La hora del te era un momento feliz para Inglaterra, un momento donde sus ojos ansiaban con muchas ganas el sujetar su taza de te con leche y luego que toque apenas sus labios sintiendo la cremosidad del líquido caliente
Eso si, lo mejor también era el pan con chispas de chocolate recien salido del horno puesto en la mesa con un montón de pasteles de diferentes sabores y colores
El horario de las 18:00 era perfecto, justo cuando el sol apenas se ocultaba y le daba la mejor vista en el jardín que a hora estaba totalmente reluciente
Todos disfrutaban ese momento. Excepto Polonia. Con su mirada perdida, viendo el esperado atardecer que tanto odiaba.
Cuando el sol se ocultaba la ponía algo sentimental, era como si le doliera que el dia se acabara de forma lenta. Como si luego de este viniera otro dia que pronto se acabaría y luego seria olvidado por mas precioso que fuera. Luego estaba la otra parte donde deseaba que fuera eterno y que solo llegara hasta las montañas para volver a dar una vuelta mas sin que caiga la triste noche
No era que odiara la luna, o tal vez si, le causaba un sentimiento de soledad absoluta y mas aun cuando debía acostarse en su cama de sabanas frías y solo cerrar los ojos con ansias para ver el sol. Aunque el insomnio la persiguiera y hacia que cada hora fuera eterna
- Chica, se te esta enfriando el te, joder Polonia-
La burbuja de pensamiento exploto cuando escucho a España dirigirse a ella
Sus ojos lamentablemente dieron con su invitado especial enfrente suyo, qué deseaba tanto que solo se quedara algunas semanas y luego se fuera a la mierda. Después dieron con esos ojos tan azules como el mar observándola en silencio, sujetando entre sus dedos un panecillo de chocolate y encorvando los labios como si deseara decirle algo. Francia
- Lo lamento, es que el cielo se encuentra hermoso-
- Bueno parecías muy, perdida en el cielo mismo- España dio un pequeño sorbo complaciendo su paladar y con un movimiento de labios se sintió un pequeño suspiro - Inglaterra estaba contando de que recibió buenas propuestas por este sitio y que seria una maravilla que nuevos Contrys entraran aquí-
- Asi es España- afirmo el ingles remarcando su acento con felicidad y asi llevarse a la boca un pastel
- Suena, Maravilloso- se limito a decir para poner la taza sobre sus labios y lentamente ir girando el cuello disimuladamente.
Conociéndose, hubiese entrado en crisis pensando en que tendría que compartir sus espacios con mas personas desconocidas que debía llevarse bien y tener una buena imagen frente a ellos, pero aquel atardecer la tenia tan perdida que no era por el cielo o la forma de las nubes. Era el maldito color que se propagaba por la luz. Ese rojizo con amarillo y que lentamente era consumido por un azul oscuro
De allí surgió esa estúpida pregunta. De la nada misma
¿Que tenia ella de malo? o ¿ que hizo?
- El Cielo es hermoso-
