『Inosuke x Aoi』 Inosuke Hashibira y Aoi Kanzaki en diversos fanfics donde su amor es el tema principal.
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Días temáticos de la semana.
🐗💐 1. Genderbender/Cambio de género.
🐗💐 2: Época.
🐗💐 3: Flower Shop/AU.
🐗💐 4. Crossover.
🐗�...
Aclaración: Este fic participa en el INOAOI WEEK 2022 realizado por el grupo en Facebook "Inosuke x Aoi/InoAoi 伊アオ".
Día 6: Halloween.
Notas:
¡Bienvenidos al sexto fic de esta semana! Ojalá lo disfruten.
NO PLAGIEN, NO RESUBAN Y TAMPOCO TRADUZCAN SI YO NO LO HE AUTORIZADO. —Gracias.
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—¡Eres un idiota! —exclamó Zenitsu, vestido de zombi, jalando hacia atrás con todas sus fuerzas.
—¡De todas las locuras que has hecho, Inosuke, ¿por qué esta?! ¡¿Y por qué ahora?! —también disfrazado (de samurái) Tanjiro se hallaba exaltado al igual que Zenitsu mientras se empujaba a sí mismo hacia atrás.
Ambos amigos sujetaban con fuerza y jalaban, pero no había resultados.
—¡Cállense y tiren! ¡Son tan débiles!
Los tres amigos gritaban a su modo; Zenitsu siendo el más escandaloso.
Para cuando la puerta del salón donde estaban se abrió y una chica disfrazada de Sailor Saturn apareció, los 3 giraron sus cabezas en su dirección.
—¿Qué pasa? Incluso desde los baños de las chicas puedo oírlos —espetó fastidiada y no tan extrañada de verlos en una situación incomodísima y rara:
Inosuke estaba acostado de espaldas sobre el escritorio del profesor, sujetándose del borde con sus piernas para no ser jalado por completo hacia sus amigos, que tiraban de la gran calabaza que estaba sobre su cabeza.
Al parecer, Inosuke estaba vestido de espantapájaros. Y se veía lindo.
—¡Aoi, ayúdanos! —rogó Zenitsu—. ¡Este idiota se atoró!
—¡No me llames idiota, idiota! —exclamó Inosuke desde el interior de la máscara, cuyos ojos y boca evidentemente estaban pintados con un marcador color negro.
Esto... ya era otro nivel que Aoi no se iba a molestar en intentar entender.
—¿Cómo rayos te atoraste en ella? —preguntó Aoi acercándose a los chicos, para enfocar su vista en Inosuke, que se sentó sobre el escritorio, girando su cabeza hacia ella.
—Usé mucho yeso para que la máscara no se fuese a caer.
—¡¿Yeso?! —Aoi hizo un gesto de sorpresa para cambiar a uno de gigantesco fastidio; miró atenta cómo el yeso del que hablaba Inosuke llegaba hasta su cuello, seguro el tonto ni siquiera podía respirar bien—. Felicidades, escalaste otro nivel en la pirámide de tu estupidez. Me sorprende que sigas vivo... o consciente.
—¡Oye!
—¿Y no han pensado en romper la máscara? —preguntó Aoi a los otros dos.
—Lo intentamos —se lamentó Zenitsu.
—Es una calabaza real —dijo Tanjiro, cansado—. Necesitaríamos un mazo gigante o algo parecido para eso, y tendríamos que tener cuidado con la cabeza de...
Con los ojos entrecerrados, Aoi tomó la mano de Tanjiro y la de Inosuke, bajándolo del escritorio. Los puso frente a frente y una vez que los acomodó, ignorando las palabras de los 3 chicos pidiendo explicaciones, se paró atrás de Inosuke, sujetándolo fuerte, pasando sus manos por debajo de sus brazos, uniéndolas sobre su fornido pecho apenas cubierto por una camisa vieja y rota.
—¡O-o-oye...! —Inosuke tembló, algo poco usual en él.
—¡Zenitsu! —espetó Aoi (fingiendo no haberlo notado) hacia al chico rubio.
—¡Usaremos la cabeza de Tanjiro! ¡¿Listos?!
—¡¿Su qué?! —exclamó Inosuke tensándose.
—¿Mi qué? —al mismo tiempo, Tanjiro frunció el ceño confundido.
—¡Ah, ya lo capto!
Zenitsu se paró tras Tanjiro mientras Aoi sujetaba a Inosuke en su lugar.
—¡¿Para qué usarás la cabeza de Monjiro, Aoi?!
—Uno —contó Aoi.
—Dos —contó Zenitsu.
—Esperen... ¿qué se...?
—¡Tres!
Tanjiro no pudo terminar de preguntar cuando Zenitsu lo empujó, sujetándole la nuca para hacerlo bajar de golpe su cabeza mientras Aoi hacía lo mismo con Inosuke.
La cabeza de Tanjiro golpeó la calabaza, partiéndose en pedazos.
Al menos, la zona que había impactado sobre la frente del chico pelirrojo.
A pesar de eso, Tanjiro no se sintió adolorido, a diferencia de Inosuke, que casi se cayó sobre su trasero de no ser porque Aoi lo sujetó fuerte contra ella.
—Listo, ahí tienen, una cabeza de tonto, sin calabaza —dijo Aoi soltando a Inosuke, dejándolo caer de culo sobre el piso.
—¡Eso pudimos haberlo pensado también! —se quejó Inosuke, atontado, con su cabeza meciéndose.
—Sí, pero no lo hicieron —se burló ella recibiendo el agradecimiento de los otros 2 chicos.
Sacudiéndose las manos, Aoi dejó a esos 3 solos, decidiéndose a encontrar a Kanao y Shinobu. Abajo estaba un pequeño evento de comida y dulces, y por nada del mundo quería perdérselo...
De pronto, viéndose sola por uno de los pasillos, Aoi suspiró, dándose cuenta de que sus manos estaban temblando.
«Su espalda estuvo sobre mis pechos... y yo sujeté el suyo... rocé su piel con las yemas de mis dedos» pensó avergonzada, «no lo hice con malas intenciones... ¡y no es mi culpa que él sea tan... musculoso!»
Tratando de calmarse, Aoi se cubrió la cara con ambas manos, esperando no pensar demasiado en eso.
—FIN—
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