Del Paladar a Tu Corazón (BinWoo)

Y AHORA QUÉ

Desde aquel el día que se conocieron Dong-min y Moonbin, los días habían pasado tranquilos y normales para todo mundo pero para estos dos chicos habían sido los mejores ya que gracias a sus amigos habían salido a paseos todos juntos y compartir mas, Dong-min a tenido la oportunidad de conocer mas a Bin y su vida pasada y sin querer Bin estaba siendo parte de su vida muy disimuladamente al igual que Dong-min para Bin.

-Dong-min, hoy solo descansa, ve a tu departamento y duerme todo lo que quieras- le decía MJ empujándolo hacia la salida del restaurante ya que hoy para Dong-min era su día libre.

A Dong-min no le dio tiempo de quejarse o alegar porque MJ ya le habia cerrado la puerta en sus narices.

Sin más comenzó a caminar sin rumbo.

mientras caminaba se acordó de algo que siempre hacia cuando estaba en Japón y tenia sus días libres así que pensó «por que no hacerlo ahora» Estaba haciendo un día muy agradable así que no desaprovecharía e iría a todas aquellas tiendas callejeras de comida para degustar y sacar ideas, mejorar en sus platillos o simple entablar una conversación con los  dueños de las tiendas de comida y escuchar sus experiencias en la cocina, amaba escucharlos y aprender de ellos.

y así con ese pensamiento Dongmin emprendió camino hacia el centro, paso por el frente de la empresa Moon que le dio una mirada llena de orgullo,pero iba tan entusiasmado que no se dio cuenta  que había llamado la atención de un hombre que le seguía todos sus movimientos y decidió seguirlo y quizás lograba su objetivo con aquel chico guapo de cabellos negros.

Dong-min iba de un lado para otro saliendo y entrando en las tiendas, degustando de los bocadillos que compraba y apuntando en su libreta detalles de todo aquello que le ayudaría en su cocina. Mientras tanto el hombre que lo iba siguiendo lo veía  con una sonrisa en los labios y estando atento para apresarlo en el momento adecuado.

"Cuando yo era chico solo cocinaban las mujeres, pero a mi me parecía muy divertida la cocina". le contaba un chico de 33 años, dongmin lo escuchaba expectante

 "De chico me gustaba ver cómo cocinaba mi abuela. Cómo hacía los fermentos, las bases. Se hacía todo casero. Creo que fue ahí cuando nació mi amor por la cocina"...Ohhhhh deica Dong-min asombrado.

-Se podría decir que te colabas en la cocina de la abuela?- preguntaba Dong-min con una sonrisa en el rostro 

y así siguió el relato del chico contando contando como se había enamorado de la cocina, lo que había aprendido de su abuela y madre y como seguía manteniendo todo aquello lo que aprendió para no perder el sabor original de sus platillos y de ultimo le contó unos pequeños secretos a Dongmin para  realizar un delicioso Kmichi, algunas bases, el guiso, etcétera, etcétera, etcétera...

cuando Dong-min salio del local se dio cuenta que ya era algo tarde, así que ya no iría a mas tiendas, por lo que decidió ir a dar una vuelta por el parque ver algunas ventas de artesianas y luego regresar a casa.

Dong-min iba viendo cada puesto de ventas artesanales y deteniéndose mas que en uno u otro puesto observando pequeños dijes, pinturas o lo que fuera que le llamara la atención, llegando al final de las tiendas se para para ver en varias direcciones pero, un poco alejado de la gente ve a lo lejos una rueda de personas y en el centro a unos chicos bailando, se anima a acercarse y ver el espectáculo ya que ver aquello era una de sus cosas favoritas.

Iba llegando a la multitud pero para su desgracia no logra ver nada desde donde esta así que decide adentrarse abriéndose paso entre la multitud, cuando ya estuvo a punto de llegar hacia el frente, siente una mano agarrar su brazo izquierdo y ser jalado bruscamente lejos de toda la gente, no le dio tiempo de gritar o pedir ayuda ya que lo habían tomado por sorpresa.

cuando ya estaban alejados mas o menos de la gente, Dong-min pone fuerza para poder zafarse y enfrentar al chico frente a el  y lo hace por que si fuera alguien que le quisiera hacer daño lo hubiera llevado mucho mas lejos y tratado con brusquedad y no soltarlo, pero todo eso era lo contrario.

así que se soltó del agarre  del chico con brusquedad y se enfrento a el 

-quien eres y que es lo que quieres- le pregunta con un poco de temor y retrocediendo un poco para a tras por si acaso tendría la oportunidad de  salir corriendo.

el chico que hasta ahora lo había perseguido toda la tarde se quita la mascarilla que llevaba puesta y deja expuesto su rostro para ser reconocido y junta todo el valor para hablar y...

-Me gustas- fueron las únicas dos simples palabras que salieron de su boca para luego ver a Dong-min salir huyendo.

-esto parece un deja vu- y quedando con este pensamiento Bin vuelve demasiado frustrado a casa esperando no haberlo arruinado.