Nuevas Especies Salvation

Capítulo 24

Allison se despertó lentamente por el llanto de Annabeth, la arrullo un poco y se calmo. Allison se sentía renovada, aun muy cansada pero mejor.
Su bebé estaba un poco inquieta. Se removía mucho y respiraba con pesades. Eso la alarmó un poco hasta que por el rabillo del ojo vio un movimiento y se tenso. Era Salvation, la alivio por una parte y por otra se enfureció más.

-Por favor, puedo oler tu irá. Déjame.. Déjame hablar contigo, tengo muchas preguntas.

-¿Con que cara te atreves a venir aquí?.- Preguntó furiosa.

Salvation bajo la mirada, no había que decir. Lo había arruinado todo.

-Quiero estar con ambas. Por favor. No deje que mi cobardía apague tu amor. Y si no me amas, Yo puedo amar por los dos. - Salvation puso cara de cachorro y se acercó a Allison, Su expresión era de verdadero arrepentimiento.
No, que le cueste. Pensó Allison.

-Gánate mi perdón, Salvation. - Dijo con la mirada alta y un semblante serio.

-Lo que sea. - Susurro hincandose.

-Bien.
Hoy le harán las pruebas a Anna.

-No es necesario.

-Quiero confirmar si esta bien.

-Está bien. - Susurro derrotado. - ¿Puedo cargarla?

-Es tu hija también.

-Gracias. - Sonrió.

Se puso de pie y arrullo a la niña, lágrimas se formaron en sus ojos. Era muy hermosa. Sus ojos de un amarillo intenso.

-Sus ojos son como los mios. - Dijo Salvation.

-¿Qué?. - Preguntó Allison confundida. - Son grises Salvation, los tuyos son dorados.

-No, son como los míos, aunque juraría que eran Grises también.

Ambos arrugaron el entrecejo y se miraron ¿Podría su bebé cambiar de color de ojos? ¿Era eso posible?

-Tendremos que preguntar.

Allison tomó a Annabeth y asintió en respuesta. No tenía sentido, ninguna especie podía hacer eso. A exención de Jericho, sus ojos parecían rojos cuando se enfadaba. Pero tenia ADN Gorila.

-Eres mi pequeña especial. - Le Canturreo y la niña río en respuesta.

* * *

Los resultados de las pruebas de Forest dejaron atónitos a todos. La droga de la cría inundaba su sistema. Esta era diferente, mejorada por 10, casi indetectable, más fuerte. Incrustada muy dentro de su pecho se encontraba un dispositivo que multiplicaba la droga cada hora. Nadie se explicaba como pudo estar expuesto a ella y el estaba en su forma más primitiva. Su pulso estaba desbocado y el dolor que sentía le quemaba las entrañas.
El dulce aroma de la hembra de la otra habitación no ayudaba...

Katie, la nueva asistente de Trisha, insistió en estar presente con ella para ayudarla. Había visto a Forest un par de veces y el siempre la dejaba sin aliento. Forest había intentado cortejarla pero no le parecía correcto salir con el hijo de su jefa. Katie estaba por terminar la carrera de medicina, con 22 años era todo un milagro pero el esfuerzo valió la pena. Sacrificar casi toda su juventud valió cada minuto en el que no asistio a Fiestas. Tampoco el salir con chicos.
Hoy el ayudar a este hermoso hombre la enorgullecia y esperaba alejarlo de su pena.
Aunque no sabían como quitarle el artefacto sin dañarlo ya que era más fuerte que cualquier otra droga y el cuerpo de Forest jamás había estado expuesto a ella.

Miró como Trisha y el doctor Manson hablaban, no quería interrumpir pues podrían ser cosas de las especies, pero el hecho de que justo en ese momento la miraran fijamente, Trisha con una expresión esperanzada y temerosa y el doctor con la mirada preocupada y fruncida. ¿Se habrían molestado con ella?
Ambos doctores se miraron y Trisha se hecho a llorar, se abalanzó sobre ella susurrando un "Por favor"
¿Pero que rayos pasaba?

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Avisen si el Capítulo les sale incompleto.

Por cierto, ¿Quieren un libro de Forest? 7u7