10. Siempre se puede volver a intentar

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Esa mañana era más fría que de costumbre,la neblina ocultaba el paisaje completamente,el mar a lo lejos con sus olas en constante movimientos chocando frenéticamente contra la playa y algunas rocas que sobresalían de esta,hacian que las corrientes de aire herízaran la piel,después de todo eran la 5:30 am,ambos;Shaka y Camus se habían levantado con anticipo y comenzaban a alistarse para la escuela,Degel iría a dejarlos y después regresaría por el mismo camino para ir a su trabajo,ese lunes comenzaría el verdadero reto,acostumbrarse a esa rutina que por lo visto sería algo pesada y sobre todo para este último,trabajo y familia eran dos cosas que no contrastaban para nada,el trabajo lo conocía muy bien o al menos eso pensaba por el momento,pues había que iniciar de nuevo,pero familia aún era algo desconocido en su repertorio,debía ponerse al tanto lo antes posible.

...

En su habitación Camus se miró al espejo después de mucho tiempo,
vestirse le traía tantos recuerdo de su antigua escuela,de su hogar por las mañanas, aunque esta vez el paisaje era algo lúgubre;desde abotonarse la camisa,hasta ponerse los zapatos,
todos esos pequeños detalles le removian el dolor,eran los mismos accesorios salvo que el color de su uniforme había cambiado,también el había cambiado,secó y peino su largo cabello,se preguntó si sería admitido así o tendría que cortarselo,después lidiaria con ello,se puso sus lentes,por alguna razón no sintió ni un poco de emoción al evocar a la nueva escuela,que más espectativas tenía que tener sobre ello?,conocería a gente nueva,pero no tendría amigos,
cursaria nuevas materias,pero para el todo era demaciado fácil,lo único sobresaliente era que estaba en otro lugar,aun así no se entusiasmo en absoluto,cumpliría con sus deberes pero solo eso,la vida ya no tenia esa misma alegría que había tenido tiempo atrás,ahora sabía insípida,
gris,monótona.

Tocaron a su puerta sacándolo por un momento de todos esos pensamientos

Joven Camus ya ha terminado de alistarse?,bajemos a desayunar-
Shaka,con su suave voz lo traía de vuelta a la realidad.

Si,ya he terminado,en un momento bajo-Esto preocupo al rubío

Lo esperaré joven Camus,tómese el tiempo necesario-El aquamarina sabía la razón,no pudo hacer más que sonreír,sabía que Shaka no tenía malas intenciones y que sólo se preocupaba por el,unos minutos más tarde salió por fin y efectivamente ahí estaba el rubío,esperándolo.

Vayamos-cerró la puerta tras de si y ambos caminaron por el pasillo hasta llegar a aquel lugar,miró nuevamente esas escaleras,su rivales eternas,
comenzó a bajar,el dolor no fue intenso al principio,pero se comenzaba a hacer presente,de nuevo la misma historia se repetía,podía sentir como su pierna temblaba cada que ponía peso en ella,como sus músculos y sus huesos hacian el esfuerzo por mantener el equilibrio, por mantener su peso,cada paso era como sentir un alfiler clavandose más y más profundamente en su rótula y pensar que así sería todos los días,ese pensamiento lo agotaba,estaba tan concentrado en ello que se olvidó de que Shaka estaba presente y solo lo divisó cuando este posó una mano sobre su hombro y le habló.

Joven Camus,déjeme ayudarlo,por favor,pase su brazo sobre mi cuello-

No es necesario Shaka-

Yo se que si,por favor-lo miraba de una forma entre seria y suplicante,
Camus suspiró.

Esta bien-y así lo hizo,Shaka lo sujetó por la espalda,comenzaron a bajar juntos.

Joven Camus-habló-se que es difícil para usted aceptar mi ayuda,pero debe de saber que estando conmigo no debe guardarse nada,si esta triste,quiero saberlo,si esta alegre,también,si le aqueja algo yo estaré ahí para escucharlo,si necesita mi ayuda yo siempre se la brindare,usted es un hermano para mi,aunque los lazos de sangre no existan,crecimos juntos,
jugamos juntos,hemos estado tanto tiempo uno al lado del otro,Camus,eres mi hermano-al decir esto último el aquamarina lo miro sorprendido.

MI AMADO MILODonde viven las historias. Descúbrelo ahora