Historias Joongdok

N'Gai

|Spoilers de la novela| |Secretive Plotter x Kim Dokja| |Secuestro implícito|

N'Gai

Ciertamente, no podía recordar mucho antes de estar con su esposo en el bosque N'Gai, dentro del enorme palacio, como si una neblina espesa y oscura le prohibiera mirar por sus propias memorias.

Era Kim Dokja, le gustaba leer, charlar con los kkoma, estar con Yoo Joonghyuk, bueno, en general, le gustaba muchísimo Yoo Joonghyuk en todas sus formas y regresiones, aunque es más que claro que tiene un favoritismo y amor romántico por su esposo, obviamente, pero, ¿de dónde venía? No podía recordarlo. ¿Tenía vida antes de asentarse en el bosque N'Gai junto a su esposo Yoo Joonghyuk y los kkoma?

Levantó la vista y miró fijamente una gigantesca repisa llena de viejos libros, en blanco, para poder comprender mucho mejor sus pensamientos.

Es cierto, no podía recodar nada de su vida antes de este lugar, pero, ¿por qué?

Tenía este sentimiento cálido, reconfortante y enorme cada que miraba o pensaba en los kkoma y en su esposo, como si toda su vida se encontrara allí, pero realmente no había un porqué para esto.

¿Siempre vivió dentro del palacio solo que no podía recordarlo y por eso amaba tanto a esos hombres, más que a su propia vida?

La gran puerta de entrada a la biblioteca chilló y por ésta vio ingresar a su siempre amoroso esposo, en su saco blanco tan característico y con una sonrisita pequeña pero llena de cariño.

¿Saco blanco? Recuerda más a Yoo Joonghyuk con un saco negro y mirada seria, los kkoma tenían sacos negros, de hecho, y ouede jurar que a Yoo Joonghyuk tampoco le gusta el blanco, por lo que ese saco es extraño en cierto punto, aunque desde siempre le recuerda usándolo.

¿Tal vez eso lo enamoró de su esposo, por sobre todos, por su notable diferencia con los demás?

—Dokja, cariño. La comida ya está lista. Vamos juntos al comedor.

Asiente en respuesta mientras deja suavemente el libro que leía a un lado, y se levanta para ponerse junto a su esposo y regalarle un pequeño, lindo y cálido beso en los labios, pues no puede esperar para probar los platillos que 41 hizo el día de hoy.

Yoo Joonghyuk sonríe un poco más y abraza por la cintura al hombre más pequeño, sintiéndolo como un ratoncito débil bajo su gran brazo. Por sus poderosos ojos observa como la barrera mental está flaqueando un poco, por lo que decide que más tarde la arreglará, pues no parece haber problema alguno con su lector, por el momento.

—¿Sabes si 41 hizo algún postre de vainilla?

Secretive Plotter niega y sin necesidad de terceros las puertas de la biblioteca se abren para ellos, como si supieran su lugar a pesar de ser objetos inanimados.

Kim Dokja no parece menos desanimado ante esa respuesta silenciosa, pero directa y honesta, y se mece suavemente de un lado a otro en un caminar algo infantil. Los Dioses Exteriores parecen reverenciarle y temer del hombre a su lado, aunque eso ya es tan común que lo deja pasar, prefiriendo ignorarlos que charlar sobre el tema.

[Cuarta muralla despierta levemente]

[Cuarta muralla activa Protección nivel 1]

Se detiene en brusco y hace una mueca ante esos rápidos mensajes que apenas y fue capaz de leer.

Esto, ¿cuarta pared?

—¿Mi amor?

Joonghyuk parece preocupado cuando le mira, y aprieta su abrazo en su cadera, en un intento de llamar su atención.