Amar es hermoso, pero también duele, Luzu era una persona que odiaba el amor, tan solo ver una pareja le daba náuseas o mejor dicho le recordaba a su amor fallecido.
Cada vez que veía una pareja amarse su corazón se rompía en mil pedazos.[...]
Luzu estaba mirando los miles de libros que se encontraban en el estante, tomó un libro y salió de ahí. Camino un poco y llegó a un parqué abandonado, se veía muy oxidado, suspiro y se sentó debajo de un árbol.
Iba a comenzar a leer cuando escucho un sollozo, cerró su libro y volteó mirando a un chico de pelo azabache con un gorro azul, sus ojos llenos de lágrimas, una piel muy linda y frágil, Luzu dejó su libro preocupado y abrió los labios para hablar.
─ Disculpa, ¿Que tienes? ─ El azabache dejó de llorar y chillo de sorpresa. Luzu se rio y lo miro mientras el chico lo miraba con los ojos llenos de lágrimas.
Luzu miro los bellos ojos del azabache que parecían galaxias, un color avellana tan lindo. El chico parecía asustado, Luzu se dió cuenta y le sonrió.
─ No es nada, creí que estaba solo.─ Luzu se acercó a el y le limpió las lágrimas, el azabache se sonrojo por el acto mientras el castaño lo miraba con una sonrisa.
─ Soy Luzu.─ Dijo mirando a los ojos del chico.
─ Soy Quackity, un gusto.─ Quackity, tan bonito.
─ Tienes un bello nombre, quacks.─ Tomó la mano del contrario y beso los nudillos haciendo sonreír al azabache.
─ Muchas gracias, igual el tuyo.─ Luzu se rio por ver al azabache sonrojado, lo hacía ver más tierno.
Luzu acarició las manos de quackity mientras este ese dejaba tranquilo, no se dieron cuenta cuando Quackity ya estaba en el pecho de Luzu, y éste acariciando su espalda.
Ambos no les parecía incomodarles, parecían una pareja, Luzu se sonrojo al pensar en ese lindo chico como su novio, sólo rio por el pensamiento más ridículo que allá pensando, nisiquiera lo conocía del todo, que ridiculez.
Quackity se estaba quedando dormido, tenía los ojos entre abiertos con algunas lágrimas en sus ojitos.
─ Descansa Quacks.─ Dicho eso Quackity cerró por completo sus parpados y se durmió.
Parecía que esta no era la primera vez que se veían aún que lo era. Pero después de todo no iba a ser la única.
Abrió lentamente sus ojos, tardo unos minutos en recuperar la vista completamente y recordar en donde estaba. Tomó su celular y revisó la hora " 7:25 ", llevaba 3 horas durmiendo, había olvidado complemente que tenía que ir a casa de Vegetta.Sintio algo en su pecho y cuando miro era Quackity, aún dormía, se le hizo tierno ver a un angel dormir en su pecho. Quackity pronto empezó a abrir los ojos; rápidamente se apartó con la cara roja casi echando humo.
Luzu le sonrió divertido y se levantó del césped. Quackity lo miro un poco menos rojo que antes, Luzu le extendió la mano a los cuál quackity le dio la suya y le ayudo a levantarse.
─ Me tengo que ir─ Dijo sacando su celular.─, pero no puedo irme sin tú numero, quacks.
Quackity empezó aletear muy rápido y asintió lentamente, sacó su celular y luego miro a Luzu algo nervioso.
Parecía que su vida iba cambiando poco a poco.
Su vida era una completa mierda, creía que casarse sería una vida de sueños pero estaba completamente equivocado, su esposo era muy abusador con el, su cuerpo ya no parecía el mismo, tenía moretones en su cuerpo, tenía hambre.
Su esposo era lo contrario a alguien amoroso, sólo quería morir y no volver a vivir esa experiencia.
Un día que su esposo le gritaba el no lo soporto más y lo apuñalo hasta matarlo, Quackity escapo de ahí y no volvio.
Llegó a un lugar llamado Karmaland, ahí conoció a Rubius el cuál se convirtió en su mejor amigo, igual su pasado lo perseguía.
Y un día encontró al que se convertiría en su destinado.