Capituló 14

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Min Yoongi

Los autos se ponen en marcha. Veo la hora y ya pasan de las 3 am y la mujer que viene a mi lado parece que todo rastro de alcohol que tenía en su cuerpo se a ido.

Ella me sonríe mientras se acerca lentamente a mi rostro el cual toca suavemente. Sus dedos se pasean por mis mejillas y no tengo idea de que diablos piensa o que quiere hacer, pero se detiene cuando su pulgar acaricia mi labio inferior y es donde noto sus intenciones.

Sus labios se mezclan con los míos y en menos de cinco segundos está sobre mi, el sabor a whisky me termina de embriagar y solo me da tiempo de subir el vidrio insonoro que tienen nuestras camionetas.

Mis manos recorren su espalda y sus piernas suaves, su cuerpo es más liviano de lo que pensé.

Muerde lentamente mi labio inferior haciendo que mi miembro me incomode, mierda. El movimiento de sus caderas comienza a empeorar la situación.

— ordénale que se detenga — susurra en mi oído, dejando pequeños besos en el — será solo un momento

Me lo pienso varios segundos y termino aceptando cuando ella nuevamente se apodera de mi boca y la deja solo para dar la orden

— detente— obedece sin preguntar nada. Es arriesgado detenernos en medio de la nada y con ella aquí aún más.

Ambos guardias bajan sin decir una palabra y por la ventana visualizo cómo uno cruza la carretera y el otro se aleja del auto.

Su vestido se le a enrollado en la cintura y con suavidad bajo sus bragas color blancas  guardándolas en mi bolsillo.

Sus manos desabrochan mi vaquero y saca mi miembro el cual acaricia sin dejar de besarme, el ambiente se intensifica y yo solo me veo penetrándola. 

Su tacto me abandona por unos segundo y veo cómo en su bolso rebusca lo que imagino que es

— sin protección no hay diversión — me sonríe mostrando el sobre plateado que tiene entre sus dedos

Lo abre y lo coloca en la punta de mi miembro deslizándolo lentamente hasta que llega al final. Lo hace sin dejar de mirarme

La comodidad la olvidamos, al menos yo si; pero a ella parece  importarle poco ya que de nuevo toma mi miembro en su mano y lo coloca en su entrada.

Están excitante que tenga el control

— ¡joder!— exclama mientras desiende

La piel se le eriza, sus pezones se marcan en la fina tela de su vestido y la veo morderse su labio inferior.

Mis manos aprietan su cintura ayudándola a bajar, siento como sus paredes se expanden y siento la humedad de su entrepierna cuando llega al final

Mi extasis me juega en contra cuando mis manos viajan a su cuello y la acercó lentamente a mis labios, labios pecaminosos que hoy me han robado el aliento.

Nuestras lenguas danzas al mismo compás y no entiendo de donde a salido tan excitante mujer, mujer a la cual debería rendirle respeto y no estármela follando en un auto en medio de la nada

La Dama de la Mafia / KTH+18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora