Un día transcurrió desde aquella mañana, y Gohan se dedicó a planificar varias cosas de cara al viaje que haría dentro de unas horas.Continuó entrenando con su padre, Trunks y Raditz, que se unió después, para que pudieran controlar la transformación tan bien como él.
Ellos tenían tiempo de sobra para practicar, y sobretodo teniendo en cuenta que Goku era un genio por lo que no tendrían ningún problema.
Tras eso se fue a la capital de su imperio. Necesitaba obtener algunos materiales que serían muy útiles para el futuro de Trunks.
"Iru, Kab, ¿tienen todo lo que les pedí ayer?" preguntó Gohan mirando a ambos soldados, quienes asintieron yéndose hacia una sala.
Gohan les siguió y al llegar a la sala vio varias cajas, ahí estaban algunos materiales que usaba Kikono en sus inventos: scouter, cápsulas, etc.
"¿Acaso viajará, señor?" preguntó Kab con curiosidad pero Iru golpeó su cabeza, "¡Oye!"
"¡No seas entrometido Kab, lo que haga el emperador no es asunto tuyo!" recriminó Iru.
Los dos soldados se miraron molestos, y nuevamente Gohan se interpuso en medio de ellos para así poder evitar cualquier pelea.
"Debo ir a un lugar y estaré ausente por un tiempo" contestó Gohan sonriendo, "Estaré al pendiente pero confío en que trabajen bien"
"¡Claro que sí, señor!"
Gohan sonrió. Abrió un maletín donde habían varias jeringas, jarabes y demás. Todo eso eran cosas que mandó fabricar Gohan hace meses.
Aprovechó el líquido de las máquinas de curación para crear inyecciones intravenosas, jarabes y pastillas a base de aquel líquido.
Así la recuperación sería más efectiva, tenía pensado eso desde Namek pero no pudo tomar la nave de Freezer. ¡Así que tomó su imperio!
"Bien" murmuró el pequeño guardando cada maletín en una cápsula diferente, "Creo que eso es lo que más necesitaré, ¡ya me voy chicos!"
"¡Tenga un buen viaje, señor!" exclamó Iru parándose firmemente ante él y Kab le imitó.
Gohan sonrió mientras colocaba dos dedos en su frente. Necesitaba concentrarse antes de usar la teletransportación para dirigirse a su destino.
"Bien, ¡sentí su energía!" discurrió Gohan desapareciendo al instante, ante la mirada estupefacta del par de soldados ante él.
Y reapareció en un lugar con el que estaba bastante familiarizado. Era la atalaya de Kami, aunque ahora el dueño del lugar era Dende.
Sintió nostalgia recordando sus peleas con Piccolo, y pensar que habían pasado tres años desde aquel entonces. Sí, el tiempo volaba.
"Eres tú, ¿qué te traes por aquí?" preguntó Misterio Popo, que había dejado de regar las plantas al percatarse del pequeño invitado.
"Hey Mister Popo, venía a ver a Kami-sama" contestó Gohan con una sonrisa, y no esperó mucho ya que Dende apareció al momento.
"¡Hola Gohan! Hace mucho tiempo que no te veía" Dende fue hacia él con una sonrisa, desde los sucesos en Namek no se vieron de nuevo.
"Lo lamento, casi no tuve nada de tiempo últimamente" Gohan se rascó la nuca con una sonrisa. Apenas pudo estar con su madre.
"No es nada, ¿te puedo ayudar en algo?"
"Sí, verás, ahora que eres el nuevo Kami-sama debes saber algo sobre la habitación del tiempo de la atalaya, ¿no?" inquirió Gohan seriamente.
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I'm Gohan!
FanfictionUgh, nunca esperé que mi vida acabara así... ¡Un momento! ¡Todavía no se había terminado! Con esta nueva oportunidad me convertiré en el ser más fuerte del multiverso Dragon Ball, ¡ya lo verán! ¡Aquí comienza mi leyenda! ¡Soy Son Gohan!