Desde el momento de su nacimiento Wang Yibo fue distinto, no sentía apego, empatía y cariño por las personas ajenas a su familia nuclear, era sumamente frío y distante con las personas, su familia lo entendía por que su condición de alfa dominante, su lobo dormido y su ausencia de celo, lo hacía ser así según ellos, trataron de ayudarlo, con medicamentos, tratamientos y medicina alternativa, nada surtió efecto.
Cuando llegó a la adolescencia y sus padres murieron, su hermano se enfoco en la empresa, en ayudar a su hermano a sobrellevar la perdida y a los pocos años se casó, con ayuda de su esposa, trataron de apoyarlo a mejorar su trato con las personas, poco a poco se empezaron a ver resultados aunque no tan gratificantes , al menos logro intimar con algunas personas, en realidad más de las que ellos hubieran querido.
Dejaron que llevará su vida como quisiera por lo menos para darle un desahogo corporal, que le mantenía un poco humanizado, de pronto un día, les llegó la noticia que su hermano menor había llevado a un Omega a su casa, había estado encerrado en su habitación por días enteros, y que una marca de propiedad estaba en el cuello del seguramente Omega embarazado, así que contactaron a toda la familia para acorralar a Yibo en su casa y conocer ala futura madam Wang.
Cuando vieron a ese lindo Omega masculino, no les quedó duda, su hermano el frío señor Wang había perdido todo derecho a sentir, soledad, desamor y desdicha pues su lobo despertó de su eterno letargo trayendo consigo al revoltoso y desvergonzado lobo interno de ese lindo Omega Xiao Zhan, un espíritu antiguo muy conocido por la familia Lan, el rey del caos, la lujuria y la fatalidad Wei Ying pareja del primer inmortal lobo Lan Wangji ancestro de los descendientes a los que pertenecían la familia Wang.
Yibo trato de resistir lo más que pudo, le fue infiel, al menos lo trato, fingió indiferencia delante del Omega, quiso mantener su postura fría y desinteresada, pero cada que el lo intentaba, encontraba más y más cualidades por las que amar a ese maravilloso Omega, era tan lindo tierno, amable, le hacía comida deliciosa que solo podía comer y comer sin hartarse, era tan cálido en la cama ya no había noches frías, su ropa siempre perfumada a lotos tiernos y frescos.
Sus días eran satisfactorios de repente se observaba al el mismo sonriendo como un idiota, admirando a su muy embarazado esposo tratando de no rodar en la cama, para no despertarlos, de no haber ruido al pararse, tratando de zafarse de su férreo agarre matutino, eso que sentía al olerlo por las mañanas, al despedirse de él en la puerta con un cálido y oloroso abrazo, ese sentimiento le gustaba y mucho, solo que no podía nombrarlo por qué nunca antes lo había sentido.
El día que su esposo tubo ese accidente que lo llevo a un embarazo de alto riesgo, descubrió con certeza que ya no era solo Wangji su lobo interno el que moriría si a su Omega le pasaba algo, supo que ese chico tierno, de mirada dulce, comprensivo y hermoso sería su tumba y su perdición, por qué si a Zhan le sucedía algo el lo seguiría a la misma muerte con tal de reencarnar, para volverlo a encontrar así tardará otros mil años en encontrarlo de nuevo.
Afortunadamente para el, su esposo sobrevivió al embarazo, luego aunque a punto estubo de perderlo, gracias al amor incondicional de su lobo interno, el de el mismo combinados pudieron mantenerlo, regresarlo de las mismas garras de la muerte, ahora a los 6 años cumplidos de sus cuatrillizos se enfrenta nuevamente al mismo calvario, su esposo está en labor de parto, desde hace ya 8 horas, no hay noticias de nada con respecto a el estado de salud de su Omega y sus tres crias.
Basta hermano quieres dejar de hacer ese endemoniado sonido,decía el alfa a su querido hermano que lo tenía abrazado mientras acariciaba su cabello pues su lobo no dejaba de tratar de escabullirse hacia la sala de maternidad, hablas de mi respiración Yibo, acaso quieres que me asfixie solo para que tú estés feliz, le contesto Zhuo Cheng a su hermano menor, ni lo sueñes, yo también estoy preocupado, diablos Yibo tu y Wangji no podrían haberse abstenido de preñar nuevamente al cuñado, para colmo otro embarazo múltiple, que diablo comes para engendrar tantos cachorros a la ves, mientras los hermanos peleaban, los gemelos Xiao, cuidaban de sus sobrinos latosos junto con Wen Quing y Wen Ning en el área de espera del hospital.
Exactamente a las 10 de la noche, pesando dos kilos y medio cada una, nacieron las trillizas Wang, su madre Omega totalmente agotado, pero estable esperaban en la sala de partos, a ser limpiados, cambiados para ser llevados al cuarto de descanso dónde su loco, desesperado y ansioso marido se comía las uñas esperándolo.
Papi, mamá ya viene con nosotros o tenemos que esperar más tiempo, ya pasó mucho, dijo Zhanyi en tono preocupado, era el único de los niños que aún seguía despierto por la ansiedad de no ver en todo el día a su madre, amor debemos ser pacientes ven aquí acuéstate aquí conmigo, mami está bien de acuerdo solo que tener a tus hermanas a este mundo le agotó demaciado, así que probablemente tengamos que esperar un poco más de tiempo para poder verlo, abrazarlo y darle mucho amor, pero eso no quiere decir que no podamos esperar juntos aqui nosotros dos,Yibo consolaba a su hijo pero en realidad el estaba así o más preocupado por qué el doctor no le había dado detalles de la condición de su Omega solo le dijo que sus hijas habían nacido saludables, que su Omega estaría en reposo durante un tiempo.
Al poco rato entro el doctor con unos enfermeros, Zhan en una camilla y una cuna con sus tres preciosas hijas, eran lo más hermoso después de sus hijos mayores que había visto en toda su vida, su Omega era un ser virtuoso, lleno de amor, de calidez, un ser de luz que hacía con una escoria como el, un hombre alfa tan indigno de tanta perfección, pero aguantaría las ganas de llevarlo sobre un pedestal al cielo ya que aunque no se creía merecedor de tan magnífico ser, simplemente el pensar su vida a como era antes de conocerlo le hacía desear la misma muerte antes que vivir en ese frío e inmundo sentimientos de desamor y soledad.
Zhaniie abre tus ojos mi amorcito, regálale a este inadecuado alfa, el placer de ver tus hermosos ojos, por favor mi cielo, quiero ver con mis propios ojos que aún puedo tener la dicha de estar, admirar y disfrutar de tu amor por el tiempo que la diosa Luna me conceda a tu lado, susurro el alfa a su Omega quien yacia dormido sobre esa cama de hospital, una cálida mano tocó su rostro limpiando sus lágrimas, unos suaves labios probaron los suyos, los más lindos ojos se abrieron para decirle a su amor, aquí sigo mi vida, todo va estar bien, nuestra amada diosa Luna sabe que si yo duermo en la eternidad será solo por qué tú te adelantaste en el viaje, si tú mueres en el quirófano yo muero en la sala de espera, lo recuerdas mi amor....
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Wang Zhan, El Omega Del Señor Wang
RandomUn humilde joven Omega se ve forzado a dejar sus estudios para trabajar debido a que tiene que mantener a sus dos hermanos menores pues sus padres sufrieron un accidente que los dejo en estado de coma en un hospital. Con los pocos recursos que sus p...