El pasado suele ser amigo pero también un peor enemigo, eso es lo que piensa Daren Volkov el Pakham de la Mafia Rusa.
Ya que lo que se graba a fuego en el corazón no se borra ni se olvida pero él desafiará los mitos y viejas leyendas demostrando que...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Amnesia Daren
1 2 3... 1 2 3... Dentro, fuera, dentro, fuera, el saco se balancea sin piedad alguna con el sonido de Bones de Imagine Dragons, el sudor se resbala por todo mi torso, la frente me pica debido a ello, pero la adrenalina es mayor al deseo de parar.
—Si sigues así, terminarás sin manos —advierten, al bajar el volumen del estéreo, tomando uno de los hidratantes que resguardo en el congelador del gimnasio.
—¿Qué mierda haces aquí? —preguntó irritado, ya que parece mi puta conciencia.
—Buen día, para ti también hermanito. —Su voz se impregna de ironía, pasando por alto mis insultos, acomodándose en el banquillo, a ver como sigo con mi rutina de ejercicios.
—¿En serio?, ¿Qué quieres Kaira?—indago, cansado de su molesta presencia, parando mi rutina.
—¿Te resulta? —inquiere, y respiró profundo por lo mismo de siempre —. Por qué si haces esto, desde hace mucho tiempo a modo de terapia, es por qué algún resultado ha de darte. —Me ve con el ceño fruncido, apartando su trenza francesa de su hombro —. Pero bueno, en fin, no estoy aquí para entender el espécimen raro que eres, solo te he traído esto.
Seco el sudor de mi frente con la pequeña toalla que me tiende, tomando el sobre plateado, donde una invitación de color azul plomo, informa sobre el matrimonio de Beret Záitsev, en realidad su segundo matrimonio.
—¿Cuándo llegó? —cuestiono, leyendo la información.
—Hace tres semanas —responde despreocupada, y alzó una ceja esperando una explicación del retraso de la información, ya que el dichoso matrimonio es esta tarde —. Pero como hasta ahora te desocupas, pues aquí la tienes.
No le respondo, y solo trato de salir del gimnasio, giro a la derecha en dirección de las puertas dobles que conectan a la sala de estar, pero antes de cruzarlas, vuelve hablar.
—Aunque te revientes los nudillos, ella siempre estará ahí Daren Volkov.
Ignoró sus estúpidos comentarios alejando las sombras del pasado, podrá ser mi hermana pequeña, pero ella no conoce una puta mierda, ya que únicamente habla porque tiene lengua.
◆ ▬▬▬▬(☬)▬▬▬▬ ◆
Camino a las camionetas negras, estacionadas en la entrada de mi mansión, pero antes de llegar escuchó un grito que hace que me masajee la sien.
—¿Pensabas irte sin mí? —indaga, haciéndose la ofendida, en lo que guarda su arma en su bolso de mano.
