Choi Soobin y Choi Yeonjun eran mejores amigos desde que tenían razón. Sus madres se conocieron en cuarto ciclo, juntando sus caminos como mejores amigas. Después de acabar la universidad, siguieron sus caminos están juntas todo el tiempo. Ambas se casaron y tuvieron dos hermosos bebés, a los cuales cuidaron con mucho amor. Soobin y Yeonjun crecieron como hermanos.
La mamá de Soobin pensaba que su hijo sería omega y que Yeonjun sería su alfa, pero grande fué su sorpresa cuando su hijo se declaró como un alfa al igual que Yeonjun. Fué así que ambos se volvieron inseparables, algunas personas creían que eran hermanos porque tenían el mismo apellido. No serían hermanos de sangre pero se trataban como aquellos.
Estudiaban en la misma universidad, Soobin tomando la carrera de medicina humana y Yeonjun la de derecho.
Fué ahí cuando conocieron a Choi Beomgyu... Lo vieron en el receso repartiendo volantes que contenían información para cuidar el medio ambiente y como se podía reutilizar algunos plásticos o latas para darles una segunda vida. Ambos alfas observaban como el pequeño chico de ropas holgadas y zapatillas converse blancas se esmeraba en repartir volantes, aún viendo que a la gente no parecía importarle.
Yeonjun tomó la iniciativa, acercándose al más bajito. Soobin por su lado, se encontraba perdido en los bonitos ojos y el rubio cabello de Beomgyu, ¿Era acaso un ángel? En toda su vida, nunca había visto a un omega tan precioso... Parecía tan irreal, como sacado de un cuento de hadas.
— ¡Hey! ¿Te interesaría apoyar a favor del ambiente y cuidado de las plantas? Nuestra hogar está cada vez más deteriorado gracias a la contaminación que crece cada año.— Beomgyu explicaba, enseñandole una imágen alusiva de un mar lleno de plástico, claramente sorprendente pero tristemente real.– Los océanos y mares cada día se contaminan más gracias a que grandes empresas botan sus residuos ahí. Mira, no es tan difícil... Sólo es saber reciclar las botellas o latas que puedes reutilizar dándole una segunda vida.– Siguió mostrando imágenes, utilizando una bonita sonrisa y su dulce voz.— Puedes cortar las botellas y crear maceteros para tu hogar o para regalar ¡Sería un regalo muy lindo de tu parte! Y, no deseches las cáscaras de tus frutas, sirven de abono para tus futuras plantitas.– Le extendió en folleto de tamaño A4, que se veía muy colorido. Tenía imágenes t letras de diferentes colores.— ¿Esta bien...?– Preguntó, mirando algo preocupado al alfa que parecía hipnotizado mirando sus labios. Yeonjun rápidamente tomó el folleto, asintiendo de manera rápida.
¿Qué había sido eso?
No lo sabía, tal vez un flechazo. No había atendido tanto nisiquiera a sus clases como lo hizo con este chico.
¿Será acaso su aroma que lo había echo sentir tan calmada entre todo el bullicio? Era raro, sentía unas grandes ganas de proteger a ese omega, aunque se haya dicho así mismo que el amor a primera vista o los "flechazos" eran puros cuentos baratos.— Yo...– Hubi un pequeño silencio, no podía pensar al ver los ojitos llenos de emoción del bajito, aquellos mechones que acompañaban a su pálido rostro.— Yo te agradezco mucho. Claro que haré lo que me dijiste, prometo cuidar el mundo todos los días de mi vida hasta mi muerte.– Beomgyu abrió un poco su boca, mostrándose sorprendido, cerrando estas segundos después.— Es más, ¿Tienes más folletos? Puedo repartirlos en mi facultad y entregarlos a más de mis amigos, ¿Te parece?– Preguntó, aún sin salir de su trance.
ESTÁS LEYENDO
ೀ ׅ ۫ . ꒰ 𝒯𝗁𝖾 𝐷𝗋𝖾𝖺𝗆𝗂𝗇 ﹙ℴ𝒻 ﹚𝒴𝗈𝗎 ᱙sooyeongyu ! 𔘓
Romance𝜗𝜚 : 𝓅𝑒𝑡𝑎𝑙𝑜𝑠 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 ℯ𝓁 𝗌𝗈𝗈𝗃𝗎𝗇𝗀𝗒𝗎.