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Está esperando la ambulancia.

Llueve un poco y se siente algo de frío pero ahí tiene que estar.

Parece ser que este trauma necesita de sus habilidades como Especialista en Cardiologia.
Está ahí, en la puerta mientras la suave brisa acompañada de pequeñas gotas de agua caen en su rostro.

"Oh, veo que también te llamaron"

Voltea un poco y puede ver a su compañero.

"Benedict"

El hombre le sonríe de vuelta. "Harry"

Ambos regresan sus miradas al frente con diminutas sonrisas en sus rostros.

"¿Crees que tarde mucho?"

Justo la sirena de la ambulancia se escucha más cerca y Harry hace una mueca.

"No lo creo, ya esta aqui"

Dos ambulancias entran y Harry se dirige a la primera, la puerta se abre y Rachel baja de esta.

"Clarisse Rouvman, treinta y cinco años estuvo en un choque múltiple, tuvo dos paros cardíacos en el camino, logramos estabilizarla una calle antes de llegar aquí"

Harry toma la tabla que Rachel le extiende y asiente. "Vamos, hay que llevarla  adentro"

Llevan la camilla adentro a uno de los cuartos de atención de trauma.

Lo único de lo que Harry puede asegurarse es que su almuerzo con su mejor amigo se tendrá que posponer para otro día porque hoy tiene una vida que salvar.

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La cirugía llevó más de lo que pensó, son cerca de las ocho de la noche cuando por fin salió del quirófano. Esta en la estación de enfermeras actualizando el expediente de su paciente que aun permanece con vida, escucha cómo las enfermeras hablan acerca de que el doctor Benedict está de vuelta en el hospital y sonríe mientras niega discretamente.

Benedict es muy popular en el hospital debido a su excelente buen humor, es muy amable y siempre tiene una sonrisa en el rostro; claro, como todos él también tiene días malos pero siempre, siempre trata de ver lo mejor en lo peor. Y eso fue motivo suficiente para que Harry lo detestara al inicio.

Ellos realmente no podían estar en la misma habitación más de dos minutos porque ya iniciaban una pelea hasta por lo más mínimo. Fue difícil, Harry estaba pasando por tanto y prácticamente no tenía mucho tiempo de haber dado a luz, aveces sus pechos dolían, claramente al ser un hombre no habían crecido pero sí estaban un poco inflamados, entonces mientras un día Harry ordeñaba todo lo que tuviera en sus pechos en una sala de descanso, Benedict entró y lo vio.

Harry solo había rodado los ojos mientras el contrario se veía totalmente apenado.

Entonces después de un tiempo Benedict empezó a mostrarse más amable y simpático con él, para cuando ambos se dieron cuenta Harry ya le estaba contando todo, como había renunciado a su vida para seguir su sueño y Benedict, él le había brindado su hombro para que llorará lo necesario. La amistad nació, y en los últimos casi cinco años se habían vuelto el dúo perfecto en el hospital.

"Doctor Styles" Era Maddie, una de las enfermeras en el post operatorio. "¿Sabe si el Doctor Benedict tiene algo por hacer esta noche? Nosotros le planeamos una pequeña bienvenida en la sala de enfermeras"

Harry la miro sonriente y algo sorprendido, vaya, una fiesta de bienvenida.

"Ah, yo, ¿no?, es decir apenas regreso hoy, dudo que tenga algo pero le preguntaré" Le responde y ella sólo se gira sonriente a sus demás compañeros.

keep driving |l.s.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora