Read your heart [Damianya, Twiyor]

Misión 04: Operación Strix, la última misión.

Ser un espía significa mantenerse oculto del mundo, es estar preparado para cualquiera cosa, es pensar con la mente fría y, sobre todo, es cumplir con cada una de las misiones otorgadas.

Twilight se convirtió en el mejor espía de WISE, no por su talento, sino por su perseverancia. Porque aprendió a ocultar sus sentimientos y sus intenciones de los demás, pese a su gran atractivo, siempre se mantenía desapercibido para los escogidos por él.

La Operación Strix era solo otra misión más.

¿Conseguir una esposa? En dos días lo hizo. ¿Conseguir una hija? Pan comido.

Tener un apartamento, comida, ropa y hacer lo posible para pasar tiempo juntos era justo lo que necesitaba para seguir fingiendo, el problema principal fue... que no se dio cuenta en qué momento dejó de fingir.

Las tardes de investigación pasaron a ser un helado en el parque, las noches de escape para recuperar piezas robadas pasaron a ser una noche junto a Anya porque tuvo una pesadilla, el excesivo dolor de cabeza por leer tantos expedientes pasaron a ser debido a la comida de Yor, aumentándole una hora en el baño.

Cada momento que pasaba con ellas, dejó de ser pintado de humo para esconder sus verdaderos objetivos y se convirtió en el aroma fresco y natural de la mañana.

Ahora, cuando Twilight por fin se dio cuenta de en quién se estaba convirtiendo, decidió tirar todo por la borda, porque en el instante en que el cuestionamiento de sus sentimientos se asoman, es la única prueba de que al corazón no se le manda ni controla, pero sí se le ignora.

Las palabras de Yor y Anya venían en su cabeza grabadas.

No importaba que tuviera aquel cigarro en la boca, que después de años volvió a probar, nada podría calmar los pensamientos intrusivos que se apoderaban de su mente. ¿Lo peor? Es que sus pensamientos no eran acerca de cómo está a un paso de ser un sospechoso de espía y a dos más de que lo descubran, sino que sus pensamientos eran recuerdos basados en realidades que se convierten en sentimientos que apuñalan.

Caminó de lado a lado, esperando una respuesta por parte de Sylvia.

No tenía demasiado tiempo, quizás era momento de fingir otra personalidad; una peluca, una nueva vida, incluso podría salir de Westalis por un tiempo.

Apagó su cigarro y encerró entre sus manos su cabeza, sabiendo que nada de lo que haga, podría hacerlo olvidar el rostro decepcionado de Yor y la expresión molesta de Anya.

Pero debía ser fuerte y aceptar que todo eso en algún momento pasaría, solo que le duele un poco más porque fueron muchos años.

Muchos hermosos años.

—Suficiente, Twilight —se regañó.

La puerta se abrió y Sylvia entró con un par de documentos en sus manos, mientras que detrás de ella entraban otros dos espías de WISE.