EXTRA: DECLARACIONES

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Jeremy.

9 AÑOS ANTES:

Hoy me graduaba de preparatoria, estoy super nervioso.

Carajo, pensé que este día nunca llegaría, en serio, tres veces estuve en peligro de repetir año y con la ayuda de las fuerzas místicas del universo pude sobrevivir y aprobar cada uno de ellos.

Llevaba puesto la toga y el birrete, abajo de eso tenía puesto una sudadera de minion y unos jeans rotos, junto a unos tenis negros con detalles blancos.

Mi madre paraba de pellizcar mis mejillas y repetirme lo orgullosa que estaba de que me graduara.

A lo lejos, divisé a la ladrona de todos mis suspiros; Skylar. Ella era la mujer más hermosa de toda la escuela — Por lo menos para mí —, y, aunque no me prestara mucha atención, yo estaba perdidamente enamorado de ella.

Había sido así desde los catorce, ella y yo no habíamos cruzado palabra pero yo sabía mucho de ella.

No porque fuera un acosador, sino porque uno de mis amigos <<Jack>> había salido con ella, pero no había durado; además, su ex novia <<Madeline>> había sido amiga de Sky y me dijo cosas que, supuso ella, que me ayudarian.

Intenté acercarme pero Daniel — Un bully que no tenía otro pasatiempo más importante que molestarme — me interceptó a medio camino.

— No lo lograras — Se cruzó de brazos.

¿A qué se refería?

— ¿De qué hablas?

— No lograras nada con Skylar, no podrías.

Odiaba que me dijera eso, ya que mi autoestima estaba por los suelos y, de paso, yo era el centro de atención en mi grupo de amigos cuando se trataba de echar veneno por la boca.

— No puedes saber eso...

— ¿Quieres apostar? — Me interrumpió.

Ah, no. Eso no.

— No voy a hacer una apuesta contigo, y menos si es por Skylar.

— ¿Por qué? ¿Te da miedo?

— No, pero soy lo suficiente hombre como para ponerme a apostar por una chica — Lo encaro — ¿Que clase de imbécil eres? ¿Enserio harás una estúpida apuesta sobre un ser humano y más que nada... una chica? Creo que 'After' ha demostrado que esa es una idea muy estúpida — Me burlo.

— No te hagas el gracioso.

Eso no me lo podía quitar.

— No me hago, lo soy — Sonreí con suficiencia.

Le pase por al lado, importandome una mierda lo que dijera.

Justo en ese momento sonó la campana y luego el horrendo chillido de los altavoces.

— Estudiantes y representantes, por favor, reunirse en el auditorio para la entrega de diplomas — Habló la prefecta, por los altoparlantes.

— Vamos, bebito mio — Dijo mi madre, enganchandose a mi brazo.

Cada vez que me llamaba <<bebito mio>> sentía que iba a explotar de la vergüenza.

Fuimos al auditorio y organizaron a nuestros padres mientras nos llevaban a nosotros a un espacio detrás de la tarima.

Por obra del destino acabé justo al lado de Skylar.

Era mi oportunidad, si no lo hacía hoy no podría hacerlo jamás.

Nosotros (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora