Epílogo

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2012

Cruce mis brazos viendo el sótano, llevaba ahí cerca de cinco minutos junto a Vanya y a Luther. Escuchaba el tarareo de mamá que limpiaba alguna parte de la Academia, esta parte de la casa estaba plagado de malos recuerdos principalmente.

- Nada aún entonces - seguí viendo el lugar

- Nada y no hay señal del tipo de energía que dijiste - Luther se acercó un poco más - Los monitores funcionan día y noche con ese satélite

- Serás el primero en saber si aparece

- Gracias Vann - suspiré y metí mis manos en los bolsillos de mi pantalón - Tarde o temprano aparecerá

- ¿Por qué estás tan seguro que no fue en el pasado?

- Simple, la línea podría haber cambiado, sabes bien que la cambiaría - suspiré - Solo hay que estar listos

- Tu eres el que sabe de estas cosas - Luther asintió

- Bien, debo irme, tengo un vuelo que tomar, llámenme cualquier cosa

- Claro - Vanya sonrió

- Le avisan al Batman barato que me fui y nos vemos en dos meses

- Cumpleaños veintitrés en Londres, genial - Luther sonrió

- Claro grandote

Subí a mi habitación a tomar mi maleta y no pude evitar entrar a la de ella, en su buró estaba su libro favorito, lo tomé y salí de la habitación; bajé al vestíbulo, me despedí de Pogo y salí de la Academia directo al aeropuerto para ir a mi casa en Londres. Después de que la máquina fuera encendida por Klaus hace varios años, las cosas cambiaron mucho, en cuanto cumplimos los dieciocho nos separamos, Luther, Diego, Allison y Vanya se quedaron en América para hacerse cargo de las empresas locales y los demás fuimos a Londres a hacer lo mismo con las de allá.

El otro Cinco desapareció ese mismo día cuando trate de sostener a TN, ese día mi cabeza dolió como nunca y él desapareció cuando la línea temporal cambió, yo no pude tomar la mano de TN. Odiaba volar, pero lo hacía cada cierto tiempo para ir a la Academia y ver si había señales de una aparición temporal como hemos esperado estos años.

Odiaba esto porque siempre terminaba extrañandola a ella, abrí su libro y dentro encontré algo que en todos estos años no supe que existía, era una foto mía del periódico a mis trece o catorce años, llevaba el uniforme de la Academia y el antifaz, por los años el papel se veía amarillenta.

Me sentí bien al bajar del avión y poder subir al taxi, quería llegar a casa, me ajuste la gabardina beige, llovía ligeramente. La vida de todos cambió, Allison se hizo actriz y ahora tiene unos meses de embarazo, se casó no hace mucho, Luther conoció a una chica que era como nosotros en un viaje que hizo, han salido un par de meses y la reconocí de los recuerdos del otro Cinco. Diego y Vanya salieron un tiempo pero al final no funcionó y no me extraño, yo sabía a quien necesitaba Diego y que Vanya debía encontrarse, Ben y Klaus siguieron tan unidos como siempre.

Al estar en Londres fui al mercado a comprar unas flores hace unos años, la mejor florería del lugar era con el matrimonio de Ronnie y Anita Gill, junto a su hija, Lila Gill; en dos meses Diego vendrá a Londres y la conocerá.

- Llegamos - mire la ventilla, estaba en casa - ¿Le ayudo con su maleta?

- No es necesario, gracias - pague y baje

Entre a casa y deje mis cosas en la sala, el olor a comida invadió mi nariz y me alegro, fue un viaje de doce horas y la comida casera era la mejor.

- Tengo tanto sueño como hambre - entre a la cocina - Huele delicioso - la abrace por la cintura y recargue mi barbilla en su hombro mientras revolvía algo en la cazuela - Te extrañe

Estar con ella | CH [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora