Capítulo 11

286 47 6
                                    


Cinco años habían pasado desde la última vez que Loki había visto a sus hijos Fenrir y Jormün en persona, aún no podía ir Asgard o que sus hijos le visitaran, ahora solo le era posible verlos a través de la mente de Thor cuando le visitaba una dos veces por mes, si es que Thor no se encontraba en algún asunto político o poniendo paz en los 9 mundos era cuando más tardaba en saber de ellos.

Le daba orgullo saber que Jormün se desenvolvió muy bien en el arte de la espada y el combate cuerpo a cuerpo, sabía que esto era gracias a sus grandes maestros guerreros, Sif, Hogun, Fandral, Volstag y su padre, incluso también llegaba a practicar con las valkirias pero Thor decía que su interés principal ahí era una joven llamada Hilda una guerrera que ya había estado en varias batallas siendo así de las mejores, la cuál llamó la atención de su hijo, así que era probable que en algún momento se le declarará a la guerrera ya que los rumores en el reino parecían ser ciertos.

Fenrir parecía haber heredado el gusto por los libros como a su padre Loki, cada libro que llegaba a sus manos lo devoraba y memorizaba, también estudiaba medicina junto a los sanadores de Asgard decía que eso también se parecía a la magia, saber sobre los ingredientes correctos para sanar alguna afección, le gustaba la idea de seguir haciendo magia con sus manos de esa manera.

Mientras tanto Hela tenía mucho más control con su poder, a diario practicaba, Loki hizo que Thor le llevará unos antiguos pergaminos dónde se hablaba del Hel para que tuviera mayor conocimiento del lugar al que debía de ir cuando se sintiera preparada.

—La verdad es que ella nunca estará lista para cumplir con su destino— dijo Loki cuando Thor le había preguntado sobre cómo veía a Hela para ir al Hel, mientras la veían utilizar su magia llamando almas y haciendo lo que ella les ordenará.

Thor solo suspiro ante esa respuesta, abrazando desde la espalda a Loki y dejando un pequeño beso en su cuello para después decirle — He pensado en ir de nuevo con las Nornas debe haber otra manera, quisiera que todos estuviésemos juntos en Asgard— Loki no dijo nada, sabía que Thor era necio y por más que le dijera que no había más opciones aún así él iría, así que solo se dió la vuelta y le dió un beso en la boca y se dirigió hacía Hela.

—Es todo por hoy hija, vayamos a comer algo con tu padre— la chica regresó aquellas almas y  se fueron a casa.

Ya en la comida, Thor trato de hacer conversación con Hela pero como siempre ella contestaba de manera cortante y sin ganas, Thor terminaba rindiéndose agachando la mirada y terminando de comer en silencio, esto entristecía a Loki, ver qué su hija seguía siendo infeliz desde el momento en que vio como sus hermanos si podían cambiar su destino y ella no tenía la misma opción que ellos.

Cuándo terminaron de comer Hela se retiró sin más a su habitación, Loki se disculpó con Thor por su comportamiento y le dijo que tratará de comprender el porqué estaba así, Thor le sonrió y dijo que no se preocupara que lo entendía muy bien y era por eso que trataría de encontrar una manera de ayudar a su hija, los dos se abrazaron y se fundieron en un beso.

—Ya es hora de irme— dijo el rubio, Loki le tomo de la mano y se dirigieron a la salida de casa para así despedirse, ya estando afuera Hela llegó corriendo diciendo —¡Espera!— Thor y Loki vieron con extrañeza ese acto, la chica le entregó unas cartas —Son para mis hermanos, ¿Se las podrías entregar?— Thor le sonrió y las guardó, se despidió diciendo que esperaba no tardar tanto en verles.

Al llegar a Asgard  lo primero que hizo Thor fue llamar a sus hijos para entregarles las cartas de su hermana, los chicos se veían emocionados ya que era la primera vez en esos cinco años que sabían de ella, ya que ellos siempre le mandaban saludos he igual cartas pero ella jamás les había respondido.

Cada uno se llevó su carta y desaparecieron de vista de su padre.

—¿Por qué aún sigues preocupado?— dijo Frigga mientras veían desde lo alto a sus nietos correr a sus aposentos, — Sabes también como yo de mi preocupación, ¿no es así mi reina criada entre brujas? — Frigga suspiro para después decir —pero aún falta mucho, sabemos que lo único que podemos hacer es esperar lo que el destino ha marcado— Odin colocó en la mejilla de su reina un beso y después le tomó la mano para caminar juntos por el pasillo.

Fenrir entró corriendo a su habitación para después cerrar la puerta con llave, quería total privacidad para leer la carta de su hermana, se sentó al borde de la cama y abrió el sobre.

Su cara de emoción y alegría se esfumó en segundos al ver lo que contenía la carta, la imagen de un lobo y abajo de esta con letras escritas con lo que parecía sangre decía "Cuando llegue el momento nos volveremos a ver hermano"

Su cara de emoción y alegría se esfumó en segundos al ver lo que contenía la carta, la imagen de un lobo y abajo de esta con letras escritas con lo que parecía sangre decía "Cuando llegue el momento nos volveremos a ver hermano"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al soltar la carta en el suelo ésta se incendió y se volvió de inmediato en cenizas.

En eso escucho como llamaban a su puerta con desesperación, no era otro más que Jormün —"¿Que decía tu carta?— dijo gritando a Fenrir, este le dijo que se calmara y que entrara en su cuarto para después volver a cerrar con llave.

—Decía que cuando llegue el momento nos volveríamos a ver, y la carta se convirtió en cenizas cuando la solté y ¿la tuya?— Jormün empezó a dar vueltas en la habitación de su hermano con nerviosismo —Lo mismo con el dibujo de una serpiente, ¿Que crees que está planeando Hela? No quiero perder todo esto, no quiero, me niego— Fenrir abrazo a su hermano y le dijo que todo estaría bien, que encontrarán la manera de solucionarlo.

LOS HIJOS DEL RAGNAROK #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora