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- Madre mía chica, parece que un lobo te ataco la noche  del sábado y a hora llevas tus heridas de guerra a todos lados- España era un encanto con  sus opiniones, pero para Polonia era como una patada en el estomago al recordar  con quien se acostó ese día

Por que ninguna  persona, hasta la mas estúpida tendría algo con la misma muerte. Second Reich

- Lo tapare con mas maquilla- aclaro escribiendo cartas que provenían de su país, La extrañaban desde que se fue hace 1 año a la casa de los Contrys. Mas bien a Inglaterra donde se dio el acuerdo de que todos se reunirían y convivirían para tener una paz y no una segunda guerra mundial, pero pocos participaron en ello

- Bien, pues  temo decirte que el tarro de base blanca se acabó- levanto su taza de te con una sonrisa de su gran triunfo informático

- Ugh..solo dame un poco de apoyo-

- Que quieres que te diga? mis felicidades por que te acaba de marcar el tipo mas temido  de toda Europa?-

- Si, al menos miénteme en la cara así no duele tanto-

- Cariño, no puedo hacer eso, es como decir que supere a Portugal- se cruzo de piernas para estar en una posición mas cómoda

- Y no fue así?-

- La verdad que no-

- Eres una mentirosa! le diré a Francia, estará decepcionada -  señalo con su dedo indignada aun buscando base en los cajones

- Francia esta ocupada dándole mimos a Inglaterra, aunque ya se quien se acabo el pote blanco- evito reír poniendo una mano en su boca- solo  deja que pase mas tiempo pronto se ira, si es que no te encuentras con el de nuevo-

- Espero que se vallan deprisa estos hematomas- hizo una pausa para caminar por la habitación  y buscar entre los cajones sus aretes. Los había perdido la noche  de fiestas y aquellos hermosas decoración  eran algo importantes  para Polonia, tenia la esperanza  de que los había dejado en sus cajones, pero lamentablemente  no estaban
- Fue amable y muy elegante, no lo veía  tan perturbador-


- Y con  todo ese alcohol en tu sistema no creo que hayas hasta  sentido las embestidas- 


- España...- murmuro  entrecerrando los ojos y dando fin a su conversación



España  era una buena amiga, pero a veces se pasaba con sus comentarios  y a hora Polonia se sentía la chica mas tonta por hacer eso, Siempre fue una figura recta, una Contry invisible, que pocos podían prestarle  atención o entablar  una conversación  con ella, Los hombres preferían otro tipo de mujeres, no alguien de baja estatura, de cabello castaño opaco y unos ojos apagados, aparte de algunas trizaduras  en su cara por las guerras y ni hablemos de su cuerpo


Polonia no era interesante, hasta esa noche del sábado, cuando aquel tipo se le acercó  y pregunto si estaba libre,


Le hubiera  negado de inmediato, pero ese día parecía que su cabeza estaba en otra y ser Polonia la aburrida la había cansado.  Tuvieron sexo y admitir  que fue el mejor de su vida, le daba vergüenza, pero a hora estaba vacía, por que solo fue una patética noche apasionada, y que se apareciera en su puerta resultaba imposible



Hasta que escucho el timbre, su corazón latió a mas no poder y apretándose los labios bajo de prisa para abrir primero  la puerta , Mas la decepción  se fue de frente al ver la figura de Italia sujetando un tablero de ajedrez


- Esta España?- pregunto con su mirada seria que heredo de su padre


- Arriba, habitación..-


- 23, Gracias- Sin decir algo mas el joven entro para desaparecer de su vista por las escaleras



Increíble  hasta un niño entrado  a la adolescencia ligaba mejor que ella


Polonia  iba a cerrar la puerta, hasta que una mano intento detener el cierre, Mas le termino pillando los dedos

- Oh Santo cielos! lo siento! juro que no te vi!-  exclamo  volviendo abrir la puerta y encontrándose  de frente  a la nueva visita.- Second Reich- murmuro  apenas y evito sonreír   por su repentina aparición



- Señorita Polonia,  no se preocupe-  sus palabras eran firmes tanto que la chica apretó los muslos por la tensión que le había dado dentro de ella misma


- Aun así, no fue algo bonita la bienvenida,  quiere pasar?- abrió un poco mas la puerta para el contry, el cual asintió para entrar  sujetándose los dedos que ardían como el infierno



Un silencio  incómodo  se dio ante ambos  - Viene hablar con Inglaterra?- pregunto curiosa poniendo sus manos detrás de su espalda y pellizcándose un poco su piel para contener los nervios


- En realidad  venia hablar con usted-


- C-co-nmigo?- se señalo así misma para luego  ponerse roja. Quería hablarle lo de la fiesta? o quizás venia a aclarar las cosas de que todo fue un error con ella y que la  confundió  con Indonesia


- Bueno sobre el trato que hizo conmigo- aclaro  y la penetro hasta el alma con esos ojos tan rojos



La pregunta  era..que mierda había hecho borracha?


- De que trato estamos hablando? dígame que no es de guerra-



- Oh en absoluto  es una alianza-



- De Paz?-



- De matrimonio-


Con dichas palabras  la presión se me bajo dándole  así un desmayo decente. Al menos no sentiría el dolor del golpe

Pequeña polacaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora