a alguien como mi madre o padre? Lo más cercano a eso ha sido Obito-sensei, el me curaba mis heridas, me dejaba quedarme en su casa. Pero eran muy pocas veces las que lo veía. ¿Y tú? Asumo que te pasó algo muy malo para que seas líder de un grupo de villanos.
Nagato/O- Akatsuki es una organización que busca paz entre las naciones ninja.
Nagato/A- Y como lo lograrías causando tú más destrucción. No soy tan estúpido como parezco, es solo una máscara, la misma que tienes tu.
Nagato/O- La única manera de comprender el dolor de alguien es experimentando el mismo dolor. Tu no conoces mi pasado, pero te lo contaré. Yo también soy huérfano, mis padres murieron cuando yo tenía poca edad y antes de eso tampoco me alimentaba bien y nos teníamos que esconder por la guerra. Cuando murieron yo me fui de allí, había logrado escapar, pero estaba débil y apenas si podía mantenerme en pie. Hasta que los conocí a ellos, a Konan y Yahiko.
Nagato/A- ¿Yahiko?
Nagato/O le alzó una ceja mientras continuaba con su historia.
Nagato/O- Si, él fue el creador de Akatsuki, su objetivo inicial fue buscar paz entre las personas, por medio de la palabra. Él quería que la organización sea el nuevo amanecer de Amegakure. Pero nos emboscaron, capturaron a Konan y para liberarla debíamos matar a nuestro líder, ese era Yahiko, yo no podía pensar, jamás le iba a poder matar. Pero el vino corriendo y se clavó con el kunai que yo tenía en la mano. No lo podía creer y desaté un gran poder que no sabía de donde venia. Mate a todos los que nos emboscaron y cuando acabe mi cuerpo quedo en muy mal estado. Producto de eso empecé a poseer el cuerpo de mi amigo.
Señalo a la otra persona que estaba allí.
Nagato/O- Cambie el objetivo inicial de la organización, pasaron los años y esa luz apareció que nos trajo aquí. Esa luz me curó, por eso me ves tan tranquilo.
Nagato/O estaba omitiendo la parte en que apareció Madara, pero no paso nada más, el pequeño Nagato se paró y se fue de allí no sin antes dedicarle una hermosa sonrisa.
Mientras tanto en el otro lado de la aldea dos rubios caminaban recibiendo miradas de odio, desprecio y temor. Los cuchicheos no acababan mientras el rubio más pequeño quería desaparecer.
Naruto/A- Tsk, idiotas.
Observo al más pequeño que lo seguía silenciosamente y noto como temblaba y cerraba los ojos. Suspiro y le cogió de la mano, le cargo y desapareció en una velocidad impresionante.
Lo llevo hasta el bosque de la muerte en donde lo bajo sin nada de cuidado.
Naruto/O- ¡Hey! ¡¿Que te pasa?!
Este le ignoro y le pregunto.
Naruto/A- ¿Por qué permites eso?
Naruto/O ante estas palabras se quedó callado.
Naruto/O- ¿Por que? No lo se, siempre a sido así. Ya estoy acostumbrado, casi ni las noto, pero esta vez estaban dirigidas a ti.
Naruto/A le observo durante un rato sin decir nada, manteniendo la mirada fija en ese niño tan parecido y tan distinto a él. Le recordaba esos momentos con... Yahiko, ya era momento de soltarlo. Él se había ido, y... fue su culpa.
Despejo su mente de esos pensamientos y le dijo al niño.
Naruto/A- Oye, mini yo.
Naruto/O le observo y este dijo.
Naruto/A- ¿Quisieras que te entrenara?
Naruto/O abrió los ojos de manera muy grande, el si quería, deseaba ser entrenado por alguien. Alguien como Ero-sennin, sin embargo tenia miedo, miedo de encariñarse, miedo de dejar pasar sus barreras. Por eso dejo a Jiraiya despuès de los exámenes chunnin.
Sin embargo al observar directamente sus mismos ojos, un rayo de esperanza y confianza habia llegado a su cuerpo.
Naruto/O- Si quiero.
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