VENECIA | tucu correa |

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venecia's POV

Yo me quedé unos segundos mirandolo con absoluta sorpresa de tenerlo parado enfrente mío y me empecé a reír como una tarada, igual que siempre que estoy nerviosa. Él tenía una sonrisa de oreja a oreja y estaba como esperando que yo salga del shock y reaccione. Cuando pude reaccionar, prácticamente corrí para abrazarlo con todas mis fuerzas, poniendo mis brazos alrededor de su cuello. Joaquín puso los suyos alrededor de mí cintura y se incorporó, haciendo que mis pies se levanten un poco del piso.

-¿Qué haces acá?-Pregunté sin soltarlo todavía.

-Llegué un día antes, ¿Te jode?...- Preguntó haciéndome reír, y acto seguido busqué su boca para darle un buen beso de bienvenida, que él respondió enseguida. Fue un beso bastante subidito de tono, se notaba que nos habíamos extrañado en este mes y medio sin vernos. Después de unos segundos, nos separamos y él de a poco me soltó dejándome devuelta en el suelo.

-Boludo, se me trabó el cerebro, me dejaste sin palabras...- Admití agarrándole la mano, y volviendo a acercarme a él- Y mirá que es bastante difícil eso- Él soltó una risita y me volvió a dar un beso, esta vez un poquito más corto que el primero.

-¿Te sorprendí entonces?- Se quiso asegurar y yo asentí enseguida.

-Si, un montón...- Confirmé volviendo a la mesa para guardar la tarjeta y cerrar la cajita, para poder tener las manos completamente libres- ¿Recién llegás?...- Le pregunté y él asintió- Y ¿Dónde dejaste tus cosas?- Dije recién notando que estaba con las manos vacías- ¿Quién te trajo hasta acá?- Volví a preguntar sin dejarle contestar. Joaquín se rió ante mí interrogatorio, haciéndome reír también.

-Te dejé tonta enserio mí amor- Dijo acercándose a mí de nuevo, poniendo sus manos en mis mejillas para enchufarme un pico.

-Si, la verdad que si...- Admití- Menos mal que me dejaste una cartita y no te me apareciste así de la nada porque me quedaba seca acá nomás- Agregué haciéndolo reír. 

-Si, pensé en eso... no te quería asustar-

-Ay, ahora entiendo todo...- Dije después de quedarme unos segundos pensativa- Mis hermanos estuvieron como tres boludos todo el día, más de lo normal- Él se rió.

-Le tenía que decir a alguno porque necesitaba que me ayuden a darte la sorpresa-

-Sí, está bien. Se re portaron igual, ni me la esperaba yo...- Él me iba a contestar pero una voz nos interrumpió.

-Che ¿Están vivos?- Fran estaba parado en la entrada al comedor. Yo lo miré con terrible cara de culo, por haber interrumpido nuestro momento de reencuentro- Ya sé que se quieren coger en este instante, pero vengan a comer porque sino cuando vuelvan va a haber migas nomás- Nos advirtió y se fue sin esperar respuesta de nuestra parte.

-Mi hermano es muy fino, no sé si te habías dado cuenta...- Dije poniendo mis brazos alrededor de su cuello para traerlo más cerca a mí, otra vez.

-Está en lo cierto tu hermano igual-

El Tucu se había ido a poner la malla y yo salí al patio de vuelta, donde todos me recibieron festejos, lo que me hizo sonreír como una tonta.

-¿Qué onda, estaban todos entongados acá?- Dije mientras agarraba el mate que me pasó Gianluca.

-Boluda ya no daba más, tenía un miedo de cagarla- Dijo Calu poniéndose la mano en el pecho.

-Yo en un momento medio que la cagué pero ni te diste cuenta- Me dijo Angelo que estaba sentado en una de las reposeras.

-Eso delata la poca atención que te presta cuando le hablas- Lo descansó Francesco.

-Está re loco... No me la esperaba ni a palos- Dije todavía sin caer en la situación.