POEMA VII

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Exhausto me hallo esperándote en la orilla del vacío,
contando espirales en tu nombre, divagando sobre mi caída me encuentro sentado al borde del abismo.

Es un ir y venir de pensamientos vanidosos que hieren y golpean mis heridas, como del trueno un estruendo.

Confundido y maltratado por el movimiento de las mareas cambiantes, aturdido y enervado por la ausencia de tu presencia.

Mi vida pierde equilibrio y sentido si tú no estás aquí conmigo, respirando el aire cautivador del atardecer y mirándonos perplejos como unos tontos enamorados.

Miel dulce amarga que se derrama en nuestras aventuras, en aquellos momentos de perjurio y ventura.

Sedimentado quedé bajo las arenas de un desierto que ocultaba tus recuerdos,
en forastero me convertí navegando en aquel oasis en busca de hallar una gota de agua que reviva nuestro amor.

Más que palabrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora