pov. Taeyong
Me levanté de mi cama y me puse los pantalones y me calcé. Me puse el collar y el anillo que tenía la piedra Turmalina Negra.
Fui al exterior de la casa, encontrándome con Jungwoo y Lucas hablando de algo. Mi hermano estaba resplandeciente de pies a cabeza, al igual que yo no llevaba camisa, sólo un collar, atrayendo las miradas de mucha gente y de Lucas también.
Lucas mira a mucha gente, pero Jungwoo sólo le mira a él.
Puse mi mano en el hombro de mi hermano, y cuando me vio, puso una de sus maravillosas sonrisas, y yo sólo correspondí de la mejor manera que pude.
Sentí la mirada de Lucas clavada en mí, así que lo miré. - Lucas, ¿puedo hablar contigo?
- ¿Yo?. - Lucas se encogió de hombros y le indiqué que me siguiera para empezar a caminar por la isla.
Me detuve cuando estábamos lejos de todos los demás, y entonces lo miré fijamente. Era guapo, su belleza me resultaba extraña, pero no era algo que me molestara a la vista.
Entonces le miré a los ojos cuando noté que él hacía lo mismo. - ¿Quién me buscó?
- ¿Nos has oído? - preguntó, con una mirada realmente curiosa. - Dijiste que ibas a buscar agua.
- Lo hice, pero escucho bien y soy un demonio.
- No sé quién era, Taeyong, pero daba miedo. - Lucas respiró profundamente. - Doyoung y yo no queremos involucrarnos en esto, ya le hemos dicho a tu madre que nos vamos.
- ¿El hijo de Venus se va? - Pregunté, confundido.
El hijo de Venus era demasiado curioso como para aceptar simplemente irse, para eso, debía estar tan asustado como su amigo.
- ¿Venus? Ah, no importa. - Lucas agitó sus manos. - No hay nada que me haga quedarme, Taeyong. Ya he saciado mi curiosidad y he amado a tu gente, pero quiero volver a casa.
- Bien. - Acepté, sonriendo en su dirección. - Confío en ti, ojos grandes.
- Eso me ofendió. - Lucas respiró profundamente, pero al final me devolvió la sonrisa y salió delante de mí.
Mi sonrisa se apagó en cuanto se alejó lo suficiente. Hades no me buscaría, no se preocupa por mí, así que no sé qué puede estar pasando o quién puede estar detrás de mí.
Si los Dioses quieren castigar a Arin por aceptarme como su hijo, entonces empezarán por herir a quien toque su corazón, y Hendery es demasiado fuerte para ser afectado.
Kim Jungwoo.
¿Cómo le harían daño? No pueden tocar a Arin sin hacer enfadar a Afrodita, y tampoco pueden tocar a Hendery, que es el heredero del trono de Narciso.
Sólo queda una opción aparte de mí. Soy heredero del trono de Hades, tampoco pueden tocarme, aunque viva entre la bondad de los hijos de Afrodita, sigo siendo el hijo de Hades y tendré que asumirlo algún día.
El humano, Lucas. Pero tampoco pueden tocarlo, porque es un ser humano inocente, Jungwoo lo desea, quiere tomar al humano hermosamente y sin vergüenza, quiere el cuerpo y el alma del humano, quiere tomarlo en la cama y quiere tomarlo en la vida, así que Lucas tiene al hijo de Afrodita en la mano, y en consecuencia, le brillan los ojos.
Así que tendrían que querer a Lucas, para dañar a Jungwoo, y eso dañaría a Arin.
Pero no tiene sentido. Si quieren hacer daño a Arin, entonces...
Oh, lo entiendo.
Herirme a mí hiere a Jungwoo, y eso hiere a Arin. Muy bien, mi lógica es buena.
Ahora, ¿cómo van a castigarme, dioses olímpicos?
ESTÁS LEYENDO
La Isla de Afrodita [Dotae]
أدب الهواةLA ISLA DE AFRODITA⌇'' La isla de Afrodita, un lugar donde se encuentran las personas más puras y hermosas, una belleza inigualable. Kim Doyoung siempre había sido curioso, pero cuando se juntó con Lucas, caramba, fue cuando se puso feo. Y con toda...