Ya habían pasado dos semanas desde que Mike y Jane se habían besado y 1 semana desde que comenzaron a ser una pareja oficial, todos sus amigos estaban felices por ellos, bueno, tal vez no todos. Will fingía estar feliz por ellos, pero por dentro sentía muchos celos y envidia porqué Jane si podía estar de la mano con Mike y besarlo en público, algo que él quería hacer desde que descubrió que le gustaba su mejor amigo.
Mike y Jane no hacían nada más que pasar tiempo juntos, solos, cosa que molestaba a Will, Jane se llevaba toda la atención de su novio, ahora incluso ya no jugaban D&D, le molestaba, no sólo el hecho de que no podía pasar tiempo a solas con su novio, sino también que Lucas también estaba dándole toda su atención a Max y Dustin pasaba tiempo con Steve, a ninguno parecía importarle.
Él no se preocupaba, sabía que volverían a ser como antes, aunque tenía sus dudas, no perdía la esperanza. En ese momento estaban en el centro comercial porque Mike quería comprarle algo especial, según él, a su Jane, Will odiaba eso, Mike nunca hizo eso con él, y no es que le importara lo material, pero no podía evitar sentirse celoso.
— ¿Podemos jugar D&D? — Preguntó Will hartó de caminar, habían estado en ese centro comercial por más de una hora y el tonto de Mike aún no se decidía por nada.
— ¡Aún no! — Will frunció el ceño — todavía no encuentro un regalo que pueda pagar. — Rodó los ojos con molestia, Mike parecía de esos tontos novios que querían complacer a sus tontas novias, no es que estuviera mal, pero Will odiaba como se comportaba su novio.
— Esto es estúpido. — Susurró pero logró ser escuchado por los dos chicos.
— No seas así, Will — Lucas se acercó a él rodeando sus hombros. — Cuando tengas novia lo vas a entender. — Le sonrió con intenciones de reconfortarlo.
— Sí, supongo. — Observó con molestia, para nada fingida, a Mike, este fingió no darse cuenta de la mirada que su novio le lanzaba.
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— No puedo creer que salga tan caro un oso de porquería. — Soltó molesto Mike caminando con su novio y su amigo hacia sus bicicletas. — Por mi puede meterse ese maldito oso por el culo. — Will frunció el ceño queriendo golpearlo en ese momento.
— Calmate, no es para tanto, ni fuera tan importante. — Soltó Will claramente molesto de la actitud de Mike.
Mike lo observó de pies a cabeza con su ceño fruncido, y resopló sin entender la actitud de su novio.
— Claro.
Estaban a punto de irse cuando escucharon las voces de Max y Jane.
— ¿Qué hacen acá? ¿Vienen a comprarles nuevos pañales a Mike? — Soltó Max molestando al novio de su mejor amiga, comentario que hizo soltar una risa a los demás en el lugar, excepto a Mike que la miraba mal.
