XXV

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Ya habían pasado unos cinco meses de todo aquello y emocionalmente y físicamente había evolucionado bastante, más de lo que me esperaba. Ahora la cafetería era mía y por fin la señora Pups pudo descansar y Aiden compró para mi la cafetería y reformó la casa para que pudiéramos tener más espació en la casa. Dentro de nada empezaría la carrera y la verdad es que estaba ilusionada, mi padre aún me pagaba los estudios después de todo aquello lo mandaron a la cárcel y lo sentenciaron a pagarme los estudios sin fianza, yo había decidido estudiar en la universidad de Juilliard que estaba en New York ese había sido mi sueño desde pequeña, siempre había querido estudiar diseño grafico y hacer anuncios o películas animadas, no me pillaba muy lejos de casa pero tampoco estaba al lado Aiden no lo sabía pero estaba esperando respuesta de ellos para ver si habían cogido.

Aquella mañana yo celebraba los 18 y después de haber aprobado el examen practico y de llevar casi medio año de relación con Aiden baje con el a ver el regalo que me tenía hecho.

-No puedo aceptarlo.....-

-Claro que si, es tu regalo por aprobar el examen y de regalo, acéptalo, no es discutible.-

-Bueno, pero sabes que no tienes que hacerme estos regalos para enamorarme.- que tonta era a veces.

-Sube anda.-

-¡NO ME LO PUEDO CREER!-

-¿Mola eh?

-Me has comprado un Masseratti entero blanco como el que me gustaba.-

-Si, eso es, como el que a ti te gustaba.-

-¡ERES INCREÍBLE! Ahora ya podré ligar con todos los tíos.-me puso cara de póker aún sabiendo que iba de broma.- JAJAJAJAJAJAJ.-

-No hace risa, arráncalo, y dame una vuelta a ver si es verdad que te lo mereces.-

Y así nos vimos los dos dando una paseo con mi nuevo coche, a toda velocidad sintiéndola toda, nos miramos mutuamente, la gente nos miraba y yo alucinaba con todo aquello. Era como en los libros parecía de cuento y cada vez todo era más irreal. Algo en mi me decía que esto podría acabar pronto pero no le hice caso.

-Oye Aiden tenemos que hablar- Estábamos solos en casa, el hacía la comida y yo estaba sentada en un taburete de la cocina frente a el, me miro con cara extraña- Recuerdas que hablamos sobre a que universidad quería ir y todo eso.

-Si, te gradúas la semana que viene y aún no he visto tu vestido, pero dime.

-Bueno pues pedí plaza en la universidad de Juilliard.

-La de NY.- Parecía tenso y nervioso yo solo asentía con la cabeza- Pero esa esta lejos, es decir no mucho pero no podré verte diariamente.

-Lo se pero es mi sueño estudiar allí desde que tengo uso de razón quiero hacer diseño grafico. Siempre me ha gustado y me gustaría ser de esas personas que dibujas para Disney o Pixar e ir por la calle y ver a niños disfrutando con cosas que se que yo hice. Puede que la idea no te guste pero puedo venir todos los fines de semana y solo estaría allí entre semana.

-Vale si lo entiendo pero porque no ir a la de aquí, es bastante buena.

-No tiene el programa que tiene la otra, además no me gusta.

No dijo nada más y siguió haciendo la comida, el aire estaba tenso pero no quería tocar más el tema, pero sabía que le molestaría bastante después de todo lo que había hecho por mi pero era mi sueño y eso el debía de entenderlo aunque le costase no iba a poder protegerme o retenerme toda la vida. Teníamos que tener limites aunque el me veía indefensa aún ya no tenía ataques de ansiedad y eso era bueno. Me estaba sanando pero no podía depender de el al 100%.

-Vamos a llegar tarde- Grite desde abajo. Ese día era mi graduación y yo estaba esperando a que Aiden y Grace se acabaran de arreglar porque ellos en aquel momento eran mi uhnica familia y se había ofrecido a venir a verme aunque supongo que lo hacían más por mi que otra cosa. Llevaba el pelo recogido en dos trenzas y este de forma ondulada estilo natural, mi vestido era rosa pastel suave, largo y con algo de pedrería por arriba con corte en V haciendo un escote que realzaba mis pechos.- ¿Me apetece llegar a tiempo sabéis?

-Dios que si que ya vamo...- Se me quedó mirando, el iba con un traje azul negro y una corbata negra iba guapísimo, igual que Grace.

-¿Te gusta? Creo que es demasiado pero no estoy muy segura que piensas.

-Estas hermosa- Me beso suavemente mientras me cogía de la cintura. - Vamos o llegaremos tarde.

Durante toda la ceremonia estuve sentado al lado de Maya y Dylan los dos estaba muy guapos y el resto de chicos también estaban muy monos. Cuando me llamaron para ir a recoger mi diploma me sentí eufórica porque era un día importante y porque ellos iba a estar ahí mirándome. Subí y vi como Aiden me miraba con cara de orgullo mientras me sonreía. Al acabar la ceremonia mientras yo hablaba con mis amigos alguien se me acercó y me abrazó por detrás.

-Estoy super orgulloso de ti amor.

-Gracias- dije mientras le dada un pequeño abrazo. - Nos vemos esta noche.

-Vale te quiero-

-Te quiero.-

Los chicos y yo nos fuimos a comer para celebrar que nos habíamos graduado, fuimos a comer al Pato's un restaurante de comida japonesa muy rico.

-Os acordáis cuando..

-Ostia si es verdad JAJAJAJA.

-Y cuando casi nos expulsan por aquello....

-Pero eso fue culpa de Héctor.

-Si es verdad JAJAJAJAJAJAJAJJAAAJJAJJA

-Dame de tu comida- Intento Oliver robarme comida.

-Me tocas la comida y te mato ahora mismo.

Estuvimos recordando viejos recuerdos de la vida y del año que habíamos vivido juntos sin tocar temas delicados, hasta que ya se nos hizo la hora de irnos. Durante dos meses los alumnos de mi curso habían organizado una macro fiesta para celebrar la graduación y Aiden insistió en acompañarme aunque el salía menos de fiesta que un bebe. Lo vi en la entrada apoyado en su coche fumando y también vi como la puta del curso se acercaba a intentar ligar con el. Mientras ella le coqueteaba y el le ignoraba me acerqué y le bese mientras ella nos miraba, me coloqué delante del con una mano sobre mi pecho izquierdo.

-Perdona ¿Querías algo?

-¿Es tu novio?

-No, es que me gusta besar a desconocidos por la calle- dije mientras me reía.

-Pues no entiendo como es que estas con ella la verdad,

-Ella no es una puta y estoy enamorado que se le va a hacer.

Grítame en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora