Capítulo 11

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Leticia habló con sus padres sobre la decisión que estaba tomando. Ya lo había decidido, se quedaría en Acapulco hasta que diera a luz, trabajaría con Aldo en el restaurante y permanecería en el mismo hotel.

Er: No me parece la mejor decisión Leticia. ¿Cómo vas a quedarte aquí sola en una ciudad que apenas conoces? Si te pones mal, ¿qué vas a hacer?

J: Tu papá tiene razón Lety. Estaremos preocupados, además no creo que debas ocultarle a don Fernando lo que está pasando. Él debe saberlo.

L: Quizás se entere, pero por el momento necesito dejar las cosas así. Necesito tranquilidad mamá, por mi hijo. No puedo estar en la ciudad de México con los nervios de punta todo el tiempo, o con las presiones de conceptos, o con las emociones disparadas todos los días. Estar allá sería muy difícil, seguramente don Fernando me irá a buscar, por la situación de la empresa, yo no estoy dispuesta a seguir en sus líos. Además, si ya se casó, yo no quiero estar allá para verlo.

Er: ¿Y qué piensas hacer con Conceptos? Esa empresa está en tus manos (Preguntó Erasmo preocupado).

L: Tomás se hará cargo de todo. Le daré los documentos firmados necesarios para que sepan que cuenta con mi total autorización para los movimientos que haga falta realizar. Además, él les dirá que no puedo volver por asuntos de salud. Tranquilo papá, Tomás me mantendrá al tanto de todo.

T: Si Lety, lo haré aunque estoy seguro que a esa gente no le causará ninguna gracia (Dijo Tomás un poco angustiado).

J: Quizás lo mejor sea quedarnos aquí en Acapulco con Lety, ¿no crees Erasmo? (Le preguntó ella mientas Leticia la miraba sorprendida).

L: Pero mamá, yo no quiero obligarlos a nada.

Er: Creo que estoy de acuerdo con Julieta. Lo mejor será quedarnos. No quiero que vayas a cometer otra locura. Además, seguramente los Mendiola o Villarroel nos irán a buscar a la casa. Yo no quiero estar ahi, ¿con qué cara enfrento a toda esa gente?

J: Mejor nos quedamos aquí hasta que pase esto. Podemos quedarnos en el hotel.

L: Tal vez lo mejor sea rentar una casita pequeña.

T: Bueno, entonces yo regreso a México mañana mismo.

L: Gracias Tomás. Por favor mantenme informada de todo lo que pase.

T: Descuida Lety, espero que pronto salgamos de está situación.

T: Descuida Lety, espero que pronto salgamos de está situación

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Fernando estaba desesperado. Estar ahí en esa oficina lo enfermaba. Ya había marcado por teléfono muchas veces a casa de los Padilla sin recibir ninguna respuesta,  lo cual ya lo estaba poniendo nervioso. Tomar whisky le nublaba la razón. No entendía nada de lo que pasaba. Quería salir corriendo, pero no sabía a dónde ir. A su casa no quería, ahí solo se sentía peor. A casa de los Padilla no había nadie. La única opción que el veía era irse a algún bar. Ahí por lo menos, entre tragos y canciones, trataba de olvidar.

La fea más bella "Recuerdos de amor"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora