UN HUMANO EN EQUESTRÍA.

CAPITULO 2.PARTE 2.

Apple Jack abrió sus ojos esperando despertar y ver todo de vuelta a la normalidad, pero no fue así. La oscuridad seguía reinando, como si hubiese habido una guerra entre aquellos astros y la luna hubiera salido como la vencedora. Ella ahora si estaba segura que algo andaba mal, pero lo que más le atemorizo, lo que hizo que su piel se pusiera de gallina fueron aquellas palabras que había dicho Big Mac la noche anterior.

" No crees que en caso de que fuera algo grave ella junto a tus amigas ya habrían venido a buscarte" pero esas últimas palabras eran las que más resonaban en su cabeza.

"habrían venido a buscarte" "habrían venido a buscarte" "habrían venido a buscarte".

Como si su vida dependiera de ello, Apple Jack salió disparada de su habitación con tanta prisa que incluso olvido su característico sombrero. Big Mac vio como ella salió de la casa y grito

¡¡¿Apple Jack, a dónde vas?!!

A lo que ella respondió sin detenerse ni un centímetro.

"Volveré pronto".

Cuando Apple Jack al fin llego a Pony Ville vio algo que hizo que sus orejas se cayeran al instante y diera unos pasos atrás. Poniville aquel hermoso pueblo que regaba grandes cantidades de energía y felicidad estaba hecho un caos. Las casas se encontraban destrozadas y quemadas y no solo eso, se veían plumas y sangre esparcidos por las casas, las ventanas y el suelo.

Apple Jack camino con lentitud por aquel destrozado pueblo. En el camino llego a ver cuerpos envueltos en mantas blancas. Los cuales uno por uno, eran metidos en carretas para llevárselos a quien sabe dónde. En ese momento, recordó la razón por la cual había venido al pueblo, sus amigas.

El lugar que le quedaba más cerca era la pastelería de los Cake's. Cuando llego, vio el lugar destrozado. Ventanas rotas, paredes con agujeros, como si balas hubieran pasado a través de ellas, el techo estaba asquerosa-mente manchado de varias cosas, sangre, plumas y pequeños pedazos de carne.

El olor que desprendía aquel lugar el cual en el pasado atraía a un montón de ponis hambrientos, se había borrado y no quedaba ningún rastro de él. Ahora, sangre y carne putrefacta se podía oler con una increíble facilidad. Si antes ese lugar era buscado por ponis que buscaban saciar su hambre con unos deliciosos pasteles, ahora solo las moscas y cuervos se aparecen para devorar toda la sangre y tripas que se pudieran encontrar ahí.

El corazón de Apple Jack latió con fuerza cuando sus ojos observaron las puertas de la pastelería bloqueadas por unos tablas de madera y una cinta policíaca.  sin vacilar retrocedió y se dirigió a una gran velocidad hacia la puerta del establecimiento y con una fuerte patada se deshizo de los obstáculos que impedían su entrada.  Entro sin dudarlo y vio en frente suyo algo que parecía ser una escena del crimen. Las mesas y las paredes estaban agujeradas y con quemaduras. Había sangre y plumas dentro del establecimiento esparcidas por todo el lugar. 

Mientras Apple Jack observaba el lugar, un poni vestido con un traje blanco decorado con unas cruces rojas apareció por detrás de ella y le dijo:

- ¿Quién eres tú? Los ponis no tienen permitido entrar aquí.

- ¿Eh? ¿Tú... ¿Tú quién eres? Pregunto Apple jack agitadamente al poni médico.

- Soy Red Cross. Ahora responda a mis preguntas ¿Quién eres tú? ¿Porqué estás dentro de una zona cerrada?

- ... Soy Apple Jack y disculpe, pero aquí vive una amiga y al ver como estaba la pastelería me preocupe y solo pude pensar en entrar.

Red Cross la escucho con atención para posteriormente que esta dejara de hablar preguntar con un tono más empático.

- Este lugar fue desalojado hace varias horas. Ya no queda nadie dentro; dígame ¿Cómo se llama su amiga?

- Pinkie Pai ese es su nombre.

El doctor saco una pequeña libreta de uno de sus bolcillos y empezó a ojearla. Hasta que este se detuvo en una hoja y empezó a leerla con cuidado y dijo:

- Pinkie Diane Pai. Yegua rosada de 22 años de raza terrestre ¿Es ella?

- ¡¡SI!! Exclamo Apple Jack con preocupación.

- Perfecto. Se encuentra en la Carpa 34 del lado oeste de poni vill. Siendo más específico en el área número 13.

- ¡¡MUCHAS GRACIAS!! Grito Apple Jack antes de salir disparada de la tienda. Dejando solo a Red Cross.

Carpa 34, área 13 de poni vill. Carpa 34, área 13 de poni vill. Repitió una y otra vez hasta que al fin llego a la carpa. Era enorme y blanca con una cruz roja en el medio. Apple Jack se dirigió con cautela hacía ella, pero la detuvo una enfermera que se encontraba en la entrada de la carpa la cual le dijo.

- Solo personal autorizado y familiares cercanos del internado.

- Soy pariente de una de los ponis que se encuentra dentro. Se llama Pinkie Diane Pai dijo apresuradamente.

Al igual que Red Cross, reviso el nombre en su libreta. Y dijo:

- Ella se encuentra aquí, esta en la camilla 42 pero antes de entrar hágame el favor de darme su nombre. Y evite hacer ruido excesivo.

- Mi nombre es Apple Jack. Y tratare de no ser tan ruidosa.

Las cortinas se abrieron permitiendo a Apple Jack entrar. En ese momento observo decenas de ponis en muy mal estado acompañados de algunos cuantos ponis que seguramente al igual que ella eran familiares. Algunos de estos afectados tenían vendajes los cuales estaban manchados de sangre mientras que otros se encontraban con partes faltantes, alas, cuernos o patas... Esto solo hizo que su corazón se acelerara de sobre manera hasta el punto en el que esta empezó a sudar, camino mirando a todas direcciones buscando la condenada camilla 42.

Sus ojos se iluminaron al ver el número 42 en frente de una camilla. Ahí estaba Pinki pero no era la Pinki de siempre, se veía menos rosada, su cabello estaba lacio, y le faltaba un pedazo de oreja y aunque estaba despierta se veía a simple vista lo mal que se encontraba.

- Terrón de azúcar...

- ¿Apple Jack, eres tú?

La yegua naranja le dio un fuerte abrazo al oír la apagada voz de su amiga y le respondió:

- Si, soy yo. Dios ¿Qué te paso? Solo mírate...

- Si... Este no a sido mi mejor día. – La yegua intento levantarse un poco pero Apple Jack al ver las dificultad con la que se movía, la agarró y la recostó, insistiendole que no se esforzara demás. A lo que Pinki asintió en señal de aceptación. – Oh Apple Jack fue tan horrible, ellos... ellos muri...

No pudo terminar su oración antes de que se rompiera en lágrimas. La Apple la miro con una preocupación que se podía notar a simple vista. ¿Ellos muri...? ¿Acaso lo que pinki quería decir era "ellos murieron"? ¿Quiénes murieron? ¿Las chicas? ¿Los cake's? ¿Quiénes? Esas y más preguntas pasaron acompañadas de imágenes de todos sus conocidos en situaciones horribles.

- Pinkie... ¿Quiénes? ¿Quiénes murieron? Pregunto nerviosa y con un gran terror.

- Los niños... Los hijos de los cake's, murieron.  Fue mi culpa...