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— ¡vamos, no seas amargado, mike! — lucas se encontraba casi de rodillas en este punto, prácticamente rogándole a su amigo que aceptara aquella propuesta que le había hecho hace una media hora atrás, y mike rodó los ojos mientras liberaba un extenso suspiro de frustración al reparar en el hecho de que lo más probable es que su contrario no se rindiera hasta oírlo aceptar, cosa que él realmente no quería.

¡es que sinclair estaba completamente loco si pensaba que iba a convencerlo lloriqueando! mike no era para nada un tipo débil de mente ni sensible, al menos no en un gran nivel, y de ningún modo planeaba permitir que los ojitos de cachorro que el otro le estaba poniendo ahora lo debilitaran para aceptar esa descabellada idea de ser parte de una cita doble con su casi-novia max, y un amigo de ella, ¡obvio que no quería ir! mucho podía querer a lucas, pero había una gran diferencia entre quererlo y salir en una cita doble con un tipo. michael podía ser muchas cosas, pero estaba segurísimo de que no era gay.

— te he dicho que no un millón de veces ya, ¿piensas rendirte en algún momento? porque me estoy cansando de esto y tengo cosas que hacer, lucas — respondió el pelinegro, cruzándose de brazos mientras fijaba su mirada de desaprobación en el chico que parecía estar a nada de empezar a llorar en serio, la desilusión era palpable en su rostro más que nunca, y mike sintió que era su responsabilidad extender un poco más su respuesta para 'justificar' de alguna manera el que fuera un completo rechazo — mira, sé que te gusta mucho max, que quieres conocerla mejor y que probablemente esta cita signifique un gran paso para su futuro noviazgo, pero no puedo hacerlo, no soy gay. si ella hubiera dicho que llevaría a una amiga...mira, tal vez me lo habría pensado, pero es un chico y con eso para mí ya es suficiente. de ningún modo iré, lo siento.

michael se encaminó hasta el sillón, pasando por el lado de un lucas que comenzaba a prepararse para utilizar su último recurso a mano, y ese era...

— escucha, si me ayudas en esta, voy a comprarte ese cómic que tanto querías.

¡bingo! estaba cien por ciento seguro de que no había forma de que el pecoso pudiera rechaz-

— no.

— ¿cómo que no? — sinclair parpadeó varias veces y se acercó al sillón también, sin poder creerse lo que acababa de oír, ¿mike rechazando una propuesta semejante? ¡imposible! — pero es el nuevo tomo que estabas esperando...— dijo en voz baja, sonando más como un susurro de lamento para sí mismo que otra cosa; como si realmente ya no le quedara ninguna clase de esperanza.

él y wheeler se miraron durante un par de segundos, desafortunadamente para el último, esos segundos bastaron para que él se terminara de ablandar. ver el rostro totalmente desfigurado de lucas mientras se preparaba para retirarse del campo de batalla era una tortura completa, y después de un par de segundos más teniendo ese mini conflicto interno, michael acabó por suavizar su expresión y su tono de voz.

— que sean dos cómics y una pizza...

lucas sonrió victorioso y le dio unas palmadas amistosas al otro en su hombro, demostrando que simplemente no cabía en sí mismo de la pura dicha que sentía.

y mike por su lado, ya comenzaba a arrepentirse...

( . . . )

¡hola, acá les traigo una nueva historia!
esta será un poco más extensa de las que
estoy acostumbrado a hacer, así que les pido
paciencia porque iré publicando los capítulos
conforme los vaya escribiendo y sólo si veo que
este 'prólogo' tiene apoyo.

— demi.

double date | bylerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora