CAPITULO 5 UNA VÍCTIMA MÁS

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Estaba despierto mucho antes de que sonara el despertador, lo cual últimamente era muy frecuente, ya ni siquiera estaba disfrutando dormir y eso, aunado al resto de mis problemas me volvía loco; una suave imagen se sacudió dentro de mi cabeza, una imagen con unos hermosos ojos castaños, era obvio a quien pertenecían esos ojos, lo raro era que me dedicaban una mirada suplicante.

Al llegar a la oficina fui recibido con el molesto timbre de voz de Jake, dijo algo como un saludo, al cual no respondí, me encerré en mi despacho y me permití pensar nuevamente en la extraña mirada que me dedicaban los ojos de Jill en mi mente, definitivamente tenía que ser un efecto secundario producto de mi imaginación, mi cansancio, mi sed por no dejar impune su crimen y al mismo tiempo mi demora por lograr este último cometido. Era la única explicación razonable, pues hasta donde sabía yo nunca había tenido una interacción con ella, lo cual lamentaba profundamente estaba convencido de que de conocerla la habría amado profundamente y habría hecho lo imposible para que ella me amara también.

Pero ahora ella estaba muerta y su asesino si tenía el privilegio de respirar.

Lancé un puñetazo a la mesa, y no pasaron ni 2 segundos para que me arrepintiera de mi impulsividad porque Jake llegó evidentemente preocupado preguntando qué había sucedido, en el pasado no había ocultado mi desdén hacia él; lo que al principio era una simple aversión se había convertido en un verdadero odio.

Odiaba su impertinencia, la forma en que solo él sabía ser inoportuno y la manera tan desagradable que tenía de meter sus narices en mis papeles, que yo procuraba tener perfectamente arreglados.

                                                   

                                                                                    ***

No entendía lo que pasaba, daba lo mejor de mí me esforzaba al máximo, sabía que era joven y por lo mismo inexperto, pero sin importar lo que hiciera él nunca estaba contento;  era realmente frustrante cuando finalmente pude entrar a trabajar aquí había sido como un sueño hecho realidad yo había admirado al detective Ethan por años, quería ser como él y estaba convencido de que esta oportunidad sería el comienzo de cosas muy grandes para mí, quería ser un gran detective también y estaba seguro que trabajando junto a él lo lograría, por muchos meses me aferré a esta ilusión, sin embargo al pasar el tiempo mi esperanza decaía.

Hacía unos meses venía dando vueltas en mi cabeza una idea, en la oficina habían sonado rumores de que se abriría una nueva división en un pequeño pueblo, se esperaba que quienes quisieran se postularan.

No era lo que tenía planeado y definitivamente no era una de esas personas que se rinden con facilidad, pero me sentía estancado conocía mis habilidades y francamente estaban siendo subestimadas, Ethan se la pasaba todo el día encerrado en su oficina y las únicas interacciones conmigo se dedicaban a insultos y degradaciones, según él todo lo hacía mal.

Pero había algo más, hacía unas semanas que venía notando algo raro en él, sus migrañas y su extraña actitud sin una razón aparente, al principio pensé que solo era que stress causado por el trabajo y los últimos duros casos, no obstante había descubierto unas extrañas conexiones...

Por mi cuenta estaba profundizando en mis sospechas y estas estaban llegando a algo muy siniestro... Yo no quería seguir involucrado en eso si resultaba ser cierto (y había una gran probabilidad de que lo fuera) también era consciente que no iban a creer.

Serían alrededor de las 10: 37pm cuando salí del bar en el que me encontraba, solía ir ahí cuando necesitaba tomar decisiones; mis pies me llevaron hasta la puerta de mi apartamento donde se encontraba la silueta de un hombre de espaldas, iba a tocar su hombro cuando él se me adelantó y giró sobre sus pies, mi primera sorpresa fue opacada por el frio dolor del metal...


-Hola lectores, les agradezco infinitamente que se tomen el tiempo para leer mi historia, aunque no tenga por ahora tantos comentarios ni estrellitas significa mucho para mí que ya estemos llegando a los 400; siempre me ha gustado escribir pero es la primera vez que me animo a publicar; a veces uno mismo no es buen crítico, así que me gustaría que me dijeran que les parece, si tienen algunas sugerencias; sé que al ser una historia diferente (no es romance ni de vampiros) no es tan popular, sin embargo me gustaría llegar a un público variado.

Sigan leyéndome y traten de descubrir el misterio y mil gracias nuevamente.-

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