¿Por qué me cuidas?

Debo verlo

     
        Ya era el décimo intento de localizar a Jack, estaba tratando de concentrarse lo más que podía, pensar en el chico de tés blanca no se le hacía demaciado complicado, pero eso a veces lo distraía de su principal objetivo y por lo tanto no le convenía ahora mismo.

     — Mierda.... ¿Dónde podrías estar gusano? — Ya se había dado por vencido solo por está vez, aunque el dragón inmortal preferiría decirle "tomarse un descanso", mañana lo volvería a intentar, no sé detendría por nada del mundo hasta encontrarlo de una vez por todas — ¿Dónde estás Spicer?

       En eso al fin logró divisar en su mente a el joven genio del mal correctamente al despejar con totalidad su mente solo dejando un recuerdo el que estaba el chico que tanto buscaba.

         Observó al chico con los ojos cerrados en una habitación bastante oscura. Sonrió con soberbia al por fin conseguir su objetivo y ahora que ya lo logró, se teletransportó hacía aquel lugar donde se encontraba quien había estado ocupando su cabeza los últimos días sin que él se diera cuenta.

      — Te encontré.... — susurro observando lo con detenimiento.

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        Los monjes estaban bastante preocupados, bueno unos lo mostraban más que otros, pero todos pensaban lo mismo con respecto a la extraña y repentina desaparición del chico de ojos rojos.

         Omi constantemente preguntaba por el a sus amigos, por si en alguno se esos días libres que les dejaban lo habían visto, ya que el no abandonada el templo casi nunca así que él era el que tenía menos probabilidades de encontrarselo.

     — ¿Están seguros que no estuvo en la última pelea? Tal vez estaba oculto entre los árboles... — Mencionó ya hartando a todos sus compañeros de lo insistente que estaba siendo con exactamente lo mismo.

     — ¡No! Omi observamos lo mismo que tu — fue aquel chico de piel morena el que habló con molestia

     — Raimundo tiene razón amiguito, además que Chase estaba allí y el pareció no haber visto nada, así que si él no vio nada que tiene una gran visión — suspiro Clay al ver la cara triste del pequeño — No estaba allí, pero tranquilo que seguro aparecerá pronto

        Con este intento de subirle los ánimos Omi le sonrió un poco y se fueron a dormir de una vez

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        Podía observar con claridad las facciones del rostro relajado del albino, se veía tan calmado y silencioso.... Nada comparado con su forma habitual de ser cuando están juntos, ruidoso, exagerado y alguien a quien costaría tomar en serio

        Estaba tan apacible, que incluso se le empezó a acercar para comprobar si lo que veía era real o que quien estaba enfrente realmente estaba vivo, a paso lento acortó la distancia hacia la cama y alzó su mano en dirección al joven.

         Cuando ya incluso podía sentir el calor proveniente de aquel cuerpo durmiente atravesado su guante, comprobando que lo que veía era al real Jack y no estaba alucinando.

          Un golpeteo en la puerta fue escuchado por el inmortal, el cual lo tomo desprevenido alejándose rápidamente del adolescente. En cuanto vió que la puerta estaba siendo abierta sin ningún cuidado, se teletransportó sin pensarlo y volvió a ver las paredes de su ciudadela.

      — Carajo... - maldijo frustrado, Por un lado se sintió frustrado por haber sido un cobarde y escapar sin siquiera pensarlo y por el otro se estaba defendiendo a su mismo diciendo que simplemente fue porque no podían verlo mostrar afecto por nadie o si no sería débil ante quien sea que estuviera allí.